[PN] Proposición de Ley sobre la obligatoriedad de origen en etiquetado

FDP: 48 horas

(Cabanes no da las gracias al presidente)
Estimados caballeros, señorías,

Nos encontramos aquí porque hemos presentado una proposición de ley que consideramos una propuesta de futuro para La Franja, los franjolís tenemos que hacer campaña por nuestro producto nacional,  como llevamos haciendo desde el Partit Nacional desde nuestra fundación, por lo que representa nuestra nación, estableciendo una campaña fuera de la política de consumos nacionales, podremos impulsar el empleo y las empresas que habitan nuestra nación.

Desde el Partit Nacional consideramos esta propuesta como una propuesta que puede ser aceptable por todo el arco parlamentario, consideramos que no es exclusiva para ningún grupo político y que todos deberían estar de acuerdo con que los productos franjolís deberían ir primero, es por eso que presentamos esta ley. Consideramos que esta medida puede ser el comienzo de una industrialización Franjolina efectiva, porque no podremos comprar franjolí sino producimos franjolí y tampoco podremos producirlo sin una defensa efectiva del producto nacional contra la competencia internacional desleal, cuestión central de este tema.

Porque el producto nacional es un producto que ha sido producido de acuerdo a nuestras normas que tienen mejores estándares que, por ejemplo, uno de los mayores productores de este mundo, China, que posee condiciones laborales y de fabricación que generan una competencia desleal que a la hora de crear productos entorpece el mercado interno de nuestro país y de muchos otros en el mundo, que hace que el dinero no se mantenga en la Franja, sino que vaya para allá. Nuestra campaña de compra nacional, a la que llamamos todos a que se sumen, podrá hacer que la Franja vaya primero y aprobando esta ley nuestros ciudadanos sabrán los productos que están comprando si son nacionales o no lo son.

Además, esta ley que hemos presentado tiene la garantía de que las empresas deberán poner lo que tienen dentro de la verdad ya que tiene un consejo regulador propio de este tipo de leyes en todo el mundo, un consejo regulador que autorice ese origen y no que lo deje al banalismo de las autoridades o del govern sino a un grupo de gente formada, con experiencia y externa que audite la empresa en cuestión, como se hace en todo el mundo en este tipo de calificaciones.

Que se produzca y compre franjolí es algo que llevo en mi corazón, es una manera de promover la economía nacional por y desde la Franja sin ninguna injerencia externa, apoyando una industrialización del país, recuperando nuestra economía y produciendo empleo desde dentro de nuestra tierra, creemos que podremos recuperar a la Franja, y lo podremos hacer sin necesidad de rendirnos ante nadie, por ello pido que voten a favor de esta ley, para comenzar con la industrialización efectiva.

Muchas gracias.

FDP: 48 horas.

Moltes gracies, president.

Señorías:

La proposición de ley del Partit Nacional es oportuna, sin ningún atisbo de dudas. Es oportuna porque nace de dos problemas fundamentales: de las consecuencias que la crisis económica ha ocasionado en el consumo y de la conveniencia de potenciar el consumo local para no dañar aún más nuestra economía.

Sin embargo, en dicha proposición se omite un aspecto crucial: el de la gestión efectiva de la calidad. En efecto, el mero etiquetado de un producto para favorecer su consumo supone un impulso a la industria nacional que puede no venir acompañado por un esfuerzo equivalente por parte de los productores. Más bien al contrario: la ventaja competitiva de saberse protegidos por una ley puede empujarles a reducir costes frente al producto extranjero, con lo que el resultado final sería que el Estado estaría favoreciendo el consumo de productos que podrían perder calidad paulatinamente frente a otros venidos del extranjero.

Por tanto, la propuesta inicial, inclusive teniendo en cuenta la enmienda transaccionada del grupo proponente, es una vía que posibilita la pérdida de valor del producto nacional al verse amparado por un etiquetado que destaca únicamente su procedencia, lo que puede hacer pensar al consumidor que eso le garantiza una calidad que realmente no está controlada, regulada ni prevista en el texto objeto de debate.

Por otra parte, es loable el intento del Grupo Parlamentario Nacional de protegernos de los productos de origen chino. (Murmullos en la bancada demòcrata.) Paradójicamente, esta ley, que pretende desprestigiar los productos de, en teoría, baja calidad y mano de obra económica, considera equivalentes en cuanto a su origen al producto chino, al vietnamita, al estadounidense, al español y al alemán: o sea, producto extranjero. Supongo que sus señorías estarán de acuerdo conmigo en que los productos alemanes no son tan peligrosos como los chinos. (Mira al señor Cabanes.) A menos que quieran ustedes salvarnos de los motores diésel de Volkswagen. (Risas en la bancada demòcrata.)

En nuestra opinión, señorías, hay otras fórmulas para garantizar la calidad del producto manufacturado, todas ellas de tal complejidad técnica e interrelación con el tejido productivo que sería más adecuado instar al Govern a su desarrollo. Otra opción, sin embargo, y aquí lo anoto como sugerencia, podría ser asumir como propio de Ribagorça el estándar de marcado CE de la Unión Europea.

Las inconveniencias del texto debatido son algo presente a lo largo de toda la proposición de ley, lo que hacía imposible que un conjunto de enmiendas parciales pudieran corregir dicha circunstancia. Eso explica la necesidad de presentar, por tanto, una enmienda a la totalidad, siendo ésta la única solución para que el texto aporte verdadero valor añadido. Lo que realmente se desprende de esta enmienda es que se generará valor añadido al consumidor, al acceder a un producto no sólo etiquetado como de su país, sino también con un sello de calidad cuando lo merezca; y también generará valor añadido al productor, al ofrecerle la denominación de origen como incentivo para mejorar sus procesos productivos y acceder a esta exclusiva distinción.

La enmienda, por tanto, comienza con la proposición de un nuevo preámbulo, haciendo referencia no sólo a la necesidad del consumo de productos nacionales sino, sobre todo, a garantizar que éstos tienen una calidad razonable.

Dicho preámbulo da paso a un primer título en el que se define el elemento nuclear de la ley, que es la Denominación de Origen. Al igual que en países de nuestro entorno, como España, Francia o Italia, determinados alimentos pueden tener una especial categorización por sus cualidades excepcionales, debidas fundamentalmente a las características geográficas de su lugar de origen, lo que justifica la conveniencia de legalizar un etiquetado de este tipo.

Pero, al contrario que en los países de la Unión Europea, que circunscriben dicha clasificación a las uvas de sus vinos, y España, que la amplía a productos como el queso, la miel o la carne, creemos conveniente que en nuestro caso se extienda a toda clase de productos agropecuarios y sus derivados, garantizando, de este modo, que la calidad de dichos productos se mantiene en estándares que lo hacen distinguibles de otros que no tengan la denominación de origen.

Las denominaciones de origen, por tanto, permitirán no sólo distinguir la calidad del producto sino también reconocer su procedencia, con lo que la distinción de calidad aportada por el productor se verá acompañada del reconocimiento que el sector merece.

La ley recoge la fórmula para el acceso a la denominación de origen y su mantenimiento. El producto alimenticio puede ser no transformado o bien transformado por procedimientos reproducibles de forma natural, lo que evita que un tratamiento industrial intrusivo aporte cualidades imposibles de alcanzar por un artesano y, en definitiva, evitando la competencia desleal. En segundo lugar establece la necesidad de que sea obtenido en el territorio delimitado por la denominación de origen y que, de ser transformado, dicha transformación se lleve a cabo dentro de nuestras fronteras, garantizando así que todo el proceso económico beneficia a nuestra economía y entroncando, de este modo, con la proposición inicial del Partit Nacional. Además, el tercer requisito resta cualquier atisbo de intervencionismo arbitrario del Estado al establecer que sólo los productos premiados puedan alcanzar la denominación de origen, y se determina que el Govern puede desarrollar este artículo para la concreción de este requisito.

Por su parte, todo producto que alcance la denominación de origen la mantendrá, de acuerdo con lo que el Govern desarrolle reglamentariamente. Esta provisión está prevista para que se establezcan controles de la naturaleza que se estimen oportunos, designando, para ello, organismos tanto públicos como privados que lleven a cabo dicho procedimiento. Por supuesto, el procedimiento de estos organismos podrá ser auditado con el propósito de garantizar su sujeción a esta ley y que su implementación no desnaturaliza la intención del procedimiento.

El segundo y último título se refiere al etiquetado, para lo cual se inspira en el principio de la proposición del Partit Nacional para implementar un sistema de etiquetado más completo y que aporte valor añadido al consumidor, que es al final lo que se propone con esta ley. Lo primero que se regula es que el etiquetado de los productos con denomiación de origen son los únicos que pueden exhibir dicha circunstancia en su etiquetado, haciendo referencia al territorio de origen para que la denominación de origen tenga sentido. Además, expresamente se prohíbe el uso del término "denominación de origen" a quienes no cumplan las condiciones para ello.

También se agrega una circunstancia adicional, inédita en el ordenamiento jurídico de nuestro país y de nuestro entorno, que es la posibilidad de que un producto elaborado con ingredientes con denominación de origen pueda exhibirlo, garantizando de este modo su calidad frente a otros productos sin tal circunstancia, siempre que al menos un veinticinco por ciento de los ingredientes utilizados tengan una misma denominación de origen.

Por último, y para no generar un efecto de competencia desleal, se permite que los productos extranjeros con denominación de origen o con menciones similares ("denominaçao de origen" en Portugal, "apellation de origine" en Francia) puedan exhibir dicha circunstancia en catalán o en su idioma de origen, acompañado de una mención al país del que procede.

Además, y de forma transitoria, se incluye una primera lista de denominaciones de origen, concordantes con las comarcas de nuestro país, que permitan a los agricultores, ganaderos y productores acogerse a una denominación de origen desde el momento de entrada en vigor de esta ley, de modo que surta efectos desde el primer momento.

Como puede verse, señorías, esta enmienda que proponemos es un conjunto de medidas orientadas a destacar la calidad del producto ribagorzano, sin que por ello quepa discriminar a productos igualmente cualitativos de otros países, con el agregado de que potenciamos la competitividad de aquellos productos que tienen una calidad superior, lo que no sólo redundará en una mejor experiencia del consumidor sino en una minimización de las posibilidades de que el producto pierda sus cualidades por someterse a procesos indiscriminados de reducción de coste sin una mejora aparejada de su calidad.

Es por ello que desde el Grupo Parlamentario Demòcrata solicitamos a sus señorías el voto favorable a esta enmienda, con la que podremos revitalizar el sector agroalimentario, impulsar la calidad del producto ribagorzano y reconocer este hecho y las especiales características de cada origen, con el valor añadido que eso generará al sector y al consumidor.

Moltes gracies.

(Aplausos de la bancada demòcrata. Azcárate bebe tres largos sorbos de agua, se enjuga la boca con un pañuelo y regresa a su escaño.)

Gracias, señora Azcárate.

Para fijar la posición de su Grupo tienen la palabra los Grupos Parlamentarios Socialista y Franjolí.

FDP: 48 horas.

FDP: Pido una prórroga para poder presentar una enmienda. Estoy yo sólo para llevar el grupo y el partido (Bernat está ocupado en el Govern) y no pude hacerlo para ayer. Estoy, además, de exámenes, por lo que resulta un poco complicado presentar las cosas en plazo y forma, ya lo siento. Solicito, pues, un breve receso para poder redactar la enmienda (una hora o así) y poder presentarla después.

FDP: Denegada. El plazo para presentar enmiendas expiró a las 19:17h del día de ayer.

Jaume Lledó, portavoz del grup parlamentari Franjolí

Gràcies president, diputados, diputades, trabajadores de las Cortes muy buenos días. señorías nuestro grupo votará abstención tanto a la propuesta de ley del partit nacional como de la enmienda a la totalidad de Demòcrates. y con que motivo se preguntarán. bueno, desde iniciativa compartimos algunos aspectos con las propuestas de los dos grupos como es la defensa de los productos nacionales frente a la competencia extranjera. también consideramos positiva la propuesta de Demòcrates, ya que, después de analizarla consideramos que el texto que han presentado servirá para empoderar al consumidor y generar un público crítico a la hora de consumir los productos de nuestra tierra. Aún así, nuestro grupo se interesó en gran medida por la enmienda presentada por el Partit Socialista, una enmienda que completaba las iniciativas anteriores y le dotaba un sentido más amplio con lo que respecta a los derechos del artesano y su producto. por lo tanto, en vista que la mesa denegó la enmienda del partit socialista, mi grupo parlamentario no se posiciona, lo haríamos en el caso de que esta cámara analizase las propuestas de la izquierda, no solo la derecha parlamentaria. para terminar, también votamos en blanco porqué hemos hechado en falta un interés mas fuerte en aclarar qual será el papel de los sindicatos en el impacto social de dicha ley. votaríamos a favor seguramente, si en la enmienda de Demòcrates se hubiese especificado las prerrogativas que obtuviesen las organizaciones de campesinos y productores de nuestro país una vez se les entregara el sello de la denominación de orígen a sus materiales y trabajo. dicho esto, muchas gracias por atenderme.

Aplausos de la bancada del grupo parlamentario Franjolí, una vez Jaume se sienta en su hemiciclo

Moltes gràcies, senyor President, moltes gràcies senyories.

Como todos ustedes saben, la nueva configuración socio-económica mundial genera un panorama completamente distinto a todo lo que hayamos vivido con anterioridad. Nuevos modelos de industria, comercio y trabajo aparecen y se expanden en este mundo globalizado que se encuentra plenamente interconectado. En este sentido, la acuciante crisis económica ha desencadenado en nuestro país una disminución notable del emprendimiento, que inevitablemente conlleva una reducción de la producción nacional. Para evitarlo, muchas empresas han buscado las formas de reducir costes.

La población de Ribagorça no puede de esta forma sino albergar la cada vez mayor preocupación de que las políticas de ahorro de costes en las empresas puedan eventualmente contribuir a un deterioro cada vez mayor de la calidad de los productos fabricados, lo que supone no sólo una grave crisis de confianza en la industria nacional, pilar fundamental y de futuro de la economía ribagorçana, sino también un riesgo sanitario, al poderse encontrar productos defectuosos que pongan en peligro la salud de sus usuarios. A este respecto, las instituciones debemos actuar inmediatamente, asegurando la calidad técnica de los bienes producidos en nuestro país.

De igual forma, la preocupación suscitada entre los consumidores por el origen, en general, de todos los productos a la venta, con vistas a favorecer a aquellos desarrollados y fabricados en países con las debidas medidas respetuosas con los derechos humanos y laborales, así como, por otra parte, proteger la producción nacional, base del comercio de proximidad que tantas ventajas genera, impele a los poderes públicos a garantizar la calidad humana de dichos productos, a fin de procurar el bienestar del trabajador y sus buenas condiciones laborales, así como la calidad ecológica de los mismos, en relación a las medidas procuradas en el proceso de obtención de los mismos para salvaguardar el planeta.

Es por todo esto que este problema ha de ser ineludiblemente tratado, a la mayor brevedad posible, pues no podemos obviar un tema con tantísimas repercusiones sociales, económicas y ecológicas, a saber los tres ejes del pensamiento político moderno. Mas el Partit Nacional, propulsor inicial de esta propuesta, no consigue vislumbrar todo el recorrido de la misma, y sólo atisba, desde su nacionalismo exacerbado y terriblemente tóxico, las causas más generales, por completo trastocadas y erradas, y por ello no puede articular una proposición legal decente, que en última instancia vaya a la verdadera y auténtica raíz del problema de la producción, no a cuestiones, que sí, están efectivamente relacionadas, pero que no son como tales el origen de ese mal que dicen combatir, y así atajar el mismo.

La propuesta del Partit Nacional, como digo, es claramente incompleta y profundamente mejorable, al no dar cuenta, por una parte, de todos los problemas referidos al tema del que trata, y de, y como inevitable consecuencia directa de lo anterior, responder con las medidas oportunas, dando, si se me permite la expresión, meros palos de ciego al aire, buscando una piñata inexistente, pero ellos a lo suyo, convencidos de que existe y de que dar golpes arbitrarios y sin cohesión ni coherencia arreglará el asunto. Es así que se limitan a tratar el tema de la nacionalidad, obligando a poner una etiquetita que diga "Producto de la Ribagorza", así como a los productos extranjeros decir de dónde proceden, pero sin ir nunca más adentro, pensando que esto quizás generará algo de mejora, cuando está claro que esto no soluciona los problemas de calidad técnica, humana y medioambiental. Sinceramente, para presentar esa chapuza de ley, no presenten nada, pues quedan en evidencia.

Por su parte, Demòcrates ha presentado su enmienda, en un ejercicio de responsabilidad loable ante este... bueno, es que ya no sé ni como calificarlo, sinceramente. Y yo les digo a las señorías del Partit Nacional: aprendan al menos un poco de la señora Azcárate, déjense contagiar algo bueno, como poco. No compartiré con ella muchísimas cosas, pero a aquellos que son buenos legisladores se les debe reconocer ese mérito, y a los que no lo son, enseñarles cómo es una buena propuesta de ley, para que mejoren. Y es que formalmente, y sin duda alguna, la enmienda propuesta por la señora Azcárate lo es.

Ahora bien, yendo a lo que nos ocupa, que no es tanto puramente la forma de la ley, como el contenido de la misma, hemos de plantear nuestro alejamiento de dicha enmienda. Y es que esta enmienda está completamente desvirtuada, tanto del propio nombre de la propuesta original del Partit Nacional, como, aunque en menor medida, de los objetivos plenos a los que quiere o pretende apuntar para solucionar, los cuales, a su vez, no son ni mucho menos tan ambiciosos como los que desde el Partit Socialista consideramos necesarios de solucionar.

Porque la enmienda de Demòcrates, si bien amplía el diagnóstico de problemas, se deja en el tintero el lote completo que planteaba al principio de mi intervención. Además, y como ya argumentaba el señor Lledó, muy acertadamente, señorías de Demòcrates, ¿sólo les interesan los alimentos? Quiero decir, es un propósito muy loable, proteger la producción alimenticia, y no en vano es una parte importante de nuestro PIB, pero hay más actividades productoras interesantes y susceptibles de ser protegidas por las razones que ustedes dan en su propio preámbulo a su enmienda, tales como la industria textil artesanal, la cerámica, o, en general, todo lo propio y tradicional de Ribagorça, patrimonio de nuestro país que debemos proteger, así como a aquellos que perviven nuestra esencia en su producción, a los artesanos de Ribagorça, de todos los tipos.

Así pues, consideramos que el único texto completo que acomete todos estos males, solucionándolos, es el presentado por mi compañero el señor Carbonell, por desgracia fuera de plazo, ante la Presidencia de esta Cámara. En este texto se busca, mediante una perspectiva integradora, mejorar la ya de por sí buena, aunque como he explicado, insuficiente, enmienda de la señora Azcárate, añadiendo y corrigiendo las faltas de la misma y sus lagunas, para actuar definitivamente en este tema.

Por todo ello cuanto se ha explicado, no podemos de ninguna forma apoyar la proposición inicial del Partit Nacional. No es de recibo apoyar tamaña chapuza a este respecto, no se puede pretender arreglar nada con ese articulado ridículamente corto y claramente ineficiente, al menos, respecto a los objetivos que se plantea este mi partido. De igual manera, no apoyaremos la propuesta de la señora Azcárate, al menos directamente,. Cuando ésta no trata todos los problemas de fondo y se centra sobre un aspecto importante, sí, pero no global, no puede recibir el apoyo de este Grupo Parlamentario, máxime si apoyarla significara dar la espalda a todos los artesanos que esperan una regulación de su trabajo artesanal mediante algo tan destacado como la "Denominación de Origen", algo sencillamente impensable.

No obstante, tampoco queremos generar una situación de alegalidad en esta materia y ser los causantes de la misma. Es mejor regular correctamente, pero cuando no se puede por la casuística propia del devenir de los acontecimientos, es mejor siempre regular algo y hacerlo medianamente bien que no regular nada, o que regular mal. Y dado que la enmienda de Demòcrates algo regula, y ese algo lo regula bien, y en tanto que nuestra abstención posibilita la aprobación de dicha regulación, no posicionándonos en contra de nuestros ideales, pero tampoco a favor de lo que no nos parece del todo correcto, procederemos a votar en tal sentido.

Moltes gràcies.

Gracias a ambos.

Para cerrar el debate tiene la palabra el proponente de la Ley. Señor Cabanes, adelante.

FDP: 48 horas.

Bravo por distorsionar nuestra ley señora Azcárate, señor de Carbonell,

En cuanto al oportunismo, es que las leyes son oportunas señora Azcárate, nacen de la necesidad de hacer algo, sino no se hacen. Voy a hacerla un favor y es obviar que su propuesta nace del oportunismo de la nuestra y que encima lo hace pisándola y quitándola el valor y la razón de la misma, repetimos, la competencia desleal internacional, porque no es la mala calidad china, que la es, y si tiene alguna duda vaya a preguntar a las farmacéuticas cuál es la probabilidad de contraer efectos secundarios entre fármacos realizados allí y los realizados aquí. Volviendo al tema, la razón por la que realizamos esta ley es la competencia desleal internacional y que también es vietnamita, por cierto. Si hablamos de oportunismo, podemos hablar de que el término "acuciante crisis económica" lo han utilizado ustedes dos, eso sí que es oportunismo.

En cuanto a que nuestra ley carece de puesta en marcha pues es que no la requiere señora Azcárate, señora Borrel, es que son las empresas las que tienen que estar al corriente de la legislación y la puesta en marcha aparece clara, en cuanto se publique en el DOE, así que yo, no las entiendo a qué se referirían ustedes.

En cuanto a que omitimos la gestión efectiva de la calidad... no me haga reír señora Azcárate:

Como muchos de aquí sabrán, existen vinos de ribera del duero, vinos del bierzo, vinos de calatayud, vinos de cangas, todos ellos son denominaciones de origen y no por éllo describen una comarca, al revés, se busca el valor local o geográfico, lo que han hecho ustedes es una chapuza geográfica al determinar las denominaciones de origen por cada una de las comarcas cuando se podrían hacer más ricas y variadas añadiendo cada uno de los pueblos y haciendo un estudio previo de las peculiaridades que se exigen para una denominación de origen o haciendo un estudio previo del mercado y sus necesidades ante de establecerlas y no dejarlo todo al azar.

Sí, señora Azcárate, peculiaridades, para las denominaciones de origen se exigen peculiaridades que sólo esa denominación posee, por ejemplo, el queso manchego debe tener unos microorganismos determinados y estar elaborado con leche de oveja de la raza manchega, estas peculiaridades se verifican mediante análsis, cosa que ustedes y también me refiero a los socialistas, no han incluído en la ley, es que ni siquiera han incluído un consejo regulador de las denominaciones de origen que se asegure de que esos procedimientos de los que ustedes hablan que se cumplan.

Por no hablar de lo pobre que nos parece que se requiera un premio, es que lo que usted está proponiendo es que el señor Balañà si quiere, por poner un ejemplo, se monta una ceremonia de premios alimentarios y da un premio a su prima (mira a la señora Azcárate), que le cae muy bien y de ahí nace una denominación de origen y como lo controla el gobierno y este señor forma parte del partido del gobierno, pues nada, todo adjudicadito. Es más, las denominaciones de origen no corresponden a premios, corresponden a un proceso histórico. ¿Sabe qué es lo mejor señora Azcárate? que no está exigiendo nada, en vez de un premio podría podido pedir una ISO9001 de calidad, una certificación internacional de calidad BRC, o una IFS, certificaciones más serias que requieren de un empeño mayor pero claro, se ve claramente que esta ley nace desde la ignorancia y se observa sólo con mirarla. Y sí, esas certificaciones aseguran calidad y seguridad, se lo digo yo que Espadalé tiene experiencia en el sector y me lo ha contado.

El estándar de mercado CE, vamos a obviar que primero no implica calidad y luego vamos a poner un ejemplo, se lo podría haber añadido a la nuestra y quizás hubiéramos estado de acuerdo en algo, también podrían habernos consultado y les hubiéramos dicho que es mejor la ISO9001, de calidad, que es una norma mundial y no sólo europea, otra muestra más de su desconocimiento que nos llega a la cámara. Y el marcado de la CE es para todo tipo de productos, usted nos quiere censurar a los alimentos y ni siquiera escoge un estándar alimentario de los que he hablado antes... en fin, no me voy a repetir, sólo voy a decir que lo mejor de todo es que lo anotó como sugerencia.

Vemos además que tiene interés en que el control de las industrias lo realicen los políticos ¿por qué los políticos tienen que meter la mano en alimentación o en cualquier otra industra? ¿no pueden hacer consejos reguladores, como en todo el mundo? Otra muestra más de que desconocen lo que es la denominación de origen. Lo mejor de todo es que la enmienda socialista dejaba la opción de quitar denominaciones de origen al govern... cuánto desconocimiento, para chapuza, la de su grupo, señora Rosell.

Señora Borrel, nosotros sólo planteábamos algo sencillo como un sello que identificara su nacionalidad, ustedes dicen buscar calidad, pero es que no conocen lo que es calidad en la industria, porque por ejemplo para la industria alimentaria podría haber exigido que estas tuvieran un certificado BRC, que exige que la dirección de la empresa emplee el dinero y las técnicas necesarias para un proceso seguro y de calidad, o para algo más general haber sugerido, como ya le he dicho a la señora Azcárate, una ISO9001, es que sus dos leyes parten de lo mismo y si se estudian, son iguales que la nuestra, porque no tienen ningún tipo de mecanismo de aseguramiento de la calidad, es que ni siquiera la suya, que acaba de decir que buscaban asegurar que no hubiera el deterioro en la industra, le voy a poner un ejemplo: sólo exigen la artesanía que si me permiten una obervación durante su experiencia, Espadalé una vez me contó que auditando artesanos encontró uno que para mantener la leche sin que se sedimentara utilizaba una rana en el cántaro, no hace falta que les explique qué se encuentra en el intestino de las ranas, según sus leyes de calidad, esto es posible y suscitable de denominación de origen, señorías.

Por otro lado hay algo que no nos quedó claro a Espadalé y a mí, ¿qué es un proceso químico natural? señora Borrel, ¿está exigiendo que se haga la transformación en base a organismos vivos? ¿cómo se reproduce naturalmente de manera industrial un proceso textil? Hagan el favor y no nos tilden de chapuza cuando lo suyo es ininteligible.

¿Quieren plantear una ley de denominaciones de origen? Hagánlo bien, tengan decencia, retiren su enmienda y contacten (mira a las dos bancadas) con nosotros para que les asesore en cómo se hace una ley de denominaciones de origen, porque es que señora Azcárate, señores socialistas, parece que en alimentación ni en industria sus grupos no conocen nada el sector.

Repetimos que nosotros sólo buscábamos darle un tinte nacional a los envases y ya está, porque consideramos que para exigir más hay que hacer un estudio a fondo del que no disponemos, pero es que vosotros tampoco, es que sus leyes a los ojos de alguien que trabaja en industria da pena ¿es así o no señor Espdalé? (Espadalé asiente con una sonrisa). Entonces yo les digo, comparado con la ley que presentamos ¿dónde están el resto de productos? ¿dónde está el sello al que se pueden acoger quienes no tengan denominaciones de origen? ¿si quiero que mi empresa de transfusiones de sangre ponga que es de la Ribagorza, a qué me ataño? chapuzas, censuras... sus enmiendas han dado pena así que no vengan a insultar nuestras propuestas basadas desde la sencillez y desde el patriotismo que supone defender a nuestra patria de la competencia internacional desleal, un tema que ninguno de ustedes ha tratado.

¿Quieren hacer una ley de denominaciones de origen? Estoy seguro de que Espadalé estará encontado de colaborar (Espadalé vuelve a asentir), quizás entre todos podamos hacer algo de provecho y no esas leyes hechas desde un profundo desconocimiento de los sectores industriales.

Muchas gracias.

Aplausos de la bancada nacional

Gracias, señor Cabanes.

Una vez finalizadas las intervenciones vamos a proceder a la votación de la Proposición de Ley.