"No se puede dividir el país y proclamarse la nueva política como hace el PP y el Gobierno" - César Alarcón (PSOE)

César Alarcón
Portavoz del PSOE

• "El PP ha mercadeado y prostituido las diputaciones provinciales con corruptelas que ahora pretende enmendar eliminándolas"
  
• "Hemos avalado el 90 % de la reforma constitucional y el PP ha preferido imponer una Constitución a su imagen y semejanza"
  
• "Atacar las diputaciones es atacar al municipalismo"
  
• "Generar consenso es obtener el 95 % de votos a favor como hizo Suárez en 1978, no dividir el país con un estrecho margen de dos votos"
  

"La posición del grupo parlamentario socialista ha sido ampliamente debatido y la resolución adoptada es la acordada en bloque: el PSOE dirá no a la eliminación de las diputaciones provinciales. El PP y la derecha de este país aún no han comprendido el mensaje que hemos lanzado. No es cuestión de hablar de regeneración, cosa que viniendo del PP no resulta más que un chiste sin fundamento, sino de lo verdaderamente necesario. Otros han venido de la política desde despachos de empresas o similares. Sin embargo, los que venimos desde el servicio público, desde el ámbito local, somos perfectamente conscientes del papel de los entes provinciales. Que el PP las haya pervertido y mercadeado y las haya centrado en el eje de la corrupción política de este país, no significa que todas funcionen del mismo modo y respecto otros objetivos.

El PSOE ha debatido ampliamente el papel de las diputaciones, y si bien es cierto que en determinados supuestos se ha sugerido su reforma, que no su eliminación, lo cierto es que los socialistas somos ampliamente municipalistas, y esto pasa por el papel más que fundamental que las diputaciones provinciales ejercen en el ámbito local. Negar las diputaciones, es negar la trascendencia histórica pues hay que recordar que éstas se remontan a mucho antes que las propias Comunidades Autónomas y que la propia estructura de la Administración General del Estado. Del mismo modo, su papel en la cooperación local y en asistencia a los más de 8.000 municipios de nuestro país. Atacar las diputaciones es atacar al municipalismo, es atacar a la Administración Local, la que es más cercana a los verdaderos problemas de los españoles y españolas. Desde el Partido Socialista no podemos renunciar a esto, más aún con las políticas antilocales que el PP viene aplicando desde 2011.

Nuestra posición ha sido clara: hemos dado nuestro visto bueno al 90 % de la reforma constitucional, una reforma que venimos reclamando los socialistas desde 2012. Hemos sido los primeros en ceder en cuestiones fundamentales, pero nos hemos topado con el mismo PP de siempre, el que aboga por el sectarismo, el que no cede ni un ápice, el que pretende hacer una Constitución a su imagen y semejanza, el que pretende enmendar sus escándolos corruptos con un borrón y cuenta nueva. A eso, diremos no. La Constitución que venimos reclamando desde el PSOE debe servir como reflejo para toda la sociedad, no para la del PP y esa extrema derecha que la sustenta como partido. Además, hemos ofrecido un marco de consenso para formalizar un pacto de Estado y sentar las bases para una Ley Integral para la Reforma de las Diputaciones Provinciales que culmine con su democratización, con la elección directa de sus componentes; fijar claramente el marco de sus competencias, desde la perspectiva local y de cooperación municipal; y que sean limpias, abiertas y eficientes, desde la transparencia.

El PP prefiere enmendar sus corruptelas y renegar del consenso político. No han aprendido nada de 1978. El PP ha tirado por la borda el consenso que desde el PSOE hemos ofrecido. Pero ya lo hemos advertido y se lo hemos explicado a los españoles y españolas: con este PP que prefiere ir hacia el sectarismo ideológico, que legisla contra la mayoría de la ciudadanía, que va de la mano de los independentistas vascos y de aquellos que amenazan la estabilidad institucional en asuntos de cuestión nacional, contra ese PP, vemos muy difícil llegar a consenso alguno. O el Presidente del Gobierno toma conciencia de la situación que ocupa, o estarán condenados a la soledad de la mayoría silenciosa de este país, que no por ello sabe que esta derecha representa al partido político más antipático de todos. Generar consenso es obtener el 95 % de votos a favor como hizo Suárez en 1978, no dividir al país con un estrecho margen de dos votos como ha hecho el PP y Héctor Fernández."

"Sí, he escuchado las declaraciones del señor Casado. Una vergüenza que el PP solo sepa insultarme a título personal para poder justiciar una decisión política que no cuenta con el respaldo de la mayoría de españoles y españolas. Habrá que decirle a algún dirigente del PP que sepa antes de lo que habla, porque luego es bochornoso. Yo llevo trabajando como empleado público desde que me titulé, y sí, a mucha honra de trabajar tras superar procesos selectivos, plaza a plaza, para la Administración Local, como millones de españoles más. Ya sabemos que el PP odia lo público y odia a los empleados públicos, de ahí sus ganas de ir recortando derecho tras derecho a la función pública y de desmerecer el valor de la Administración Pública. Otros solo han trabajado en despachos a través de enchufe, y otros del PP, ni siquiera se les conoce experiencia laboral. Una vergüenza. Lo cierto es que aún nadie ha escuchado por qué el PP ha preferido parecerse más a la Alianza Popular de Fraga y sus intentos por bloquear el consenso constitucional, que a Adolfo Suárez, en 1978. Vergüenza."