Unión Laborista de España (ULE)

"Me he sentido Presidente de la España que millones y millones de personas sientes y quieren"

¡Buenas noches, Madrid!

Antes de empezar, como este es el último acto que vamos a realizar en campaña, quisiera gradecer a todo el equipo, a todo el partido y a todos los asistentes a nuestros actos su compromiso con el laborismo y con España. Nuestros carteles no llevaban meras consignas o eslóganes políticos. Hemos tenido el atrevimiento de poner nuestras propuestas en las carreteras y en las vías públicas, porque creemos verdaderamente en ellas. Otros partidos tratan de ocultarlas. Algunos han tardado hasta los últimos instantes de campaña electoral para presentar su programa… Otros, no ha sido hasta hace poco que les hemos visto explicando sus propuestas. Curiosamente, se trata de los dos partidos mayoritarios. ¿Qué tienen a ocultar? ¿Por qué han tardado tanto en exponer sus propuestas? La “inspiración” que unos han encontrado en nuestro programa electoral explica el porqué del PSOE. El porqué del Partido Liberal se aprecia en… bien, no sé exactamente en qué, porque todavía no he podido observar su programa y, como les digo, apenas han realizado un par de actos y en sus carteles no veo ni una sola propuesta. No podemos permitir que el Gobierno en España esté en manos de uno de estos dos partidos. Sobre todo, porque nos es imposible saber qué ideas tienen. Ya sería desastroso que uno de los dos principales partidos mayoritarios careciera de ideas… Pero que lo hagan los dos nos conduce a un abismo de quilómetros y quilómetros de caída del que es imposible salir con vida. Nosotros hemos presentado nuestras propuestas. Parece mentira que tengamos que estar diciendo esto en campaña electoral ¿verdad? Pero es que es algo que cabe destacar: los laboristas hemos presentado propuestas, y propuestas propias. Hemos ofrecido datos concretos en varias medidas, desde las tributarias hasta las políticas de vivienda. Un ciudadano que ve uno de nuestros carteles, ya sabe más de nuestro programa electoral que el militante socialista que lee el programa del PSOE o el militante liberal que va a un acto del PLD para enterarse de lo que propone su partido. En esto, he de felicitar al equipo de campaña dirigido por el compañero Lerner. Nuestros carteles, nuestras cuñas… nuestro material informativo en general no estaba vacío… transmitía parte de nuestras ideas, de nuestras propuestas. Hay partidos cuyos asesores de campaña, probablemente, lo hubieren querido hacer y no han podido por falta de propuestas de sus candidatos. Espero, realmente, que pueda celebrarse ese debate. Y espero que pueda celebrarse entre todas las fuerzas políticas, porque lo que puede esperar a los telespectadores si solamente participan la señora Torres y el señor de la Torre (curioso el parecido hasta en los apellidos), son hora y pico de silencio. Uno por falta de propuestas; la otra, por no saber las suyas.

Hemos dado giros y más giros por España. Hemos conectado con las personas de las zonas rurales y de las zonas urbanas. Trabajadores y empresarios nos han querido transmitir su apoyo y su confianza en nuestro programa. Hemos recibido el calor de España en cada escenario. Me he emocionado con los aplausos al principio y al final de cada mitin. He recibido cartas de ciudadanos expresando su deseo de que los laboristas pudieran ganar unas elecciones. Mi familia, mis amigos. Mi esposa. Mis hijas y el hijo que dentro de poco vendrá. Los compañeros de escuela de los que hace tiempo que no sabía. El socio de mis inicios contra la dictadura, Alfonso, con el que me re-encontré en el acto de Barcelona. Mis compañeros de partido. Los ciudadanos que se han parado para saludarme y explicarme sus problemas. He llorado. Por todos ellos, me he emocionado y he llorado. Me he dado cuenta de que la Unión Laborista es el punto donde van a emerger todas las preocupaciones e inquietudes de los ciudadanos. He visto madres rogar por que los Laboristas obtuviéramos una victoria improbable. He tenido, en estos tiempos de precampaña y campaña, curas a un lado y al otro ancianos que habían incendiado conventos antaño. He tenido enfrente, compartiendo opiniones y abrazándose, personas que venían desde la derecha y desde la izquierda. He compartido conversaciones con poetas, músicos, pintores y escritores. En este período de pre-campaña y campaña, me he sentido Presidente de la España que millones y millones de españoles sienten y quieren.

Y sienten y quieren una España líder en políticas sociales, formada por ciudadanos solidarios, una España que se haya convertido en una primera potencia diplomática por la libertad, una España cuyo nombre sea empeñado como sinónimo de paraíso y felicidad. Y han visto nuestro programa, porque lo han podido ver y analizar con tiempo, y han visto que sí, que los laboristas somos capaces de todo eso. Que cuando decimos que vamos a poner una Universidad en cada provincia y en cada municipio de más de 150.000 habitantes, eso es una política social que garantiza un futuro a nuestros hijos. Y cuando hemos dicho que vamos a facilitar que los menores de 27 años y los matrimonios jóvenes puedan acceder a una vivienda, es una política social por parte de una sociedad solidaria. Y cuando hemos adelantado que vamos a rebajar la edad de jubilación a los 60 años y la jornada laboral a las 40 horas semanales, es una política social que, simplemente, consolida un derecho fundamental. Y cuando hemos dicho que todos nuestros ancianos vana a vivir dignamente, bien en una residencia, bien en una vivienda con ayudas del Estado, eso es una política social en que la juventud agradece y reconoce a sus mayores el esfuerzo que han realizado. Y cuando hemos dicho que vamos a basar la política penitenciaria en la reinserción del preso, la sociedad ha entendido que es una política social que beneficia a toda la sociedad, porque no es posible mantener de manera permanente a un delincuente en prisión, y porque tampoco es posible mantener en libertad a un expreso que puede volver a cometer un delito. Y cuando hemos dicho que vamos a construir 380.000 viviendas anuales durante los próximos diez años, eso es una política social de una sociedad que ha visto como tres millones de familias viven en una situación precaria. Y cuando hemos dicho que va a tocar pagar impuestos, y que los ricos son los que van a tener que pagar más, y los que menos tienen, no van a tener que pagar, eso es una política social que una sociedad moderna como la española ha aceptado y ha entendido como fundamental para construir un Estado del Bienestar.

Compañeros, estoy convencido de que con una amplia representación esta Legislatura, lograremos desenmascarar a los dos partidos principales y multiplicar nuestros resultados en las próximas elecciones. El Partido Liberal tendrá muchas facilidades para cumplir su programa electoral: si obtuviera la presidencia, ya lo habría cumplido. El Partido Socialista lo tendría más difícil: antes de llevar a cabo cualquier medida, tendrían que descolgar el teléfono, marcar el número de la sede laborista y decir: “¿Cómo pensaban desarrollar esta medida? Es para hacerlo nosotros”. Nosotros nos comprometemos a desarrollar nuestro programa electoral. Me comprometo a volver aquí dentro de cuatro años y decir: todas las medidas que presentamos en 1978, se han presentado en el Congreso de los Diputados.

Compañeros, hoy habéis hecho que me emocione otra vez. Se lo pido, hagan que el día de las elecciones vuelva a emocionarme. Demuestren al Partido Liberal y al PSOE que España opta por la valentía, la responsabilidad y… y por los programas electorales. ¡Muchas gracias, compañeros!