La Campaña de Hillary, y la Guerra de Venezuela (The New York Times)

Las duras primarias del Partido Demócrata han hecho cambiar el rumbo de un gobierno que finaliza, no sin escándalos y complicaciones, y con un Congreso controlado por el Partido Republicano.

La senadora Susan Feinn, cercana a Hillary, fue contundente en el momento del triunfo de Hillary como candidata oficial para la presidencia: ''Obama tiene 4 meses de horizonte, Hillary 4 años''. Esta frase fue un huracán interno, no solo para el partido, sino para el Gobierno. Las constantes fricciones entre Obama y su Secretaria de Estado, Hillary Clinton, y las sospechas de que la Casa Blanca actuaría en favor de Joe Biden, afectaron negativamente en los sondeos para los demócratas. Muchos se preguntaban porque Hillary continuaba en el Gobierno, y la respuesta es clara: Hillary controla el aparato partidario y tiene el estratégico apoyo de los sindicatos, muy ligados a la familia Clinton.

Según los asesores cercanos de la jefa de la diplomacia norteamericana, ésta no hizo ejercicio de la duda, ni un segundo, reunió a todo el Comité Demócrata y al mismísimo presidente Obama para dejar ''las cosas en claro''. O el partido se unía entorno a su figura, o perderían las elecciones, algo que se estima con mayor seguridad tras el paso de las semanas.

Obama, en pos de su partido, ha perdido la iniciativa, en el crepúsculo de su gobierno y a menos de 4 meses para las elecciones, dejando a Hillary como el estandarte de su administración, con el único objeto de frenar la caída en las encuestas y poder enfrentar al republicano Mitt Romney con mayor seguridad.

Los sondeos sobre Venezuela advertían que la mayor parte de los estadounidenses apoyaban una intervención contra Chavez, no obstante Obama aun se resistía a la intervención militar. Ni la presión de los republicanos, ni la presión del ejército, ni la presión de los medios masivos de comunicación pudieron hacer que Obama hiciera un giro en su decisión, hasta que los asesores de campaña de Hillary fueron contundentes: ''Necesitamos una victoria para Hillary, necesitamos la iniciativa para vencer a Romney. Ellos piden la intervención contra Venezuela, nosotros doblaremos la apuesta''. La presión de Hillary fue suficiente para que Obama firme el decreto.

La ex subsidiaria de Black Water Corporation, una empresa militar privada que ofrece sus servicios a las FFAA, es la mayor inversora en los fondos de campaña demócrata, incluso más que al Partido Republicano.

Una gran ambición, Hillary ansía ser presidenta y con 69 años, es su ultima oportunidad.