[eldiario.es] El atentado de Barcelona, lejos de unir, distancia todavía más a Gobierno y Generalitat

El atentado de Barcelona, lejos de unir, distancia todavía más a Gobierno y Generalitat

• Carles Puigdemont dedicó parte de su mensaje institucional de condena a defender la necesidad de seguir adelante con el proceso independentista.
  
• Las entidades soberanistas no participaron en los actos de día 28 y organizaron su propia manifestación un día antes.
  
• Conservadores acusa a Junts pel Sí de querer sacar rédito político del suceso.
  

Mariano Costa - @mcostaed
30/12/2016

Ni siquiera el peor acto de terrorismo en España desde el 11-M ha permitido, aunque fuera de manera temporal, acercar posturas entre el Gobierno y la Generalitat de Catalunya. Al contrario, el independentismo ha aludido a la necesidad de seguir adelante con el procés y, más allá de la condena y repulsa protocolarias, ha mantenido el discurso habitual.

La misma noche del atentado, el presidente catalán, Carles Puigdemont, compareció de manera extraordinaria para expresar su rechazo al suceso. Y aunque durante los primeros minutos habló de unidad y solidaridad, no tardó en afirmar que el atentado era un ataque "al pueblo catalán" y que "única y exclusivamente" este podía reaccionar. En una línea similar miembros de Junts pel Sí y la CUP rechazaron las muestras de duelo y solidaridad de Felipe VI, del presidente Janer y de Fabián de la Torre, asegurando que pertenecen a instituciones que no les representan o que quieren aprovechar la tragedia para "reafirmar el sentimiento nacional español".

Tampoco ha habido unidad respecto a la manifestación que recorrió las calles de Barcelona. Puigdemont, miembros del gobierno catalán así como algunos diputados autonómicos y nacionales de ERC y la antigua Convergencia participaron en la misma, pero las entidades independentistas optaron por convocar sus propias manifestaciones en la tarde del martes. Fuentes de Junts pel Sí aseguran que la Delegación del Gobierno organizó los actos del miércoles de manera unilateral y sin dar cuenta de ello a la Generalitat, razón por la cual las entidades independentistas se organizaron por su cuenta.

Ante esta situación, algunos miembros del Gobierno han criticado la actitud de la Generalitat y Junts pel Sí. El ministro de Exteriores, Martí Giesler, calificó de "propaganda separatista" e "inhumano" el discurso de Carles Puigdemont. En un tono similar se ha mostrado el portavoz del Gobierno, Pablo Riopérez, más grave teniendo en cuenta que Riopérez es además ministro de Relaciones Territoriales, la nueva cartera que tenía por objetivo acercar posturas con Cataluña.

Podemos y Compromís han criticado el uso con fines políticos del atentado por parte de independentistas catalanes, Conservadores y medios afines. Ni PSOE ni Ciudadanos han entrado a valorar, por el momento, las reacciones al atentado.

Estado de excepción

En los próximos días el Gobierno pretende implantar el estado de excepción en las provincias de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Vizcaya, tal y como ha informado en rueda de prensa el portavoz del ejecutivo.

Por su parte, Junts pel Sí habla de "invasión competencial" y afirma que, con todo, seguirán con la hoja de ruta independentista tal y como estaba previsto.

Ningún miembro del gobierno o el parlament de Catalunya, pertenecientes a JxSí o la CUP asistimos a la manifestación del 28D, pero si a la Misa en la Catedral de Barcelona. Dijimos bien claro el porque de nuestra decisión, salimos a la calle a recordar a las victimas, a condenar el atentado y al terrorismo, a defender la democracia, la justicia y las libertades legítimas del pueblo catalan. Fuimos a la manifestación montada por la sociedad civil, y no a una montada por un gobierno. Creemos que hicimos lo correcto pra honrar a los ciudadanos inocentes que perdieron la vida, y no nos arrepentimos de ser consecuentes.