Gobierno de España | Fernández: "El discurso separatista está agotado"

[...]Si hay algo que a día de hoy en Cataluña es evidente es que el discurso separatista está agotado, forma parte de la vieja política y de los viejos discursos y, desde luego, no sirve para el nuevo tiempo político que tanto los catalanes como el resto de españoles deseamos. Está agotado no sólo porque se haya quedado anticuado, sino porque sus argumentos y sus lógicas responden a debates que hace años que no se plantean. Cuando los separatistas hablan de cosas como "nos invaden", "tanques en la Diagonal", "no nos escuchan", "quieren suspender la autonomía", es que o no se han enterado del cambio de gobierno o realmente no estaban preparados para el cambio en las formas de hacer las cosas con respecto a la relación de Cataluña y el resto de España. Y curiosamente es un discurso irreal del miedo, que a día de hoy nadie entiende en Cataluña, y que otros utilizaron contra mí en las pasadas elecciones generales, con el resultado que ustedes conocen.

Sinceramente creo que se han inventado un enemigo al ver que hoy no existe ninguno. Y eso les ha llevado a que no saben articular un discurso acorde con la realidad catalana o española. Y ello es así porque se han encontrado con un Gobierno en España que no es el que esperaban.
Ellos se esperaban a un gobierno inmovilista, y se han encontrado a un gobierno que toma la iniciativa del diálogo abierto y cordial. Los separatistas se esperaban un gobierno que no quiere escuchar a los catalanes, y se han encontrado a un gobierno que escucha, que se pone manos a la obra y que está en las calles de Cataluña hablando, escuchando y proponiendo. Ellos se esperaban a un gobierno con un discurso del miedo, el típico, y se han encontrado a un gobierno que tiene un proyecto real y sensato de convivencia en común entre catalanes y el resto de españoles.
Y claro, en esta situación los separatistas no saben qué decir ni qué hacer. Por eso hablan de tanques, porque no se han dado cuenta del cambio que yo he puesto encima de la mesa y que el resto de catalanes sí ha sabido ver. No saben reaccionar ante un Gobierno de España que ya no se encierra ni se enroca ni amenaza, sino que sale a la calle, dialoga, escucha y tiene un proyecto realista de convivencia, respeto y reconocimiento. El separatismo se ha perdido y no saben por dónde salir ante un Gobierno dispuesto a ofrecer un proyecto en común ilusionante, esperanzador y de cambio, que sabe escuchar y dialogar.

Ante esta perspectiva, creo que al separatismo le quedan muy pocas embestidas, pues no están sabiendo reacciona al cambio social y sentimental dentro de la propia Cataluña. Hoy hay una mayoría de personas que quieren un modelo de convivencia y no de ruptura, de futuro y no de división de sentimientos.[...]