Gasolina en peligro de extinción en París

AdminComandante escribió:

Gasolina en peligro de extinción en París

El coche eléctrico es una obsesión reciente de las marcas de automóviles. Nacieron como un proyecto innovador pero lejano. La preocupación por el medio ambiente y la subida de los precios de los carburantes, lo han vuelto perentorio. Las dificultades son las mismas que han existido siempre para este producto, cuyos remotos prototipos datan de principios del siglo XX.

Las carencias tecnológicas principalmente en lo relacionado con las baterías, su precio o su recarga, y la presión de las ambiciosas petroleras, han lastrado su desarrollo en la última década.

Pero de unos años a esta parte, la perspectiva para estos modelos está cambiando y los principales actores de la industria están realizando progresos en el abastecimiento energético. En este sentido, los usuarios van por delante de los fabricantes que dicen “tendrán que esforzarse por satisfacer la demanda”. En la edición del Salón del Automóvil de París de este año, serán los reyes, informa theinquirer.es.


Carlos Ghosn, director general de Renault lo achacó a las “colosales inversiones necesarias para los automóviles eléctricos” e incidió en que “la cuestión no es si la demanda será suficiente, es si la oferta será capaz de seguir el ritmo de la demanda que ya está presente”.

De los múltiples modelos eléctricos que se podrán ver en la feria, destacará el diseño de Pininfarina. No correrá tanto como los Ferrari o Maserati que han salido de sus dibujos, pero es un coche pequeño, práctico y que utiliza células solares para ayudar a recargar las baterías de litio.

El salón, lastrado por la crisis
El Salón del Automóvil de París abrió esta mañana del sábado sus puertas al público en su 110 edición marcada por los efectos de la crisis financiera que se está dejando notar con un fuerte bajón de las ventas en la mayor parte de los países europeos.

La ministra francesa de Economía y Finanzas, Christine Lagarde, fue la encargada de inaugurar esta primera jornada del Salón para el público -permanecerá abierto hasta el próximo día 19-, después de que ayer por la tarde el primer ministro, François Fillon, cortara oficialmente la cinta.

Los organizadores de esta feria esperan más de 1,5 millones de visitantes en un momento en que los fabricantes, que sufren este año el descenso de las ventas en los mercados occidentales -Francia es una de las pocas excepciones en Europa, que ha sufrido una baja del 4%-, presentan sobre todo innovaciones en términos de vehículos que consumen menos y utilizan carburantes alternativos.