EL HOMENAJE A AZAÑA DENUNCIADO

El acto en memoria de Manuel Azaña corre peligro después de que Buenaventura decidiese interponer una denuncia al mismo, alegando que se estaría homenajeando a un asesino.
Como bien nos han tratado de recordar desde la CNT, el 11 de enero de 1933, en la localidad de Casas Viejas (actualmente Benalup), se produjo una revuelta anarquista en la que participarion miembros del sindicato confederado, destituyendo al alcalde e hiriendo a dos números y asesinando a otr número y un sargento.
Al enterarse de la noticia, el gobierno envió al capitán Rojas, al frente de fuerzas de la Guardia Civil y la Guardia de Asalto (conocida por algunos de sus excesos a la hora de aplicar las órdenes), que entraron al pueblo disparando, incendiaron la casa donde se refugiaban algunos de los insurrectos, incluido Cruz, o más conocido como “Seisdedos”, muriendo calcinados todos los que en el interior se encontraban. Luego llegaron las detenciones y las fusilaciones a implicados, sospechosos y familiares de los mismos, alguno de ellos, llegando a sufrir torturas antes de morir.
En 1934, 26 campesisnos de Casas Viejas fueron juzgados por posesión de armas de guerra y ejecución de actos contra las fuerzas armadas. Tras el juicio, uno fue condenado a seis años, cuatro fueron sentenciados a cinco años, otros dos a tres, seis más a dos años y tres a un año de prisión.Los diez restantes fueron absueltos.
Como pruebas para intentar que el acto sea cancelado, Buenaventura está dispuesto a presentar testimonios vivos de familiares, así como actas parlamentarias en las que se habla de los sucesos.
Sin embargo, muy probablemente, dicho acto llegue a celebrarse, ya que la justicia, como bien se sabe, lleva paralizada desde hace mucho, y en cuanto se ponga, tiene casos anteriores que atender, además de que cualquier juez podría decidir que si existió delito, éste ha caducado, y por tanto, Azaña sería inocente, teoria que ya se llevo acabo durante el 2008, cuando el juez Garzón procuró investigar y acusar a los implicados en el golpe de estado que llevaría a Franco al poder. Por tanto, se apoyaría en la libertad de expresión para permitir el acto, algo que también podría hacer aun considerando que Azaña fue el responsable de los Sucesos de Casas Viejas.