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Elecciones Generales 18/D - 2016

Proyecto por España

Conservadores

Proyecto por España

Conservadores

Marco Janer, durante el acto de apertura de la Campaña Conservadora

(Janer sube junto al vicepresidente Ocampo al escenario, entre aplausos y recibiendo algunas flores de entregadas seguidoras)


Gracias, gracias a todos los que nos acompañáis, mi más sentido agradecimiento por continuar junto a nosotros el proyecto que España necesita. El proyecto que los españoles demandan, la voluntad de seguir construyendo un país que han intentado resquebrajar en numerosas ocasiones, pero siempre ha sido vuelto a levantar por sus gentes.

El pueblo español hablo, y lo hizo por duplicado, con un resultado transparente para todos los políticos que estaban, los que estamos, y estaremos en el futuro: Unidad

Una unidad entre políticos de distinto signo, una unidad en la que las ambiciones se replieguen para dar voz a la necesaria colaboración de todos los servidores públicos. España es un proyecto político de unidad, de amparo y ansiada prosperidad, España no es sino el marco en el que debemos fijarnos para seguir construyendo el futuro social y político de todos los españoles.

Es por eso que ahora es el momento de que nosotros nos unamos, de que España se una, se dirija hacia adelante con firmeza, y valentía, asumiendo las amenazas que tenemos ante nosotros y practicando las soluciones que los ciudadanos nos han exigido las anteriores veces, y estoy seguro, harán una tercera y última vez.
(El auditorio ovaciona a Janer)


Ahora tenemos una oportunidad, una gran oportunidad, para cambiar una situación insostenible, para resurgir del pozo en el que algunos han intentado hundirnos. Para cambiar la forma en que nos relacionamos con el pueblo español, y cambiarlo para mejor, unidos, con la determinación de quiénes saben hace lo correcto.

Recuperar la confianza en un proyecto que merece la pena liderar, un proyecto que nos imprima esperanza y de soluciones reales a problemas existentes. Con fuerza y coraje, con la valentía de quiénes no temen mostrar unidad, de enaltecer sus logros como sociedad, su historia y tradiciones. Escuchando, entendiendo y asumiendo los postulados que la ciudadanía nos demanda, recuperando los valores que nos permiten ser ejemplares como servidores públicos: honestidad, esfuerzo, responsabilidad, dedicación, autocrítica, colaboración y lealtad.

Los líderes políticos de todas partes tenían una gran responsabilidad, debieron asumir con sentido de estado la realidad de sus posiciones, las exigencias de los españoles, trabajando para unirnos y no dividirnos. Asumiendo la defensa del orden constitucional y la preservación de la unidad de España como una máxima inquebrantable de nuestro deber público. Recogiendo nuestro juramento con orgullo y reconociendo que no solo es lo legitimo, sino también lo verdaderamente correcto.

Todos aquellos que componemos una España unida y valiosa, seamos andaluces, catalanes, gallegos, castellanoleoneses, aragoneses, vascos, murcianos, canarios, valencianos, navarros, cántabros, extremeños, asturianos, riojanos, madrileños,, ceutíes o melillenses, baleares o castellanomanchegos. Tenemos una misma misión y unas mismas necesidades, todos somos miembros de un mismo proyecto vital: España.
(Una gran ovación inunda el lugar)


Para aquellas escépticas con las obligaciones constitucionales, para todos los que anhelan pervertir el significado de democracia, para los que prefieren arrinconar a los defensores del orden constitucional, para todos ellos, pero también para todos nosotros, los Conservadores existimos. Los populares, conservadores, todos somos una misma familia ideológica, con un único compromiso: el servicio público.

Y por ello, todos ellos, siempre podrán contar con nosotros para estar ahí donde los españoles necesitan, para defender la unidad y garantizar un futuro de prosperidad. Para no vacilar y asumir nuestras responsabilidades sin mirar asientos, porque no hay nada más importante que servir, y nada más honorable que hacerlo con orgullo y confianza de los ciudadanos.

Pues si el pueblo español nos otorga su confianza, le respetaremos con dignidad y decencia, rindiendo honor al contrato electoral.

Estamos comprometidos con un reto inusual para España, un complejo escenario repleto de amenazas a la integridad social y económica de la Nación, pero también, a la oportunidad de reformar el sistema constitucional, perfeccionar nuestro sistema electoral y preservar para siempre la integridad de España, nuestro proyecto común y la estabilidad y seguridad de los españoles del futuro. Nuestros hijos y nietos.
(Se oye una creciente ovación durante las últimas líneas de su intervención)


Nuestro compromiso con los españoles es real, tenemos la voluntad de modificar las cosas, de asumir los retos a los que nos enfrentamos y de reunir esfuerzos para construir una España orgullosa y capaz de mirar con esperanza al futuro.

Las nuestras no son meras ambiciones ni declaraciones de intenciones, tenemos un programa de gobierno real, viable y concienzudamente diseñado. Entablamos el futuro con realismo y dotaremos de ese mismo realismo a nuestra política sectorial.

Como ya señalamos en el XVIII Congreso Extraordinario, y será detallado en los próximos días. Los Conservadores tenemos las cosas claras, y las medidas que pretendemos cambien España tienen un estricto control de viabilidad. Los Conservadores tenemos 3 prioridades, las 3 R's, y numerosas líneas de actuación en ese sentido. Nuestras tres firmes prioridades son restablecer, recuperar, y reafirmar.

Restablecer el empleo, nuestra prioridad absoluta en materia económica es garantizar que la actividad económica retome su fuerza, que nuestros jóvenes dispongan de un futuro en su nación, que nuestros mayores sean capaces de mirar al futuro con seguridad. Por tanto, nuestro principal objetivo será encauzar el modelo económico para restablecer los niveles de empleo que garantizan nuestra sociedad del bienestar.

Recuperar la autoridad de las instituciones para proteger a los españoles, volver a garantizar la aplicación de la Ley, garantizar el orden constitucional y retomar la confianza de los españoles en sus propias instituciones y servidores públicos.

Reafirmar los valores cómo sociedad, devolviendo la función de sustento ciudadano a los principios y valores que nos permiten crecer como sociedad, garantizar nuestra libertad y modo de vida. El respeto cómo pilar de una sociedad, la solidaridad entre españoles, el cumplimiento de la Ley, la familia cómo núcleo social, protección y preservación de nuestro patrimonio histórico, garantizar la seguridad de nuestra gente.

Porque el renacimiento de nuestra sociedad es un trabajo que nos necesitará a todos, a nosotros, pero también a todos aquellos hombres y mujeres honestos decididos a construir su futuro con valentía y empeño.

¡Gracias!
(Una ovación cerrada rompe el silencio cuando finaliza Janer)

Esteban Rodríguez Ocampo, Vicepresidente Nacional, durante el acto de apertura de la Campaña

(Janer finaliza su intervención y mira a Ocampo, a quién se dirige para que suba y lo acompañe, "Ocampo representa la lealtad y el firme compromiso con los españoles, la ejemplaridad y profesionalidad que debe regir la política, él es el Vicepresidente de nuestro partido y será el próximo Vicepresidente de nuestra Nación"
Una sonora ovación recibe al Tte. General Esteban Ocampo)


Muchas gracias, queridos amigos. Gracias por estar juntos nuevamente en este camino que nos llevará a la victoria. Una victoria que se hace más necesaria que nunca, España está asolada y rodeada de enemigos. Los peores son aquellos que vienen apuñalando y desangrando a nuestra Nación. Son los enemigos internos, los traidores, los que vienen a romper nuestra cultura y los que pretenden romper en mil pedazos la unidad de este país.
(El auditorio recibe con aplausos las palabras de Ocampo)


España, al igual que toda Europa y el mundo occidental en términos generales ha estado siendo sistemáticamente azotada por un pensamiento único monopolizado por una izquierda lamentable y rastrera. Y sí, hemos de emplear estos calificativos porque han sido cómplices y cerebros de la degradación de nuestro sistema de valores. Ese pensamiento que les supone una superioridad moral, pensamiento que les lleva a suponer que lo saben todo, se creen intelectualmente por encima de los demás, ese pensamiento único había denegado a la política la capacidad para expresar una voluntad. Y esa voluntad del pueblo, esa voluntad olvidada y mancillada por tanta mediatización contra cultural es la que venimos a rescatar.

Nosotros, los Conservadores no claudicaremos ante corporaciones ni presiones de ningún tipo. Estamos preparados para refundar los valores que nos hicieron grandes, prósperos y libres. Para ello trabajaremos haciendo política de altura, y a necesidad de política tiene por corolario la necesidad de nación. La nación también había sido condenada por esa izquierda diluida y amoral. Pero aquí está de nuevo, con los Conservadores, para responder a la necesidad de identidad frente a tanta globalización mal entendida, donde todo se ha mercantilizado, en un mundo en el que parece ya no queda lugar para la cultura y para los valores del espíritu.

Quizá la inquietud es excesiva, pero es bien real y expresa una necesidad de identidad muy fuerte. Ahora bien, la nación no es sólo la identidad como grupo, es también la capacidad de estar unidos para protegernos y para actuar conforme a nuestros intereses. Es el sentimiento de que no se está solo para afrontar un futuro angustioso y un mundo amenazante. Es el sentimiento de que, juntos, se es más fuerte, y podremos hacer frente a lo que, solos, no podríamos afrontar.

Por eso tenemos el derecho y la oportunidad de que Marco Janer sea nuestro presidente, porque será quien nos lidere hacia ese horizonte, es quien ha querido volver a poner la voluntad política y España en el corazón del debate político.
(La gente aplaude las palabras hacia su candidato)


Insisto en que no nos debe atemorizar hablar de moral y de valores cristianos. Desde mayo de 1968 no se ha podido hablar de moral, esa fecha fue un punto de inflexión que condenó a Occidente a una era de letargo en sus principios y nos devastó como núcleo de libertades y responsabilidad. La moral se ha convertido, gracias a esa izquierda hipócrita y destructiva, en una palabra que casi ha desaparecido del vocabulario político. Hoy, por primera vez en muchos años la moral estará en el corazón de una campaña electoral.

Ese terrible mayo francés nos había impuesto el relativismo intelectual y moral. Y sus herederos nos han intentado imponer la idea de que todo vale, de que no hay ninguna diferencia entre el bien y el mal, entre lo verdadero y lo falso, entre lo bello y lo feo. Han querido hacernos creer que el alumno vale tanto como el maestro, que no hay que poner notas para no traumatizar a los malos escolares, que no había diferencias de valor y de mérito. Han intentado hacernos creer que la víctima cuenta menos que el delincuente, y que no puede existir ninguna jerarquía de valores. Han proclamado que todo está permitido, que la autoridad ha terminado, que las buenas maneras han terminado, que el respeto ha terminado, que ya no hay nada que fuera grande, nada que fuera sagrado, nada admirable, y tampoco ya ninguna regla, ninguna norma, nada que estuviera prohibido.

Todo eso es lo que venimos a combatir, porque nosotros sí creemos en la moral, sí creemos en la fuerza de la voluntad, del mérito, de la jerarquía de los valores, donde hay cosas que están bien y cosas que están mal, donde el profesor tenga autoridad pública, donde el delincuente primero debe cumplir una condena ejemplificadora para con la sociedad donde sea castigado duramente por sus actos y luego, solo después, educado para reinsertarse en la sociedad a la que agredió. Venimos, pues, a restablecer esos valores.
(Una estruendosa ovación hace hincapié en las palabras del General)


Liquidemos, pues, esa herencia tan horrible, restablezcamos los lazos en común y aquello que nos ha permitido construir tanto. Construyamos una escuela que ayude a los niños a convertirse en adultos y no a seguir siendo niños grandes, una escuela para instruir y no infantilizar, construyamos una cultura común y una moral compartida, una cultura y moral en la que todos los españoles puedan comprenderse y vivir juntos en armonía. Terminemos con el cinismo en la sociedad y en la política.

Terminemos con el cuestionamiento de todas las referencias éticas y de todos los valores morales, que también ha contribuido a debilitar la moral del capitalismo, ha preparado el terreno para el capitalismo sin escrúpulos y sin ética, para esas indemnizaciones millonarias de los grandes directivos, esos retiros blindados, esos abusos de ciertos empresarios, el triunfo del depredador sobre el emprendedor, del especulador sobre el trabajador. Hagamos lo que debemos hacer.

Nosotros creemos en la libertad individual, pero es fundamental complementar la libertad con el civismo, es decir construir ciudadanía con derechos pero también con deberes y obligaciones. Por ello, queridos amigos, el empleo, el crecimiento económico, el trabajo, todo eso es necesario y también es posible. Y esa es una parte de nuestra propuesta, como Conservadores, para con vosotros. Votad a Marco Janer, votad a los Conservadores, y hagamos una España grande y fuerte otra vez.
(El auditorio se pone en pie para ovacionar al vicepresidente conservador)

Marco Janer, durante el acto de festejos del Día de la Constitución Española

(Janer llega andando junto al Tte. General Ocampo y a su jefe de gabinete, a un concurrido acto en un soleado día de la Constitución en Madrid)


Gracias a todos, es simplemente maravilloso vernos rodeados de tantos constitucionalistas, tantos españoles orgullosos de su Nación, decididos recuperar la prosperidad social y estar siempre a la vanguardia en la defensa del constitucional.

Hoy hace 38 años millones de españoles salieron de sus casas con orgullo y la convicción de que no solo era lo necesario, sino también, lo correcto. Depositaron su voluntad en las urnas y nos otorgaron a todos una nueva oportunidad, la oportunidad de resurgir como sociedad, de trasladar una realidad social que se vivía en las calles a la política, a su sistema de vida y valores. 

La democracia no vino a España, nadie la trajo, la construimos entre todos, la democracia en España existe gracias a su sociedad civil. A los millones de personas anónimas que lideraron un proyecto político que otros se encargaron de llevar a la práctica en su nombre.
(La gente aplaude las palabras del candidato)


Hoy es el día de todos los españoles, un día de orgullo, satisfacción y reconocimiento. Reconocimiento de lo que hemos logrado, pero también, de todo aquello que nos queda por alcanzar. Nuestro mayor empeño y esfuerzos están destinados a recuperar aquellos valores que nos proyectaron como Nación en el panorama internacional, que hicieron de la ejemplaridad y el sentido de estado la norma general de los participantes, que en definitiva, nos unieron como ciudadanos de un proyecto único.

Porque la lealtad y el sentido de estado no pueden seguir siendo alegatos vacíos, debemos recuperar su utilidad pública, su reconocimiento social y valoración. Pues lo único que nos distancia de la barbarie es la ruptura del orden social, de nuestra vinculación política, de nuestro contrato como sociedad. Por eso los Conservadores nunca haremos de la nuestra una causa política basada en el desprecio y la contención de compatriotas que se sienten adversarios ideológicos, pues los constitucionalistas debemos estar unidos para hacer frente a todos aquellos riesgos reales que amenazan con fracturar nuestro marco de entendimiento.

Hoy no es día de protagonismos, por ello este acto no es un mero formalismo ni un alegato electoral, es la expresión de la voluntad ciudadana, y por ello he querido recoger las intervenciones que nos han enviado distintas personas a cuenta de su día:

Fernando desde Cádiz nos quiso leer un artículo que para él es fundamental:

Artículo 2.
«La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas.»

"España no es solo nuestra patria, es nuestro proyecto como sociedad, la argamasa que nos otorga fuerza y alienta la solidaridad entre todos sus miembros. Recordar a todos que sin unidad, no hay España, y sin España no hay españoles, no es una obviedad, es el reconocimiento de que formamos un todo."

Laura subió al atril junto a Janer:

"Cada vez que me dicen que la Constitución es papel mojado, que es un residuo franquista o que la expresión de una parte minoritaria de la sociedad debe prevalecer sobre el conjunto de derechos de los españoles, les digo -por favor, toma este ejemplar y lee su primer artículo.-"

Artículo 1.
«1. España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político.»

Marta, una joven de 18 años recién cumplidos pide subir y enuncia, junto a un Janer anonadado por su perspicacia, el siguiente fragmento:

"Desde que era pequeña mis padres se encargaron de educarme en valores, asumiendo que el respeto a los mayores era una máxima inquebrantable, que la ciudadanía no es solo un reconocimiento legal, sino la adquisición de una serie de obligaciones y la entrada en un complejo sistema de relaciones del que somos solo una de las piezas del engranaje.

Por eso cuando veo como ciudadanos de otra parte del país pretenden impedirme serlo, reducir mi porción de ciudadanía, o simplemente, suprimir mi propia voz y participación en las cuestiones que atañen a mi nación, recuerdo lo que una vez me dijo mi abuelo: -Hija, podrán tratar de callarte pero lo que nunca podrán negarte es llevar la razón. "

Artículo 1.
«2. La soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado.»

Creo que cualquier cosa que yo pueda decir, quedara eclipsada con las intervenciones de ciudadanos honestos y conscientes, por ello únicamente deseo agradecerles de todo corazón su participación en este acto, su capacidad para involucrarse y hacer real la voz ciudadana. Mi deber es servir a los españoles independientemente de su condición social o convicción ideológica, independientemente de si me reconocen o no, pero sobre todo, mi principal obligación es trasladar la voz de una sociedad que nunca más debe permanecer callada.

¡Gracias a todos!
(Una ovación cerrada rompe el silencio cuando finaliza Janer)

Esteban Rodríguez Ocampo, Vicepresidente Nacional, durante el acto del día de la Constitución

(El General Ocampo, quién se encontraba en primera fila, aplaude con gran convicción a todos los intervinentes en especial a Marta, con quién entabla unas palabras antes de subir a realizar su propio discurso)


Muchas gracias, nada más puedo decir, que aquello que sabiamente ya se ha dicho. Para todos los Conservadores es un orgullo representar a ciudadanos como los que hoy hemos tenido el placer de escuchar. Ciudadanos activos, capaces de involucrarse, reconocer y actuar sobre lo que sucede a su alrededor, todo ello con la prestancia de quién se sabe hace lo correcto.
(Los asistentes aplauden las palabras del General Ocampo)


Podemos seguir reiterando que solo somos uno, si realmente nos sentimos uno, si trabajamos como uno y si nos respetamos como si fuéramos uno. Podemos seguir creyendo que lo que nos hace grandes como sociedad son exclusivamente las glorias pasadas, o los deseos futuros, pero la realidad seguirá siendo tozuda. Lo único que nos hace grandiosos es nuestra voluntad de prosperar, nuestro ingenio y dedicación, nuestra cooperación en tiempos malos.

Quiénes pretenden separarnos solo necesitan que no hagamos nada, que no estemos unidos y les permitamos lideren la acción política destinada a quebrarnos como sociedad, por eso, debemos esforzarnos más que nunca para impedírselo. Trabajar para hacer cumplir la Ley, para ofrecer un proyecto viable que ilusione y siembre la esperanza entre los españoles. 
(El público rompe en aplausos)


Si conseguimos hacerlo podremos alcanzar nuestro bien más preciado, la confianza. Pues recuperar la confianza de los ciudadanos es hoy más que nunca un deber primordial de cualquier político que se enorgullezca de serlo. Es la constatación de nuestro valor, el mayor ejemplo de como la política bien entendida es capaz de cambiar la sociedad.

Nuestra capacidad como pueblo ha sido puesta en tela de juicio en numerosas ocasiones a lo largo de la historia, hemos sido capaces una y otra vez de demostrar que somos un pueblo unido y trabajador, valiente y decidido, un pueblo lleno de héroes anónimos que nos han guiado hasta aquí. Nos han hecho una sociedad libre, una sociedad que dentro de sus carencias es, y vive, con orgullo y prosperidad. Ahora ha llegado el momento de recordar cómo lo hemos logrado y cómo vamos a seguir haciéndolo.

La nuestra es una Nación de valientes, valientes que asumieron un reto complejo como fue la disolución interna del sistema franquista, la compleja transición política y su, no menos compleja, transición social. Una etapa de nuestra historia en la que todos debimos sumar voluntades, debimos pactar, acordar y tener siempre presentes a los españoles.

Por todo ello hoy más que nunca debemos estar juntos, respaldar nuestro orden constitucional, a nuestras familias y nuestro proyecto político. Recordar a nuestros antepasados, a todos aquellos que dieron su sudor y sangre por España, por convertirla en un país prospero y democrático, una Nación capaz de afrontar con solvencia todos los retos que le quedan por llegar.

Con la ayuda de gente como Marta, Laura o Fernando, con el liderazgo de personas honestas como Marco y con el esfuerzo de todos los Conservadores lo lograremos.
(Ocampo tiende la mano a Marta y Laura para que le acompañen en el escenario)


Lo lograremos porque estamos haciendo lo correcto y luchando por lo justo, no tenemos solo la razón de nuestra parte, sino también el valor y esfuerzo de millones de personas. Con la ayuda de Dios, recuperáramos lo que los españoles merecen. 
(Una sonora ovación de los asistentes engalana un acto redondo)

Marco Janer, en una parte de su intervención

(Janer sube al escenario junto a su mujer e hija, a quiénes rinde un homenaje en el acto:" Son mi mayor tesoro, sin ellas nunca habría llegado a dónde estoy hoy. Reconocer el valor de la familia no debe sernos algo ajeno, la familia es el núcleo social, quiénes nos dan fortaleza en los malos tiempos y aupan en nuestro éxito, a ellas, como a los españoles, es a quiénes me debo completamente"

Despide a ambas con un beso, y se dirigen a la primera fila junto al resto de líderes conservadores para escuchar el discurso del candidato conservador)


Muchas gracias a todos, gracias, ya tenía ganas de volver a esta maravillosa tierra en la costa mediterránea. Una tierra con una gran historia, con increíbles gentes y muchos recursos, una tierra capaz, siempre labrada con el sudor del leal pueblo valenciano.

Para mi es un orgullo ver como frente a vecinos que pretenden destruir la unidad de nuestra Nación, existen gentes honradas y con sentido de comunidad, personas capaces de lograr sus metas sin exigir el fracaso de los demás, solo con sus manos, su esfuerzo y cooperación.

Esa es la actitud ciudadana que España necesita, una actitud constructiva, una posición de colaboración y transigencia. Y por eso el día 18 lograremos lo que todos deseamos, hacer prevalecer la unidad y el esfuerzo, frente al enfrentamiento y el odio.
(El auditorio ovaciona al líder conservador)


Hace unos días celebramos el 38º aniversario de nuestra Constitución, el ejemplo de cómo un pueblo unido puede lograr todas las metas que se proponga, dedicando sus esfuerzos a incluir y no destruir. Colaborando todos para dar a España la mayor etapa de libertad y prosperidad de nuestra historia.

Se oyen algunas voces que propugnan que debe ser modificada, que debe ser reformada para dar cabida a quiénes no desean pertenecer a ella, a quiénes la incumplen de manera sistemática y amenazan nuestro modo de vida.

Muchas voces que han decidido encajar sus intereses en nuestra Carta Magna por encima de los intereses del conjunto de la ciudadanía.

Es preocupante, no es para nada apropiado, los padres de la Constitución pensaban que con un amplia consenso como el que requirió nuestra ley fundamental, habría alguien que la protegiera. Alguien que impidiese las violaciones de la misma, el cumplimiento de los juramentos dados, en definitiva el respeto a las normas básicas que regulan nuestras vidas.

Ante eso hemos visto como el sentido de estado y la lealtad han ido perdiendo fuerza, desapareciendo del discurso político, para dar paso a encajes y encajonamientos, que contenen a todos menos a los que de verdad deben hacerlo, los españoles. Pues es que modificar, sin antes garantizar el cumplimiento estricto de la ley, es un camino directo al fracaso social. ¿Para qué vamos a cambiarla? ¿Para qué siga también sin cumplirse?

Por ello no debemos perder la perspectiva, debemos relajar el debate político y retomar los puntos esenciales de nuestro marco de convivencia. Lo importante es garantizar su cumplimiento, proteger a los españoles, después podremos mejorar, discutir, y enmendar. Pues nuestra prioridad debe ser, siempre, asegurar la igualdad, solidaridad y cohesión entre ciudadanos independientemente de su lugar de residencia. Todos somos españoles, y todos debemos disfrutar y rendir las mismas obligaciones.
(Los asistentes aplauden las palabras de Janer)


Los conservadores debemos aprender mucho de nuestros socios europeos, desde luego, hemos perdido la perspectiva, los valores, hemos cometido errores mientras gobernábamos, en nuestro propio partido. Hemos iniciado el cambio de paradigma, pero debemos seguir trabajando incansablemente para recuperarnos.

Los socialistas también deben aprender mucho de sus homólogos socialdemócratas, deben asumir sin tapujos la defensa de la unidad de España, la modernización de la economía, el pragmatismo político, la colaboración con el resto de fuerzas constitucionalistas, sin desprecios, sin cordones sanitarios que releguen a la irrelevancia a millones de ciudadanos leales y honrados.

Si algo tenemos que hacer es reformar la manera de hacer política, desde nuestros partidos, para después poder reformar España. Primero debemos rendir cuentas, ser ejemplares, leales y honestos con los españoles, y después, podremos continuar juntos un proyecto político con un solo nombre: España.

Podemos hacerlo, lo vamos a lograr, porque hemos presentado ya nuestras cartas con franqueza, porque hemos recuperado los valores que nunca debimos perder, y acompañarlos de personas honestas, leales y trabajadoras. Siendo ejemplares y sirviendo con sinceridad a unos ciudadanos que nos demandáis que nos involucremos, pero que no perjudiquemos vuestras vidas, que reconozcamos lo que tenemos y somos, sin imponer lo que nunca se nos ha exigido.

Pues los ciudadanos no demandan una reforma constitucional, el CIS así lo refleja, lo que nos exigen es su cumplimiento, su defensa incondicional. Ellos exigen más poder a la sociedad civil, mayor poder de decisión, elección directa del gabinete ejecutivo. En definitiva, nos demandan que escuchemos su voz y que esta sea un mandato ineludible para todas las fuerzas políticas.

Por eso yo les digo a todos, al margen de ilusiones vacías, proyectos sin ideas, los conservadores disponemos de un proyecto realista de España, tenemos como precedente nuestra gestión ejemplar, la capacidad de recuperar tierras con pocos recursos pero grandes gentes.colaborando todos juntos para devolver a nuestro país el orgullo y la eficiencia.

Los Conservadores estamos para recuperar España, no para construir una España ajena a los ciudadanos, una España en la que se recuperen los valores ciudadanos, en la que se permita prosperar a sus gentes y se protejan los servicios públicos, una España viable y sostenible, en la que todos tenemos cabida.


¡Gracias a todos!
(Una ovación cerrada rompe el silencio cuando finaliza Janer)

Pablo Riopérez señalando al público en un momento cumbre del mitín

(Pablo Riopérez, en primera fila junto a otros líderes conservadores, es instado a subir por Janer tras finalizar su intervención, quién le espera y aplaude con admiración)


Muchas gracias a todos. Es un placer poder hablaros por primera vez en un mitin como vuestro Vicesecretario de Organización, pero lo hago como un militante más de los Conservadores, que pone su granito de arena en seguir haciendo de este, un partido más grande y más fuerte.

Un partido que vuelva a ser el partido de referencia de no solo los conservadores con valores, sino de todos los españoles que defienden la unidad de este país, el respeto por nuestras leyes y nuestra Constitución, y la recuperación de los principios que han definido España a lo largo de los siglos.

España nunca ha estado tan amenazada, nunca en nuestra historia hemos tenido tantos problemas, riesgos que están poniendo a prueba nuestra capacidad de resistencia y unidad. Los separatismos, la pérdida de moralidad y valores, los constantes ataques a nuestra economía, las imposiciones extranjeras... Todo eso están haciendo mella en nuestra capacidad de resistencia como país y como españoles.

Mientras hemos tenido que sufrir continuos ataques desde el exterior, gracias a los resultados de un gobierno socialista tan manirroto como desacertado, que en otras condiciones nos podría haber condenado a ser gobernados por los "hombres de negro", como en Grecia o Portugal, a base de recortes y sufrimiento de millones de españoles. Mientras todo eso sucedía, los conservadores hemos estado trabajando, por España y por Europa, conduciendo a la Nación hacia la estabilidad, reformando numerosos fallos que asolaban a nuestro país, mientras eso sucedía, otras naciones europeas han estado gastando y evadiendo sus responsabilidades. Ahora los socialistas, y sus aventajados alumnos populistas, nos proponen que volvamos a cometer los mismos errores que han arruinado naciones y suprimido su soberanía e independencia. ¿Cómo pueden ser tan hipócritas?
(Riopérez recibe una intensa ovación por parte del público asistente)

Y lo que me sorprende no son sus recetas, sus fracasadas recetas, sino sus continuos ataques a los países del sur., a la Europa mediterranea Los "pobres" de la Unión Europea. ¿Nosotros, "pobres"? ¿Siendo la sexta economía de la Zona Euro, "pobres"? Cuando oigo a muchos políticos oír eso, se me revuelve el estómago. Pero también a todos aquellos que han estado propagando el eslogan de: "la contención de gasto genera una economía saneada". cuando lo único que hacen es ordenar qué hacer a los demás sin aplicarse sus propios consejos.

Y queremos seguir construyendo "más Europa". Pues no, yo no quiero vivir en una Europa donde los europeos no tengan poder de decisión, donde los eurocrátas nos sigan convirtiendo en el territorio más regulado del mundo. ¡No vivimos en un régimen feudal!

España necesita más soberanía, los políticos necesitan mirar a sus ciudadanos y decirles: ¿Qué necesitáis? Nosotros tenemos un proyecto destinado a eso, a escuchar y proponer soluciones viables, soluciones sensatas, conservando lo que ya tenemos y asegurando lo que algún día dispondremos.
(El público se levanta y aplaude al vicesecretario)


Pero bueno. Nos toca apechugar lo que nos ha dejado en herencia el fantástico gobierno del señor Rodríguez Zapatero. El mismo que decía "brotes verdes" negando la crisis para luego aplicar recortes y congelación de salarios. Escaparon como ratas y nos dejaron con la casa patas arriba con los perroflautas pijoprogres del 15-M armando jaleo. Los mismos que quieren seguir con ese legado de gastar y gastar, pero esta vez a lo bestia. O también alzarse como salvadores de la patria esperando gestos de buena voluntad de sus "compañeros de armas" para quedar finalmente en el mayor ridículo posible.

Si me permitís, me voy a poner un poco en plan "herrerista", como Juan Vicente Herrera. Es que esta izquierda española parece que no ha pillado esas tres palabras que podrían hacer mucho bien a España. Me refiero a SENTIDO DE ESTADO. Sí, el mismo que aplican conservadores y socialdemócratas en Europa. Fijaos en Alemania y Austria, donde gobiernan conjuntamente. Ellos sí que tienen altura de miras y no se preocupan de nimiedades absurdas como ocupar sillas o quién es más de izquierdas. La izquierda siempre ha sido así: oportunista e inmadura.

Podemos ver a todos esos que se declaran "izquierdistas" y "sucesores del 15-M" son hijos de grandes familias acaudaladas que no les faltan de nada, y tienen que llenar sus insulsas vidas a costa de populismo y demagogia barata, haciendo fracasar país tras país, hasta dejar todo convertido en un erial En los autoproclamados "ayuntamientos del cambio", cada día que pasa tienen ocurrencias más irracionales, dedicados única y exclusivamente a destruir lo construido. Recordad por ejemplo que las madres limpien las escuelas o crear una moneda a la que no pueden dar uso. Como saben que no tienen ni idea de gestionar, siendo incapaces de ejecutar sus propios presupuestos, se dedican a crear polémicas para no quedar en la más absoluta irrelevancia y perder el poder en las próximas elecciones por su incapacidad para gobernar.
(Aplausos de los asistentes)

¡Aun queda lo mejor! Tenemos a esas personas que se declaran "defensores de la nación catalana", organizando performances,  espectáculos, para sacar portadas cuando lo único que hacen es conducir a los catalanes hacia el precipio. ¿De qué se quejan? Según ellos, de que no pueden votar. Yo sí que puedo votar. Todos los españoles mayores de 18 años pueden votar. ¡Ah, claro! Que no pueden hacer un referéndum anticonstitucional que modifica el territorio español. Como no pueden, somos franquistas, fascistas y amigos del diablo.

¿Y ellos lo hacen perfecto? ¿Acaso tienen dinero para hacer todas esas performances independentistas pero no tienen para pagar a las farmacias o mantener sus "rodalíes"? En mi opinión, si se les cortara el grifo del único sustento que asegura su gestión, sí, el FLA, quizá se espabilarían un poco, y comenzarían a trabajar por el bien de los catalanes en vez de sacar portadas que no conducen a nada. Porque recordemos que empezaron en 2010 y decían que acabaría en 18 meses...

En definitiva. Ante este panorama, con una izquierda en descomposición y unos nacionalistas que se saltan a la torera nuestras leyes a costa del sufrimiento de muchos catalanes Los Conservadores, y Marco Janer ,están para remediar las cosas.

No tenemos dudas, ni presentamos ambigüedades sobre qué proyectos queremos aplicar. No tenemos complejos en gritar alto y claro "¡viva España!". No nos preocupa poseer sillones y poltronas. Somos un partido serio, responsable y con valores, lo que necesita este país.

Y con Marco Janer de Presidente del Gobierno, volveremos a ser grandes de nuevo, ocuparemos el sitio que nos corresponde a nivel internacional, recuperando la relevancia diplomatica y coliderando un proyecto de Europa necesario, para los europeos.

En estas elecciones, votad a los Conservadores, votad a Marco Janer, votad para que España se levante de nuevo y sea más fuerte y vigorosa que nunca.
(Los asistentes se levantan y comienzan una larga ovación hacia los líderes conservadores en el escenario)

Moderador ABC:
Buenas tardes a todos, el formato del debate será sencillo, no hay reglas, salvo mantener el respeto y no interrumpir los turnos de los demás. Es el primer formato de este tipo que se aplica durante una campaña electoral. En ese sentido, deseamos que pasar un rato agradable y ayudar a definir las opiniones de la gente, sean nuestras principales prioridades.

La duración total será de una hora completa, en la que los invitados podrán interpelarse, y realizar cuantas preguntas soliciten al candidato. Quién las responderá, y a su vez, podrá conversar con cada uno.

Herminia García:
Buenas tardes Sr. Janer, la verdad que estoy un poco nerviosa, nunca antes me había de visto en situación semejante.
(La Sr. Herminia no puede evitar mostrar su nerviosismo)

¿Lo primero que quisiera decirle es cómo cree que puede sobrevivir una persona, viuda, con dos hijos en paro y cinco nietos, con 680 € de pensión? ¿Sabe usted lo que es eso? No, no lo saben, ustedes únicamente piensan en sus coches oficiales y sus dineros.

Marco Janer:
Buenas tardes a usted también Sr. Herminia, tutéeme si lo desea. No tiene nada que temer, alguien como usted ha salido indemne de situaciones más graves que una charla con un humilde político como yo. Si me lo permite, lo desconocido muchas veces pone nervioso, pero lo raro sería que no lo hiciera.
(Janer muestra una cálida sonrisa) 

Su pregunta es muy directa, es cierto, 680 euros de pensión al mes no otorga la tranquilidad que personas como usted se han ganado, se merecen, y tendrán.
Qué alguien como usted, sea capaz de sacar una familia adelante con esa cantidad de dinero es precisamente el tipo de cosas que nos enorgullecen a todos. Expone que se puede gestionar la escasez, con la misma eficacia que la riqueza, la austeridad no es sinónimo de pobreza ni falta de dignidad, es precisamente la mayor prueba de capacidad.

Ahora yo le explicaré porque tenemos un sistema de pensiones que permite que gente valiente y que ha trabajado durante toda su vida reciba al final tan poco dinero. La mala gestión, el gasto en cosas innecesarias.

Por eso nosotros llevamos en nuestro programa la equiparación de las pensiones hacia un mínimo vital de 1.000 euros al mes para los pensionistas, complementando las pensiones si es necesario para darles lo que merecen. Por eso nuestra prioridad siempre ha sido, y siempre será, dar seguridad a quiénes nos dieron todo. A los mayores.

Sin con ello olvidar que lo que evita que usted pueda disfrutar de su madurez, es el desempleo, la falta de oportunidades de nuestros hijos por un modelo económico y una regulación que les impiden prosperar. 

Por eso personas que cómo usted, aunque usted parezca realmente una moza, se han ganado cada euro, los recibirán.  

No podemos permitir que el futuro nos ciegue e impida ver quiénes construyeron nuestro presente.

Herminia García:
Qué bien habla este señor, él si que sabe, si que se le entiende, no como al Rajoy.
(Comenta con Felipe, quién se encuentra a su vera)

Marc Bonaventura:
Hola Marco, cómo verá yo soy uno de esos que denominan la generación pérdida, una generación que por mucho que lo intente esta condenada a vivir peor que sus padres, a vivir de manera precaria, sin un trabajo garantizado, con un acceso a la vivienda complicado, malos suelos, la única alternativa de huir. ¿ Qué tiene que decir a todo eso?

Y otra pregunta, yo no soy independentista, no creo que el cuento con el que nos pretenden engañar a todos los catalanes sea cierto, sin embargo, si creo que debería darse la voz a los catalanes para que dijeran juntos que desean quedarse en España. Como estoy convencido, harían.

Gracias.

Marco Janer:
Buenas tardes Marc, como le dije a la Sr. Herminia, pueden tutearme si lo desean, con respeto, podemos ahorrarnos los formalismos.

Has descrito una situación que para muchos jóvenes españoles es una realidad, no voy a negarlo, la crisis ha sido dura y todavía estamos recuperándonos. Es obvio que una crisis provoca daños, desesperanza y desmotiva, especialmente a sus jóvenes, por ser estos las personas que más tarde se han incorporado al mundo laboral y los primeros de los que, erróneamente, se prescinde.

Sin embargo, yo no creo que esa sea la situación que viven muchos europeos, entonces, debemos buscar los errores que nosotros hemos cometido, solucionarles y volver a otorgaros las oportunidades que se os han negado.

Una educación de calidad que fomente la excelencia, que prepare a hijos como tú, para un mundo profesional altamente cualificado. Pero también, una formación en aptitudes sociales, una formación destinada a involucrar a todos los agentes de la sociedad, a las instituciones y empresas, pero también a los nuevos ciudadanos. Que os ofrezca alternativas, que os acompañe si deseáis ser servidores públicos como yo, que no entorpezca vuestro crecimiento vital.

Para todo eso no necesitamos cambiar mucho, necesitamos aplicar todo, recuperar nuestro modelo industrial, otorgando facilidades en la relación con las administraciones, ofreciendo alternativas a aquellos que deseen ser servidores públicos, que nos involucre como sociedad, que nos ayude a garantizaros una vivienda poniendo a vuestra disposición crédito y parque inmobiliario. Pero también, que os incentive el esfuerzo con becas a la excelencia, que el know how existente en empresas e instituciones públicas españolas salga de las paredes de sus edificios y se convierta en patrimonio de todos.

Tu pregunta sobre Cataluña es verdaderamente sensata, es la opinión que cualquiera podría tener, y yo la respeto pese a no compartir su esencia. Y te diré porque no Marc, porque lo que sucede en Cataluña es un problema tan tuyo como mío, porque nosotros no somos distintos, no pertenecemos a lugares diferentes, si tenemos culturas diversas y deben ser protegidas y reconocidas.

Pero no podemos caer en el discurso fácil de la desigualdad, lo que ocurre en Cataluña afecta a Doña Herminia, a Felipe, a Marta, y a mí, y por eso, porque vivimos en una democracia, no podemos caer en la tentación de permitir, que ni ellas, ni él, ni yo, seamos ninguneados sobre lo que atañe a nuestra tierra, a nuestra gente y nuestra cultura.

Tú y yo somos iguales ante Dios, pero lo único que nos permite ser iguales ante el resto de hombres, es la Ley que entre todos construimos.

Marta Costa:
Buenas tardes Sr.  Janer, le agradezco que se nos de voz a las personas que asumimos riesgos y emprendemos proyectos, muy a pesar de las condiciones y las cortapisas que nos imponen, en buena parte, las administraciones públicas.

Yo quería hablarle sobre un negocio que tuvo que cerrar una vez porque una CC.AA. se negó a pagar en tiempo y forma aquello que se le debía, un negocio, que aún así, tuvo que sufragar de su cuenta y riesgo las exigencias de Hacienda, dicha CC.AA. y la Seguridad Social. Un negocio que tuvo que echar a 5 de sus 9 empleados, cerrar y casi arruina a sus propietarios.

No Sr. Janer, no le hablo de la próxima película dramático-financiera del año, le hablo de mi anterior empresa. Le hablo de las familias que lo pasaron francamente mal y a las que nadie ayudo.

Le digo todo esto, porque son ustedes los que están para solucionar problemas, no para crearlos. ¿Cómo hubiera reaccionado usted en mi lugar?

Gracias.

Marco Janer:
Tremenda vivencia Sra. Costa, realmente surrealista algunas situaciones que se dan en una economía aparentemente libre y en la que las administraciones deben velar, y proteger, a sus emprendedores. A la savia de nuestro árbol social, a quiénes realmente tienen sobre sus hombros el peso de la economía nacional.

Es cierto todo lo que cuenta, cruento, pero cierto. Cómo también lo es que se necesita mucho coraje y determinación para reconducir una situación como esa y volver a resurgir. Es usted una heroína social, debe asumirlo, pues usted encarna los valores que mi proyecto pretende recuperar.
(Janer mira a la Señora Costa y esta se ruboriza) 

Ahora bien, ¿Qué hubiese hecho yo? Yo seguramente no lo habría hecho tan bien como usted, se lo reconozco, lo que si se, es cómo impedir que alguien más vuelva a sufrir las inclemencias que detalla.

En primer lugar, reduciendo el pago a los proveedores de la administración pública a un máximo de 15 días naturales. Debemos ser conscientes de la cantidad de familias que dependen de nuestra gestión, y por eso, debe ser siempre excelente.

También, debemos mejorar las relaciones entre empresas, ciudadanos y administraciones públicas, debemos abordar la transformación electrónica de una vez por todas, asumiendo que los necesarios trámites administrativos deben ser lo menos invasivos y más ágiles que puedan.

También debemos ser previsores y prepararnos, debemos adoptar un mecanismo de detección de impagos a las PYMES, que permita actuar de manera temprana ante lo que se considera el primer síntoma de recesión económica. Pues ustedes, además de ser héroes sociales de nuestro tiempo, son un medidor magistral de la temperatura económica.

Sanear nuestras cuentas públicas y garantizar la solvencia de nuestros servicios públicos, no son cuestiones ajenas, son pilares de nuestra actividad pública, y la administración, como todos vosotros, debe adecuar sus ingresos y gastos para poder responder con eficacia ante los retos futuros.

Muchas más cosas puede hacerse, debemos mejorar la productividad laboral que cada año nos hace perder competitividad y hasta el 6% de nuestra producción nacional, penalizar la doble imposición o simplificar la regulación.

También los jóvenes, como Marc, tienen que recibir una formación que les permita ser auto-suficientes, relacionarse con el resto de agentes económicos, adquirir cultura financiera y saber como enfrentarse ante los distintos trámites administrativos debe ser impartido, pues es una pieza clave de su maduración ciudadana.

Todo esto, y varias decenas de medidas más, forman parte de nuestro Proyecto por España, nuestro programa electoral...
(Janer le entrega un ejemplar a Marta, y al resto de los miembros del debate)

... un programa viable y que servirá a las personas, y no, se servirá de ellas.

Felipe Herero:
Buenas tardes Marco, yo si le tutearé desde el inicio...
(Janer asiente con la cabeza)

...me sumo al resto de compañeros, y le agradezco que nos hayan dado voz. Es gratificante poder exponer nuestra opinión a los líderes políticos de nuestro país.

Verá Marco, yo hasta hace un mes me encontraba en una situación insostenible, tras dos años de desempleo, había perdido las prestaciones pero mi familia seguía necesitando comer. Hundido en una depresión veía como se oscurecía mi futuro, y se esfumaba mis posibilidades de tener una pensión digna.

Mi familia y amigos seguían siendo mi único apoyo, desvalido e indefenso ante las facturas que se acumulaban, llegué a plantearme cosas impensables.

Esa situación tan insostenible llego a su fin cuando encontré de nuevo un empleo, una nueva oportunidad, y con él, la dignidad.

Marco, ¿ es consciente que los verdaderamente abandonados de esta crisis somos las personas a punto de jubilarnos que perdemos nuestro empleo?

Gracias.

Marco Janer:
Soy consciente del sufrimiento que muchos españoles padecen, de su indefensión y la necesidad de cambiar las cosas. No llego a imaginar cómo puede ser afrontar una situación así, quitar comida de tu plato para que tus hijos no vayan al colegio con la tripa vacía. Siento verdadera admiración por pesonas como usted, héroes anónimos, que se levantan cada día para ofrecer un futuro mejor a sus hijos.

Es a ustedes a quiénes va dirigido nuestro proyecto, es por ustedes por lo que personas como yo eligieron servir a su país.  

Uno de los grandes problemas a la hora de planificar el futuro, es la pensión, cuando nos enfrentamos a los últimos años de nuestra vida laboral, los que más importan a la hora de calcular el dinero que percibiremos durante nuestra jubilación. En ese sentido, nosotros apostamos por una reforma consensuada del sistema de pensiones, pero sobre todo, por la unificación de todas las prestaciones sociales de las distintas administraciones públicas en torno a un único mecanismo. Una renta que asista a personas como usted, cuando pierden su empleo, una renta que permita otorgar estabilidad a las familias, que impida que caigan en una situación delicada, amparando su desarrollo, y sobre todo, el de sus hijos.

Esa es una realidad que existe en España, una realidad por la que mientras existen personas, que cómo tú, sufrían sin que nadie les ayudará, se despilfarran millones de euros gestionando como se deben gastar otros millones de euros.

Eso es algo que debemos impedir, es algo que debe guiar nuestra acción política. Vosotros debéis ser nuestra guía, y la sostenibilidad de las cuentas la herramienta que garantice que el dinero público, que es de todos, se gaste correctamente.

Y es necesario hacerlo porque los servicios públicos son indispensables, porque sin ellos, perdemos nuestra esencia como sociedad, deben ser eficaces, deben ser eficientes, pero son nuestros. Son patrimonio de todos nosotros, y nuestro deber debe ser protegerlos y mejorarlos.

Y por eso, preservar nuestra sociedad de bienestar, es mi mayor objetivo. Pues ese es un logro que nuestros padres y abuelos nos trasmitieron, y por orgullo, por respeto hacia ellos, debemos preservarlos.

Marco Janer, durante el acto de cierre de la Campaña Electoral

(Janer es recibido entre aplausos por los asistentes, llega junto a a su mujer e hija, quiénes le han acompañado durante toda la campaña a lo largo y ancho de España. "Nunca podré devolver todo el apoyo que me han dado, nunca podré hacerlo como merecen, pero si puedo hacer algo, intentarlo.")


Gracias a todos, hoy miramos hacia atrás y vemos un gran esfuerzo realizado, miles de km recorridos y multitud de manos estrechadas. Aunque nuestras plegarias están con todos aquellos que sufren las inclemencias, nuestros ojos están fijados en un domingo que será sólo el comienzo de un proyecto por España. De un proyecto para los españoles, un proyecto cargado de medidas, respaldado por personas preparadas, con honestidad y la colaboración de todos vosotros, el domingo seremos aún más grandes que hoy.
(El público aplaude entusiasmado las palabras del líder conservador)


Hace más de un mes que iniciamos nuestro camino, que continuamos en esta ardua y trascendental senda, una senda que sabemos es muy importante para el devenir del país. Sabéis que necesitamos que os movilicéis, pasad la palabra, militad por los valores. Necesitamos que cada uno de vosotros, de vuestros amigos y familiares voten a los Conservadores. No tenemos aliados en el resto de partidos políticos, sabéis perfectamente que estamos solos, como Moisés cruzando el desierto, predicando ante el ataque incesante del poder mediático

Sabéis que necesitamos de una mayoría fuerte, de lo contrario los españoles se encontraran a merced de múltiples amenazas, el social-populismo, del separatismo rupturista y de los nacionalismos egoístas. Necesitamos de vosotros, y de toda vuestra fuerza.
(Janer recibe una sonora ovación)


Estamos aquí para terminar con la corrección política que se nos ha intentado imponer en las últimas décadas. Estamos aquí para hablar de lo que las familias españolas quieren hablar, para solucionar los problemas que realmente afectan al rumbo de nuestro país. Sin miedo y con la firme convicción de que hacer lo correcto no es irrespetuoso, es, simplemente, el mayor orgullo de un servidor público.

Algunos se quejan y miran perplejos las elecciones en otros países, nosotros lo tenemos bastante claro: la voluntad popular en el mundo occidental es clara, exige soluciones y no crear más problemas. Retomar un rumbo conservador, un rumbo constitucionalista, firme y decidido a cumplir lo pedido por los ciudadanos.

No debemos dejarnos engañar por las falsas promesas, ni los viejos profetas, no debemos dejarnos engañar por aquellos que una vez nos hundieron y no tendrían reparo en volver hacerlo. No debemos hacerlo, no por nosotros, sino por nuestros hijos, por nuestros padres, por sus padres y los padres de la nación. Todos ellos observan, esperanzados, cómo actuaremos. Porque de nosotros, depende España, depende una España solidaria, una España que no se rinda ante los avatares del destino, una España viable, una España en la que quepan y de la que sientan orgullosos, todos los españoles.

Podemos hacerlo, podemos, porque ya se ha hecho, porque tenemos un proyecto de país, un plan de reformas y medidas concretas para reestablecer nuestra grandeza como sociedad. Un plan para garantizar nuestra viabilidad como pueblo, el sostenimiento de nuestros servicios públicos, la rentabilidad de los negocios de nuestros vecinos y la pensión de nuestros padres y abuelos.

Podemos hacerlo, porque es necesario hacerlo, porque alguien tiene que hacerlo. Es, pues, la última oportunidad para lograrlo, el último de los cartuchos que nos permita salir de una situación de hundimiento colectivo, de falta de valores y principios, de ausencia de expectativas y futuro.

Lo lograremos, porque esa es nuestra convicción. Porque una gran meta, engalanada de ideas, es el lienzo dónde pintan los grandes hombres, dónde todos y cada uno de nosotros haremos historia. La haremos por Laura, y por Marta, por Marc, y por Herminia, por todos y cada uno de los que formamos este proyecto. Porque sin ellos no somos nada, juntos, somos todo.
(El auditorio ovaciona al líder en su grandioso alegato)


Hasta hoy hemos cumplido nuestras expectativas, hemos recorrido España presentando nuestro proyecto, cómo cumplimos ante los ciudadanos durante la extinta legislatura, cómo cumpliremos volvamos a iniciar una nueva. Cumpliremos en nuestro papel de defensor de los valores, de gestores eficaces, con nuestra capacidad de entendimiento, tendiendo puentes, y uniendo a los constitucionalistas para devolver a España una manera de hacer política: la correcta.

Tenemos proyecto y tenemos principios que lo respaldan, la nuestra no es una apuesta contra la banca, es un pacto con la ciudadanía. Un pacto que honraremos, porque esa es nuestra única obligación. Serviremos, con lealtad y honestidad, trabajando con unidad y valentía.

Hoy es el día de estar juntos, de mostrarnos unidos, colaborar y enorgullecernos de nuestra campaña, de nuestra nación, mirando al mañana con orgullo e ilusión.


Por todo ello, y por todo lo bueno que nos espera, votad, hacedlo con convicción, hagamos juntos el proyecto por España.

¡Gracias por todo!
(Una ovación cerrada rompe el silencio cuando finaliza Janer)

Esteban Rodríguez Ocampo, Vicepresidente Nacional, en un instante de su intervención

(Janer finaliza y señala al General Ocampo, "Sube, sube conmigo, sin ti nunca hubiéramos llegado tan lejos")


Gracias amigos, gracias amigo, el 18 serás Presidente de todos los españoles. Y lo serás porque eres el único capaz de hacer lo que ellos demandan, porque eres el único que ha hecho lo que ellos exigían, y serás, el único, que haga lo que ellos ansían.
(Un aplauso generalizado silencia el escenario)


Una vez más, en esta campaña que ya está en su recta final, en una campaña que lo hemos hecho muy bien, que a pesar de las dificultades, de las imposiciones de la hegemonía de la izquierda mediática y de la ya insoportable corrección política que demuestra esa misma izquierda que nos ha dejado en el umbral de nuestras posibilidades. Hoy somos fuertes, presentemos la única verdadera alternativa, una propuesta totalmente reformista, pero no un maquillaje de lo mismo de siempre, presentamos una propuesta de cambio real. Porque si no cambiamos nosotros a España, es decir si no hacemos la España que quieren y merecen las familias, los trabajadores, las madres y padres, los emprendedores españoles, entonces nuestro país seguirá coartado y manipulado por los mismos de siempre.

Es tiempo de decir basta ya, de decir España está de pie, y España recuperará su valor, su orgullo y su firmeza. Vamos a conservar lo que nos queda y que está siendo amenazado, y vamos a recuperar lo perdido, los valores que fueron y son sistemáticamente atacados y vilipendiados y los principios por los que tiene sentido ser una Nación europea, de tradición cristiana y occidental.
(Los asistentes ovacionan al líder conservador)

Presentamos, pues, una gran propuesta común, un proyecto de Nación y de futuro. Demasiado tiempo se ha intentado humillar a nuestro país, y ya va siendo hora de cambiar la situación. Nos aboca claramente la apuesta por el empleo, y para ello hemos de hacer esfuerzos importantes. Creemos en el Estado de Bienestar, pero también en el esfuerzo, el mérito y la libertad.

Es, por tanto, una necesidad hacer reformas que son urgentes para la recuperación del país. Es tiempo de comenzar a negociar arduamente con las instituciones europeas para que España pueda mejorar sus tratados comerciales, proteger a nuestros agricultores de las intentonas de Bruselas, y avanzar hacia un modelo de desarrollo productivo sostenible y serio. También afianzaremos el modelo educativo de calidad y así adoptar una estrategia común en toda la Nación, cuestión capital para el porvenir de nuestros jóvenes que deben crecer y desarrollarse en un ámbito de mérito y de condiciones de excelencia.

Realizaremos una fuerte y contundente rebaja de impuestos, tasas públicas y administrativas para las clases medias y los emprendedores, lo que nos asegurará un estímulo fuerte al empleo y el crecimiento, y controlaremos el déficit con un plan serio de consolidación para hacer viable nuestras cuentas públicas y reducir el endeudamiento y la hipoteca que ello supone a nuestros hijos y nietos, es decir a las futuras generaciones.

Nosotros apostamos a simplificar la vida de los españoles, que su esfuerzo sea el protagonista de su crecimiento, y que el gobierno no saquee sus ganancias para mantener vagos ni variopintas mamandurrias en los presupuestos generales que no aportan nada al crecimiento del país. No por nada, sino por todos.
(Aplausos de un auditorio entregado)


Lo que proponemos es un gobierno que ofrezca un verdadero proyecto por España. Mientras algunos se dedican a pedir independencias periféricas, mientras otros se dedican a jugar y ceder con independentistas y comunistas como lo han hecho toda la vida hasta que los han traicionado, nosotros somos la única propuesta coherente, nos mantenemos firmes en nuestras convicciones, en nuestros valores y en nuestra visión común de España.

El próximo domingo tendréis la opción de votar entre proyecto de futuro, un proyecto de unidad, un proyecto sostenido por un programa serio, estudiado y detallado de cómo gobernaremos en la próxima Legislatura, un proyecto que será liderado por Marco Janer, un hombre con todos los requisitos para ser el Presidente del Gobierno, es un líder que actúa para el beneficio de todo el país y que no claudicará en esta renovación que ofrecemos. O podéis votar a los mismos de siempre, a los que pactan con quienes buscan aniquilar la convivencia pacífica, a quienes quieren convertir a España en rehén de nacionalidades históricas y no en la contención de todas ellas bajo un marco común de paz y unidad, a quienes pretenden derribar los últimos cimientos de nuestra tradición europea, occidental y cristiana para que España sea un intragable experimento de califatos, marxismo cultural y aborto libre.

Porque somos la última defensa, somos la posibilidad de hacer España grande, fuerte y próspera como en otros tiempos. Queremos, pues, una España que haga de su historia su mayor hito, que demuestre su grandeza, que contenga y conserve sus tradiciones y su cultura, que no se deje atemorizar por elementos foráneos totalmente ajenos a nuestra realidad nacional, queremos asegurar una vejez digna, garantizar una educación de méritos y de instrucción de calidad, una sanidad universal de primer orden, un desarrollo productivo y económico donde el protagonista sea el emprendedor y el trabajador y no el Estado sableando con impuestos a la productividad y el crecimiento.

Debemos discernir lo correcto, tenemos que dejar en claro que en España no pueden existir barrios donde no se cumpla la ley, motines de inmigrantes ni bandas que acosen a nuestras mujeres e hijas. Esto es algo que debemos dejar en claro y que os convoco a reflexionar.

No dejemos caer a España, fuimos la última defensa, y es tiempo de demostrar que pretendemos una Nación de valores, de tradiciones, de bienestar, prosperidad y libertad.

Por todo ello os animo a votar a los Conservadores y hacer Presidente de nuestro país a Marco Janer.

Muchas gracias.
(Los asistentes, en pie, ovacionan al Vicepresidente Nacional)

Martí Giesler, Secretario General, durante su intervención en el cierre de campaña

(Janer insta a subir al Secretario General Giesler al escenario junto a él. "Giesler personifica la unidad en la diversidad, representa de lo que es capaz un hombre decidido y con valor, encarna nuestros principios, cómo juntos somos más fuertes, más prósperos y rendimos mejor. El es catalán, y por tanto profundamente español, europeo, y cristiano, el nos ha representado en el exterior durante toda su vida y seguirá haciéndolo mientras quiera, con la ayuda de Dios.."


Gracias a todos, gracias en especial a nuestro candidato y futuro presidente. Él realmente personifica lo que todos ansiamos, coraje, honestidad y preparación. Aptitudes que todos queremos alcanzar, pero solo unos pocos logran dominar.

Como todos sabéis yo nací en esta tierra, soy catalán, y por ello, español. Alemanes mis antepasados, y por tanto, europeo. De tradición cristiana, de firmes convicciones humanistas, orgulloso defensor de mi patria, de la familia y la justicia social.

Por todo eso, pero sobre todo, porque es lo correcto, porque creer en la familia, en que existen valores indiscutibles que deben guiar a una sociedad, porque no concibo una sociedad desamparada a la que se dicta lo que hacer, porque existe un modo de vida que merece la pena defender, soy conservador.
(El auditorio estalla en aplausos)


Muchos en Europa se preguntan, -¿Cómo podía no defenderse una postura conservadora basada en sólidos principios en España?-

Y no sabía que decirles, sabía porque habíamos llegado a esta situación, pero no qué impedía que existiera.

El conservadurismo es una ideología innata en el ser humano, su único objetivo desde los albores de la humanidad fue sobrevivir y perpetuarse, conservar su vida y la de su estirpe. España siempre ha sido un país de una fuerte tradicción conservadora, católicos, nuestra grandeza siempre ha estado asociada a nuestras firmes creencias, a nuestra capacidad aventurera, a nuestro respeto por la historia. Todo ello encaja con el espiritú emprendedor de la cultura catalana, con su situación de puerta del mediterraneo y puente con Centroeuropa.

Todos los valores que hicieron grande nuestra nación partían de su nobleza como pueblo, de su actitud y coraje. Todos y cada uno de los acontecimientos cúlmen de España tienen como nexo común la unión de su pueblo en torno a ideas correctas.

Nuestro proyecto no es emular, ni importar ideas externas, tampoco es progresar a costa de todos. El nuestro es un proyecto que desbancará de su aparente hegemonía al discurso seudoprogresista, la infamia separatista, recuperará la fraternidad y solidaridad de los españoles. Nos reunirá por ideales nobles, y dará sentido a la política.
(Aplausos)


La nuestra no es una aventura, ni tampoco un brindis al sol, tenemos un proyecto claro y transparente desde el primer día de la campaña. Un proyecto conciso, con ideas coherentes, ideas necesarias y que necesitaban que alguien las liderará. Nosotros somos ese alguien, estamos dispuestos porque los españoles necesitan alguien que piense como ellos, gente dispuesta a hacer lo que el país necesita, a aspirar a más construyendo piedra sobre piedra. A no rendirse jámas, ni tratar de reinar sobre los escombros de una sociedad.

Porque los españoles merecen que les digan la verdad, que les respeten y defiendan. No necesitan que les digan cómo dirigir sus vidas, como crear sus negocios o cómo deben pensar y criar a sus hijos.

Algunos intentan mantener el discurso de la corrección política que se ha establecido hace tiempo, también en el seno de la Unión Europea. Por ejemplo, la oleada inmigratoria de los últimos años. Una oleada para la que ni nuestro país ni tampoco ningún país de Europa estaba preparado. ¿Seguiremos mirando a otra parte o actuaremos con firmeza para contrarrestar las consecuencias que de ello se derivan?

Observamos, pues, cómo se llevan formando sociedades paralelas sin ningún impedimento en todos los países europeos, con enormes grupos de inmigrantes musulmanes que desdeñan de la libertad, de la concordia, de la mujer, de la democracia y del mérito, grupos de inmigrantes que deciden aislarse y militar para islamizar a la sociedad que la rodea. Muchos no han tenido ni tienen la más mínima intención de adoptar nuestro modo de vida, pues consideran la suya como superior a la nuestra. ¿Esto que digo es políticamente incorrecto? Pues entonces bienvenida la incorrección política, digamos las cosas como son, porque las soluciones provienen de un diagnóstico correcto.

Nosotros creemos en que existe una forma de actuar coherente con una manera de pensar y sentir, creemos en los españoles y en su capacidad de elección y decisiones.

Sirviendo con orgullo y dedicación constante, haremos realidad la esperanza de los millones de españoles que el domingo nos concederán su confianza.

Porque es lo correcto, pero ante todo, porque es necesario. El 18 vota a Janer, vota Conservador.

¡Muchas Gracias!
(Los asistentes se ponen en pie y ovacionan al hispano-alemán, Giesler)