--- EDITORIAL ---

Javier, el anticristo y María, la virgen pecadora

No sé si conocen la historia de Javier, un recién nacido cuyo cordón umbilical ha salvado a su hermano mayor de una corta vida llena de penurias a causa de una enfermedad hereditaria. Todos estaremos de acuerdo en que es una historia llena de ternura y esperanza.

Pues no, la iglesia católica, empeñada en seguir el camino del despropósito y a través de su líder, Joseph Ratzinger ha declarado que casos como este “ponen en peligro a la humanidad”. Si alguien es capaz de comprender esta relación causa-efecto, que me lo diga, por favor, porque es algo se escapa de mi comprensión.

No solo el señor Ratzinger ha soltado incongruencias por su boca, también la “experta” en bioética Lucetta Scaraffia se atrevió a comparar el “caso Javier” con los experimentos nazis. Sin embargo, en aquella época la iglesia no alzó la voz contra dichos experimentos (infección de personas para comprobar su resistencia, esterilizaciones, envenenamientos, injertos óseos...), mientras que sí lo hace ahora. Supongo que para ellos es más importante un embrión que un comunista, un judío o un gitano. Esta mujer también asegura que el nacimiento de Javier es un acto egoísta. Dar vida a un niño sano para que además mejore la vida de su hermano es un acto egoísta. Digo yo que esto querrá decir que el hecho de que la virgen María diera a luz al hijo de Dios para salvar a la humanidad debió ser el acto más egoísta de la historia siguiendo ese razonamiento.

Esta es la iglesia del siglo XXI. Condenan las relaciones sexuales por placer, pero protegen a los sacerdotes pederastas; claman contra los métodos anticonceptivos y los abortos e invierten su dinero en farmacéuticas que se dedican a ello; promueven la solidaridad, y viven entre lujos. ¿Es esta la institución emisora de la ética y la moral? Permítanme soltar una carcajada.

Y no quiero dejar este tema sin dejar clara mi preocupación por la existencia en la vida política de España de gente como Longinos Álvarez, militante del Frente Nacional. No sólo dice estar de acuerdo con la postura de la Iglesia, sino que ha declarado, y cito textualmente: “¿qué será lo próximo, elegir los genes para hacer niños rubios de ojos azules?”. Rubios y de ojos azules, ese es el ideal del señor Álvarez. Podría haber dicho más inteligentes, más fuertes, más sanos, pero no, el buen niño es el que tiene aspecto ario. Creo sinceramente que le ha traicionado el subconsciente y debería aclarar esa declaración.

Olatz Abbass

Leyenda Urbana

“El capitalismo es el único sistema que funciona”. ¿Cuántas veces hemos oído estas palabras o incluso las hemos pronunciado? Seguro que muchas. Es algo que todos tenemos claro, una verdad universal. Pero, cuando pronunciamos esta frase, ¿realmente sabemos lo que decimos o es algo universalmente aceptado porque así nos lo han enseñado desde pequeños?

No voy a negar que se han hecho muchas tropelías y calamidades, supuestamente, en nombre del comunismo. Pero ¿están seguros de que no se han hecho barbaridades parecidas por culpa del libre mercado? Niños que han perdido la infancia trabajando para multinacionales, sin tiempo para jugar o formarse; invasiones de países, con miles de muertos inocentes, sólo por conseguir petróleo; la deshumanización de las personas, que prefieren ser propietarios de un aparato de dudosa utilidad pero muy bien publicitado, en vez de ayudar con ese dinero a alguien necesitado; la destrucción de la propia tierra en la que vivimos, porque si reducimos nuestro daño al planeta podemos perder competitividad económica, el olvido africano, las desproporcionadas diferencias en poder adquisitivo...

El capitalismo nos ha convertido en maquinas hechas por y para gastar dinero. ¿En serio hay tanta diferencia, cualitativamente hablando, entre ambos sistemas? No lo creo. Y sin embargo, la mayoría de las fuerzas políticas españolas siguen apoyando el capitalismo a ultranza. Pero eso no es más que el reflejo de la sociedad. Aunque parece que algo está cambiando, cada vez es más difícil convencernos de que el libre mercado es la única posibilidad, porque vemos que no, no está funcionando. Pueden intentar vendérnoslo perfectamente envuelto y con un lacito, pueden intentar convencernos, pero no pueden evitar que veamos la realidad cara a cara: esto no puede seguir así y va a acabar explotándonos en la cara.

Desde este puesto privilegiado que tengo, me gustaría erradicar de la sociedad esa lacra que es la frase “El capitalismo es el único sistema que funciona”. Por favor, si no estás profundamente convencido, si no has meditado ampliamente al respecto, no la digas. Estarías propagando una leyenda urbana.

Olatz Abbass

Y permítanme terminar con una canción, escrita hace más de 30 años, pero que es perfectamente extrapolable a la actualidad.

Si se despierta mañana
Será como siempre al son del reloj
Y se levanta con camisa y corbata.
Ya no es un hombre.
Es una máquina extraña,
Vestida de gris.
¿ Cómo puede vivir ?

Y cuando duerme de noche
Sueña con letras y empeña su piel
Para pagar los plazos del coche
Y la gasolina
Que va ha ser su ruina
Con precios así
¿ Cómo puede vivir ?

Su mujer hace milagros
Y estira su sueldo comprando mejor,
Rebajas y saldos, pero todo está caro.
Ha subido el tabaco.
Ya no hay nada barato.
Si Seguimos así
¿ Cómo se puede vivir ?

A fin de mes llueven cuentas,
Recibos de agua, de luz y de gas.
El colegio del niño y los plazos del piso.
Y si esto es vida
Él no quiere vivirla,
Prefiere morir.
¿ Cómo se puede vivir ?

Cada día que pasa
La vida sube más,
Todo está por las nubes
¿ Quién lo alcanzará ?

Evangelina Sobredo Galanes (Cecilia)

La mala leche

Les voy a contar la historia de mi pueblo. En mi pueblo, todo el mundo se dedicaba a hacer quesos y casi todos tenían una vaca. Sin embargo, había zonas en las que la gente también tenía cabras, y en otras incluso yaks. Un día, el alcalde decidió promocionar el queso de vaca y prohibió a la gente comer el queso de las cabras y el de lo yaks.

Pasó el tiempo, y el alcalde se fue. Entonces, los nuevos dirigentes decidieron promocionar a su vez el queso de las cabras y los yaks, tanto como el de vaca, en las zonas donde era producido, sin obligar o prohibir a nadie comer de uno u otro queso. Cada uno sabía de la existencia de los diferentes tipos e ingería el que prefería, o incluso varios.

Sin embargo, ciertas habitantes, que sólo poseían vacas, protestaron contra esta medida, alegando que se estaba poniendo en peligro la existencia de los quesos de origen vacuno. La mayoría de la gente no entendía nada: nadie obligaba a nadie a comer queso de cabra o yak, sólo te informaban de su existencia y sus propiedades, al igual que con el de vaca. Además, esos tipos de queso habían existido desde siempre, o al menos ellos no recordaban lo contrario.

Sin embargo, las protestas cada vez eran más intentas, y la gente empezó a creer que realmente el queso de vaca estaba en peligro, aún sabiendo que ellos mismos eran los productores y propietarios de las vacas y los quesos. Las protestas dieron lugar a manifestaciones, y los propietarios de cabras y yaks se sentían oprimidos y faltos de libertad, y así lo expresaban.

Esto enfureció aún más a los defensores del queso vacuno, y alegaban que éste tenía más salidas en el mercado.

Como ven, parece una historia absurda y probablemente no la crean ni entiendan la postura de los fabricantes de quesos de vaca. Pero ¿y si les digo que mi pueblo se llama España y a la leche de vaca la llama castellano?

Olatz Abbass

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