ABC opinión: José Valladares - Más allá de la mayoría

Más allá de la mayoría

Don José Valladares y Sicart

Aunque resulte trágico, el Gobierno y el partido del señor De la Torre vuelven a enfrentarse en el Congreso de los Diputados, sin intercambiar ni comparar ideas, lanzándose, apenas, acusaciones personales y poco más que partidistas. Estando en el hemiciclo, me imagino los descompuestos rostros de millones de españoles que siguen, por ejemplo, la sesión de control, y ven como en lugar de centrarse en el empleo, en la reactivación económica y en otros problemas todavía no resueltos, cual burla hacia la ciudadanía, Gobierno y PLD se interpelan acerca de qué prensa leen o dejan de leer. Tal menosprecio hacia la democracia y la sociedad, con Ministros interrumpiendo la sesión, apareciendo por primera vez, impacientes por ser preguntados acerca de una tarea que desconocemos, o con otros que, por segunda vez, parecen evaporarse en el aire cuando les corresponde contestar en el Congreso de los Diputados, indica la poca seriedad de los dos partidos políticos que obtuvieron más representación en las pasadas elecciones. Estoy convencido de que cuando los españoles les votaron, no esperaban que discutieran acerca de la prensa que siguen unos y otros. Cuando les votaron, los españoles dieron su confianza para que ayudaran a solucionar los problemas que padece la nación.

Triste también es el principio de esta Legislatura. Como digo, de la mayoría de los Ministros no sabemos nada. Los que hemos conocido, ha sido o bien por graves problemas que han emergido de repente, o bien porque han plantado al Congreso. Poco sabemos de su actividad… Se empeñan, cuando se les pregunta, en contestar que no realizan el trabajo de cara a los medios de comunicación… Nadie lo niega, pero lo que preocupa es que la labor que lleven a cabo —si es que hay alguna— la realicen también de espaldas al Congreso, representación del pueblo español. Tan solo un Ministro se salva, y el honor requiere mencionarlo: el señor Blanco, Ministro de Economía, realiza una importante actividad… a la que, eso sí, hace apenas unos meses, el PSOE se oponía. Por otro lado, el Partido Liberal no lleva registrada ni una sola medida en la Mesa del Congreso. Como ha dicho recientemente mi compañero, el señor Lerner: “palabras, palabras y más palabras. Propuestas en el Congreso: 0”. Tal vez, los señores del Partido Liberal empeñan toda su tinta en sus medios oficiales, en lugar de ponerla al servicio de la patria.

Como digo, el balance de lo que llevamos de Legislatura es descorazonador. Cuatro de los diez grupos del Congreso, todavía no han registrado ni una sola medida. Gobierno y PLD se encasillan en repetitivas discusiones personales y partidistas. Escribo en este periódico porque me consta que es el de mayor tirada nacional, y lo hago para decir a la nación que no todos los Diputados entramos en ese juego. No hay que dejar de creer en la democracia, y mucho menos debido a la actitud de unas pocas personas. La fe en el sistema es uno de los pilares más fundamentales de la democracia y, por tanto, hay que mantenerla.

Lamentablemente, ahora pueden suceder dos cosas. Tras la lectura de esta carta, puede suceder que PSOE y PLD encuentren en mi persona un nuevo punto sobre el que verter críticas. Y, aunque resulte triste, me temo que la otra opción es que reconozcan sus errores e inmediatamente después —como ya ha sucedido en otras ocasiones— vuelvan a esta actitud desordenada. Sin embargo, españoles, no todos somos así.