Proposición de Ley del Instituto de la Mujer (GPC)

Buenos días, Señorías. Se abre la Sesión.

Debatimos la Proposición de Ley del Instituto de la Mujer que presenta el Grupo Parlamentario Comunista.

Tiene la palabra el Portavoz del GPC.

Gracias señor presidente.

Señores diputados, nuestra democracia es todavía débil, por decirlo de alguna manera, es una recién nacida. Pero aún siendo una recién nacida, debe tener la valentía de empezar a romper moldes. No se puede negar que nuestra constitución es un texto que reconoce la igualdad entre hombres y mujeres.

Pero no basta con reconocerlo, hay que conseguirlo. Y han sido muchos años de opresión mental hacia la mujer y de mentalidad patriarcal y católica, para que ahora de golpe y porrazo podamos cambiar el chip. Las cosas no son tan fáciles, y eso lo sabemos los comunistas mejor que nadie. Hay que luchar por conseguirlo, no basta con escribirlo, hay que conseguirlo.

De aquí que sea necesario la creación del instituto de la mujer como organismo independiente, que luche por paliar las desigualdades, que siguen presentes. Gracias.

Gracias, señora Anguita. Señorías, tienen la palabra para debatir la proposición.

Pasqual Prim, portavoz del GPSU

No tenemos nada más que añadir, puesto que ya se ha dicho todo. Votaremos a favor.

Rafael Sánchez Mazas, diputado de FE-JONS(a) integrado en el Grupo Mixto

Gracias, señor Presidente.

Señorías, estamos en un terreno complicado. Conocido es por todos el compromiso de FE-JONS(a) con la igualdad, también la igualdad entre hombre y mujer. Es muy posible que haga falta un instituto de las características del que hoy se nos propone, a pesar de que en realidad hobres y mujeres sí que somos diferentes, pero no debemos serlo en cuanto a sueldo, posibilidades y libertades.
Pero precisamente, buscando la igualdad, sería un error de concepto llamarle Instituto de la Mujer. Sería negar una parte del problema de raíz, nada más comenzar su andadura, con el nombre de la institución. Si lo que trabamos es por la igualdad debe llamarse Instituto de Igualdad o Instituto de Equiparación de Condiciones o Instituto de Hombres y Mujeres en Situación de Desigualdad. Pero no Instituto de la Mujer, en exclusiva.
Por último, señora Anguita, dice que ha habido años de mentalidad patriarcal y católica. Si bien es cierto que la mentalidad patriarcal se ha desterrado de muchas democracias de nuestro entorno, no ha de ser así con la mentalidad católica. Socialmente España es católica, no lo olvidemos, opinemos lo que opinemos cada uno.
Nuestro voto queda pendiente de estos dos aspectos: cambiar el nombre del instituto a crear y que la señora Anguita rectifique este aspecto de la motivación de crear citado instituto.

Muchas gracias

Susana ANguita

Se trata señor Sánchez de una igualdad real, y por lo tanto es necesaria una discriminación positiva donde el género en desigualdad sea favorecido. Por otra parte, y para bien, o para mal, tenemos mentalidad católica, una mentalidad que nos han inuculcado a fuego y en la cual la iglesia siempre defendió la posición de la mujer en inferioridad dentro de la familia, y por lo tanto no vamos a cambiar ni un ápice nuestra postura.

Rafael Sánchez Mazas, diputado de FE-JONS(a) integrado en el Grupo Mixto

Gracias, señor Presidente por este nuevo turno de palabra.

Señorías, votaremos en contra de esta propuesta. Agradecemos a la señora Anguita su claridad, pero no compartimos la motivación que propulsa la medida y que el propio nombre del instituto provoque discriminación, aún siendo discriminación positiva, son motivos de peso suficiente para invitar al resto de grupos a votar en contra de esta propuesta.

Muchas gracias

Basta, señorías. Les ruego mantengan el orden.

Finaliza el debate y pasamos a votación. Muchas gracias.