''Estamos desarrallondo una economía del sector público prolija y eficiente'' (Antonio Blanco)

Antonio Blanco
Ministro de Economía y Hacienda

El Vicepresidente Segundo del Gobierno y Ministro de Economía y Hacienda, Antonio Blanco, afirmó tras la reunión en Zurbano con diferentes grupos de inversores europeos que la reforma del sector público se desarrolla con prolijidad y eficiencia. ''Evidentemente que el estado del Estado, valga la redundancia, era paupérrimo y en condiciones de atrofia francamente lamentables. Por ello las iniciativas que hemos llevado a cabo en este año son importantísimas y han sentado, y sentarán, nuevos marcos para el desarrollo de la economía del sector público. Esto implica que donde hay que regular se regule con eficacia y que los objetivos de la regulación se cumplan. Pero también en todas las áreas donde interviene el Estado en la economía, que no solo es la regulación, sino en evitar las constantes fallas de mercado, siendo las herramientas desde organismos autónomos hasta empresas públicas. Y naturalmente, todos los programas públicos requieren de una mejora en su desarrollo y en su aplicación y eso hemos venido a aplicar''.

Preguntado sobre las críticas respectivas a las empresas públicas, Blanco explicó que el Gobierno no tenía más alternativa que reestructurar a las mismas en los principios de eficacia y productividad. ''Nos encontramos con un cuerpo empresarial público que tenía por objeto acomodar amigos del viejo régimen, y paralelamente con elevadísimos índices de ineficacia productiva, pero sobre todo de deuda que no podíamos afrontar desde las arcas públicas. La reforma que llevamos a cabo no es un simple hecho de hacer caja a través de privatizaciones parciales o totales, sino de generar una apertura eficiente para mejorar la competitividad del sector, lo cual genera más inversiones y más puestos de trabajo, dinamizando nuestra economía. Las empresas que están en la lista de reforma son aquellas que se encuentran en Unidades de Cuidados Intensivos, y que nos piden a gritos la intervención. No podemos reestructurar sus deudas constantes, mayoritariamente a proveedores internos ni podemos pagar sus facturas vencidas retiradas. A la hora de elegir, o elegimos en invertir en sanidad y educación o en salvar una empresa quebrada y completamente ineficaz. Pues nosotros elegimos: preferimos priorizar y potenciar las partidas sociales, pero no abandonamos a este tipo de sociedades, sino que hemos propuesto su reestructuración''