Solicitud de inhabilitación de Su Majestad el Rey y nombramiento de la Regencia de España (GOBIERNO)

Señor Presidente, señorías.

Antes de tratar el tema base de este Pleno, señor Presidente, me veo en la obligación, como diputada y como Portavoz del Grupo Parlamentario Popular, de comentar los últimos sucesos ocurridos en esta Cámara. Señorías, esta diputada siente repulsa hacia el circo que está montando la izquierda radical de este país, PSOE incluido para desgracia de todos los ciudadanos españoles. A esta izquierda le gusta mucho aquello de aplaudir al Poder Judicial cuando hace algo que les conviene y abuchearlo cuando sus decisiones contravienen sus premisas ideológicas.

(Aplausos de la bancada popular)

Señorías, su espantada me ha recordado a tiempos pasados en los que un partido reprobable, como es el Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán, abandonaba reiteradamente el Reichstag aun a riesgo de la inestabilidad social y política alemana con fines únicamente partidistas. Ustedes, señorías, han hecho hoy lo mismo: primero, con sus discursos denigrantes y, luego, con su espantada.

(Aplausos de la bancada popular)

Ahora sí, señorías, nos encontramos hoy ante este Pleno debido a una situación de máxima gravedad que ha quebrado el sentir de millones de ciudadanos españoles que no pensaban, ni de lejos, que tuviéramos que decidir en este sentido, dada la juventud de Su Majestad el Rey.

Como sabemos, señorías, Su Majestad el Rey don Juan Carlos I se encuentra en una situación de extrema gravedad que, de expandirse en el tiempo o empeorar, obligaría a paralizar toda la actividad legislativa, habida cuenta de la obligación del Jefe del Estado de refrendar las leyes y otros textos legislativos y ejecutivos para su publicación en el Boletín Oficial del Estado. Por ello, la necesidad de que sea inhabilitado es, en toda medida, indiscutible aunque, para muchos, pueda ser doloroso, pues estamos hablando del Rey que trajo la libertad y la democracia a nuestro país y del Rey que abortó en varias ocasiones intentonas golpistas o de sublevación realizados en nuestra joven democracia.

(Aplausos de la bancada popular)

Ante todo esto el Gobierno se apresura a solucionar un problema que podría provocar una crisis institucional extremadamente grave de no ser resuelta con suma celeridad.

Así, ya hemos visto a ciertos políticos solicitar referendos encaminados a un intento de proclamación republicana. Parecen olvidar estos políticos que no existe, en modo alguno, una mayoría ciudadana que apoye tales solicitudes y que, además, hace tan solo cinco años que todos, democrática y libremente, votamos la Constitución Española, Carta Magna de nuestro ordenamiento jurídico que fue aprobada por una amplia mayoría y que respalda la labor de Su Majestad el Rey y la monarquía parlamentaria como forma de gobierno para nuestro país. Además, justo antes de tal referéndum, se realizó otro en el que se le preguntó de manera directa a los ciudadanos qué tipo de Estado preferían y ganó la monarquía parlamentaria. Está claro que estos políticos, de coherencia nula, solo recuerdan los procesos electorales cuando les interesa y estos dos referendos no les interesan en estos momentos. Ya comprendo que ustedes querrían tener un referéndum sobre este tema cada dos meses para ver si ganan alguno, pero eso no es estabilidad, señorías, eso es partidismo.

(Aplausos de la bancada popular)

Es obvio que este debate, que han intentado levantar algunos políticos con intereses únicamente partidistas, no procede en estos momentos y solo busca desestabilizar nuestra democracia y nuestra forma de Estado.

De este modo, la Constitución Española recoge el mecanismo a proceder en el caso en el que nos encontramos. Es obvio que de producirse cualquier situación que incapacite a Su Majestad el Rey para la realización de sus funciones como Jefe del Estado, y este es ese caso, procede el artículo 59.2 de la Carta Magna que hemos escuchado de boca de la señora Moriyón, Secretaria Primera de este Congreso.

Así, la Regente debe ser, en vista de los dictámenes publicados desde que comenzara este Pleno, Su Majestad la Reina doña Sofía, hasta la mayoría de edad del Príncipe Felipe.

Primero, señorías, se opusieron a la Regencia del duque de Suárez y gritaban que la Regencia debía ejercerla una persona neutral y, ahora, arremeten contra el Príncipe de Asturias. ¿Cómo no hablaron de la Infanta Elena como supuesta sucesora desde el comienzo de este tema? ¿Cómo no han solicitado, pues, desde la aprobación de la Constitución Española la proclamación de la Infanta Elena como Princesa de Asturias? ¿Cómo, señorías del Grupo Socialista, durante su tiempo de mandato no hicieron posible todo esto? Yo se lo voy a decir, señorías. No han hecho nada de esto porque a ustedes les da igual la Corona. Este tema de sucesión se les ha ocurrido ahora para arremeter contra el Gobierno en un nuevo intento reprobable y repugnante con fines únicamente partidistas.

(Aplausos de la bancada popular)

Señorías, está claro que a ustedes no les importan los intereses de los ciudadanos, no les interesa la estabilidad del Estado y no les interesa la Corona. A ustedes solo les interesa insultar al Gobierno e intentar perjudicarlo. Señorías, los ciudadanos, en elecciones, les dirán que este no es el camino, que esto no es lo que desean los ciudadanos españoles y que lo que quieren es estabilidad y que sus representantes busquen soluciones y no pongan palos bajo las ruedas.

(Aplausos de la bancada popular)

Por desgracia, señorías, por lo que esta diputada ha escuchado en este Hemiciclo, todo apunta a que el Partido Socialista, y demás Grupos de extrema izquierda, ha decidido usar este asunto: la Corona, un tema primordial para nuestro país. Han decidido que, debido a que ya nadie sabe quiénes son y que los ciudadanos recuerdan que el PSOE los ha abandonado durante los últimos años, este tema podría dar suficientes portadas para hacer ruido y poder hacerse notar aunque para ello deban crear una crisis institucional sin precedentes en la historia de nuestro país. Señorías, esta actitud es, cuando menos, reprobable y diferencia notablemente la forma de trabajar del Grupo Socialista y del Grupo Popular, pues, nosotros siempre buscamos lo mejor para los ciudadanos y para ellos una crisis institucional nunca es bueno.

(Aplausos de la bancada popular)

Señorías, estamos ante un momento crítico para nuestra democracia. Estamos en un momento en el que debemos decidir qué tipo de democracia queremos para nuestro país. ¿Queremos un país con una democracia en la que todo valga y en la que todo se use con fines propios? ¿Estamos en una democracia en la que queremos líneas rojas de lealtad en pos de la estabilidad del país?

Nosotros, señorías, siempre hemos abogado por este segundo tipo de Estado. Nosotros, señorías, en los momentos de crisis siempre hemos estado del lado del Gobierno, gobernara quien gobernara. Nosotros, señorías, siempre hemos valorado el problema del país y de los ciudadanos sin importar si el Gobierno lo ocupa miembros de nuestro Partido o miembros del Partido Socialista.

(Aplausos de la bancada popular)

Por ello, señorías, es por lo que el Grupo Parlamentario Popular votará de manera favorable a la propuesta que el Gobierno realiza. Lo haremos, señorías, porque nuestra obligación moral es procurar la estabilidad del Estado y, en estos momentos, la propuesta que realiza el Gobierno es la más coherente y la más consecuente.

Muchas gracias, señorías. Muchas gracias, señor Presidente.

(Aplausos de la bancada popular)