ACTO DE PRESENTACIÓN DE EN COMÚ PODEM (Podem, ICV, EUiA, PCPE, PC, Equo)

ACTO DE PRESENTACIÓN DE LA CANDIDATURA DE EN COMÚ PODEM

Moltes gràcies a tothom per venir!

Como bien sabéis, desde los grupos políticos que configuramos la Izquierda catalana y el cambio socia tenemos la voluntad de ir a las elecciones con una candidatura de unidad popular y de presentarnos ante la sociedad como una alternativa creíble para el cambio político. Hemos estado negociando con las diversas formaciones políticas que conforman el Frente del Cambio y con las que forman el Grup Parlamentari de l’Esquerra Plural, así como con las que no forman parte de ninguna de ambas organizaciones. En el proceso hemos conseguido aglutinar a las fuerzas progresistas y soberanistas en torno a un programa de consenso social. Un programa que abra el debate político catalán y estatal a la oportunidad de una reforma profunda de las instituciones, así como la defensa de unos valores democráticos irrenunciables a nuestro parecer. Por fin existirá una coalición catalana que defiende los derechos a la vivienda, a la autodeterminación, a una sanidad de todos, a una escuela pública de calidad y a formar una familia de manera estable.

(Aplausos).

Vivimos en un Estado que trata a la gente con una ideología contraria con prepotencia y arbitrariedad. Un Estado en el que cualquiera que tenga unas ideas que defiendan la libertad, la igualdad y la fraternidad entre los ciudadanos y pueblos de España es perseguido, insultado, difamado y, en casos extremos, encarcelados. Sí, vivimos en un país en el que ha habido presos políticos catalanes y vascos. Todos ellos víctimas de un gobierno que no acepta un hegemonía que no sea la suya, un pensamiento que no sea el propio. En cuanto te sales un poco de la línea impuesta por el bipartidismo en este país te conviertes en un proetarra, un antisistema o un bolivariano. Nosotros hemos venido a decirles a todos esos que ladran que se pueden hacer políticas de forma diferente en este país. Políticas inclusivas de la población, de los trabajadores y de los distintos pueblos que conforman el Estado. Hemos venido a decirles que puede existir un Estado del Bienestar sin hipotecarlo a los grandes bancos. Que se puede incrementar la productividad a través de la intervención del Estado, al que todos votamos. Que se puede representar a la gente sin defender los intereses de los lobbies que gobiernan este país. ¡Aunque las verdades duelan, lo seguiremos diciendo más alto y claro que nunca!

(Aplausos).

Hay gente que se piensa que el problema catalán se debe al adoctrinamiento por parte de las instituciones de la Generalitat. Es bastante valiente afirmar esto, teniendo en cuenta que una gran parte de la sociedad catalana reivindica sus derechos desde hace tiempo. Cuando ellos ganan las elecciones es porque el pueblo es soberano y tiene criterio. Cuando las pierden y tienen miedo de consultar a la gente, es porque los radicales y los antisistema se han apoderado de los medios de comunicación y tienen al país manipulado. Es el maniqueísmo, el conmigo o contra mí. La herramienta más antigua de los demagogos, aquella que provoca conflictividad social y regulariza las faltas de respeto. Nosotros, por nuestra parte, queremos ser un movimiento de fraternidad, que hermane a los diferentes pueblos y ciudadanos de España en un proyecto común. Para que la gente normal, esa que se parte el espinazo todos los días trabajando, vea que el dinero de sus impuestos está bien invertido. Para que no hipotequemos sus ahorros a los rentistas y la gente que vive a través de contemplar como suben y bajan el precio de sus acciones. Acciones, que no enriquecen al autónomo o al trabajador, sino que abultan la enorme cartera de los accionistas de las petrolíferas, los bancos y las constructoras. ¡Queremos un reparto justo! ¡Un país del que todos nos sintamos un orgullosos! ¡Un país verdaderamente democrático que escuche a la gente!

(Aplausos).

El problema catalán, al igual que el resto de problemas actuales, se debe en gran parte al déficit democrático de la los gobiernos sucesivos de este país. No quieren que el pueblo decida cuáles son las prioridades y cuáles son las líneas generales en las que debe moverse un partido de gobierno. Prueba de ello es el artículo 135 CE, que cede nuestra soberanía fiscal al Banco Central Europeo y a sus inversores, que por mucho que sea un Banco Central sigue siendo privado. También prueba de ello es el artículo 123 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, que regala nuestra soberanía financiera a la banca privada, impidiendo al gobierno  pedir créditos a bancos centrales, dejándonos en manos de las fluctuaciones de los mercados financieros. También, el Tratado de Maastrich nos arrebata nuestra soberanía monetaria, de manera que no podemos devaluar la moneda para incentivar el crecimiento, dificultando la salida de las crisis económicas y enriqueciendo a los poderosos y especuladores. Hemos perdido la voz y el voto sobre nuestra política económica general, y esta pérdida da alas a los partidos tradicionales para recortar y privatizar nuestros servicios públicos para pagar los intereses a los bancos y compensar la escasez de liquidez. Los recortes, en este caso, no son una opción política, como lo sería para Alianza Liberal, sino que se tratan de una imposición. Una imposición contra un pueblo al que no se quiere informar, un pueblo al que le dicen que tiene que apretarse el cinturón sin explicar muy bien por qué. Un pueblo al que se le explica que para que a todos nos vaya bien, tiene que haber gente que se embolse miles de millones de euros en intereses y beneficios, mientras cada vez quedan menos ciudadanos de clase media y la renta de las familias se desploma. ¡Ya está bien de tomarnos el pelo al pueblo!

(Aplausos).

Por si fuera poco, el problema de España no es solo el abultado déficit democrático, sino también un déficit en derechos. Esos individuos que cantan glorias a España y que tiene pulseritas rojigualdas son los mismos que luego se olvidan que un patriota lo primero que tiene que hacer es cumplir su Constitución. ¿Por qué que dice el artículo 149 que el Estado tiene competencia exclusiva en materia de sistema monetario y bases de la planificación general de la actividad económica? ¿Por qué dice el artículo 128 que la riqueza sea cual fuere la titularidad tiene que estar sometida al interés general? ¿Por qué si el gobierno quiere planificar la economía en aras del interés general la Unión Europea se lo impide y le obliga a aceptar sanciones y humillaciones? Todos sabemos por qué. Lo cierto es que este documento hace tiempo que fue vendido a la banca y las multinacionales europeas.

(Aplausos).

Por nuestra parte, creemos que debemos volver a restablecer el orden. Creemos que lo justo y necesario es que primen el derecho y la democracia que primaron antaño. Cuando el derecho a un vivienda digna era más importante que el privilegio de los bancos de tener miles de viviendas vacías. Cuando el derecho a una sanidad y a una educación pública y de calidad tenía prioridad sobre concertar aseguradoras y escuelas privadas. Cuando los partidos progresistas defendían todos el derecho a decidir, como una forma de expresar la voluntad de los pueblos y confraternizar con nuestros conciudadanos. Nosotros no somos los antisistema. Al revés, somos los defensores del sistema: de un sistema democrático, social y de derecho que impere sobre la anarquía económica y financiera que cunde en nuestro país. Por ello, hemos decidido que el nombre de nuestra plataforma será En Comú Podem. Porque la acción democrática y social solo se puede hacer si olvidamos nuestras diferencias. Si unimos a la mayoría de la población, con problemas y amenazas similares, en torno a un proyecto común que produzca un cambio en Catalunya así como a nivel estatal. Por supuesto, será necesario un proceso de primarias. Por lo pronto, la Secretaria General interina de este movimiento será Ada Saura, la presidenta del Grup Parlamentari de l’Esquerra Plural en el Parlament. Eso hasta que se celebre el proceso de primarias que tendrá lugar teniendo en cuenta a las diferentes corrientes ideológicas que existen en la coalición. Ella es quien ha dirigido nuestra acción política y quien ha recuperado la dignidad para la democracia parlamentaria en este país. Y ella es quien será candidata a las primarias por la candidatura “Una altra Catalunya és posible”. Con todos vosotros, la incansable Ada Saura.

(Gran ovació de los asistentes).

Bon dia a tothom! Avui és un gran dia per a la democràcia a Catalunya! Avui comença el procés constituent per recuperar la sobirania dels catalans!

(Aplausos).

Después de dos legislaturas nefastas para el bienestar social en Catalunya y en el resto del Estado, en las que, por un lado, los nacionalistas catalanes de izquierda han preferido aliarse con la derecha conservadora para una vía democrática antes que pactar un gobierno progresista y, por otro, el Gobierno español ha continuado desafiando los derechos de los trabajadores y privatizando miles de millones de euros en beneficios que antes eran del sector público. Claro, porque el Sr. Fernández sigue intentando hacer creer a los ciudadanos que vendiendo empresas financieras y productivas va a ayudar al autónomo y a las clases medias. Concretamente, el autónomo o el pequeño empresario no pueden permitirse el lujo de comprar las acciones, a las que solo pueden acceder las grandes fortunas. También obvian que muchas familias dependen del presupuesto sufragado por las empresas públicas. A largo plazo, dichas familias perderán su empleo o su prestación por culpa de que los miles de millones de euros que antes teníamos se han evaporado. Y digo yo, en vez de quitar a las clases medias de este país recursos que son de todos para dárselos a aquellos inversores que pueden permitirse comprar empresas públicas y solo quieren enriquecerse todavía más, ¿por qué no le quitamos parte de su abultada riqueza a dichos inversores para repartirlo entre la mayoría de la gente? A la gente que ya no puede irse de vacaciones. A quienes han que han reducido su consumo desde que empezó la crisis. A esa mayoría de empresarios que tienen que recortarse su bajo sueldo para pagar a sus trabajadores. ¿No sería más lógico y constitucional hacer las políticas económicas de abajo hacia arriba y no de arriba hacia abajo? El problema es que el Partido Popular no se rige por criterios lógicos. Ellos se rigen por criterios arbitrarios, en el que la avaricia es el motor de la economía. Y ya saben que la avaricia de unos pocos es la miseria de otros.

(Aplausos).

Fijaos como estará el panorama, que la persona que pide un crédito para comprarse un Ford Fiesta, de manera que pueda ir a trabajar o llevar a sus hijos al colegio, es vivir por encima de sus posibilidades. Sin embargo, la persona que se compra cuatro Ferraris después de haber especulado en Bolsa o después de invertir su patrimonio en una SICAV para no pagar impuestos se ha ganado su dinero honradamente. Ahora mismo es lo que existe en Catalunya. La cultura del que tiene más dinero es siempre el más trabajador, mientras que la persona descontenta que antes era clase media y que su poder adquisitivo ha bajado después de la crisis es una desagradecida y no merece el respeto social. Esa cultura que impregna a los medios de comunicación, que enarbola como modelos de éxito al que tiene más dinero por tener cien fábricas en Bangladesh o a quien gana más por canciones que tratan a las mujeres como objetos y a los trabajadores como delincuentes. ¿Qué ha pasado con la imagen de ese padre o madre de familia trabajador que consigue un buen sueldo gracias a su humilde trabajo? ¿Demasiado simple y sencillo? Pues bien, mientras otros representan partidos cuya bandera es la ostentación y el éxito, nuestra bandera es la de la sencillez y la humildad. No queremos ver al trabajador que antes cobraba un sueldo normal por trabajar ocho horas teniendo ahora dos trabajos, no llegando a su nivel de vida anterior. Por otra parte existe el viejo mito de que la izquierda gasta más que la derecha. Nada más lejos de la realidad. El problema es que en la izquierda nuestras prioridades de gasto son otras. Mientras la derecha prioriza el gasto que ahorra a las grandes empresas y fondos de inversión millones de euros en impuestos, la izquierda prefiere gastar en los más humildes, en su formación, su salud y su bienestar para que puedan tener una vida digna.

(Aplausos).

Como ha dicho mi compañero y amigo Felip, En Comú Podem es una  candidatura de inclusión. No venimos a cambiar nada, pues nuestros derechos son inherentes a la condición de democracia de nuestro Estado. Lo que venimos a hacer es desalojar de las instituciones a aquellos que inaplican y se saltan las leyes catalanas y estatales que protegen los derechos de la gente. Aquellos que aprobaron la ley mordaza y a aquellos que mantienen una ley catalana de fuerzas y cuerpos de seguridad antidemocrática. Aquellos que privatizan empresas públicas, rebajan impuestos a los ricos y mantienen sus privilegios fiscales, tanto desde las instituciones catalanas como desde las instituciones españolas. Aquellos que niegan el derecho de los catalanes a decidir cuál es su forma de gobierno. Aquellos que rechazan que el jefe del Estado es un cargo de vital importancia que no corresponde a una dinastía, sino al conjunto de los ciudadanos. Los que dicen que en el artículo 1 de la Constitución pone que Catalunya no puede votar, ¿se han leído bien el artículo? Hasta donde yo sé, dicho artículo es el que explicita que vivimos en un Estado democrático. ¿Desde cuándo los Estados democráticos impiden que uno de sus pueblos decida libremente sobre su futuro? También dice que vivimos en un Estado de derecho. En los estados de derecho, se respetan los tratados internacionales firmados por el país, entre los cuáles se encuentra la Carta de las Naciones Unidas que defiende abiertamente el derecho a la autodeterminación. Aquí los únicos que no respetan las leyes son señores socialistas y populares, que creen en la privatización de beneficios y la socialización de las pérdidas. ¡Eso es transgredir una ley, no poner urnas en las calles!

(Aplausos).

Pero está claro que no todos somos iguales ante la ley. O por lo menos, en vez de regirnos por la legalidad vigente, nos regimos por la ley del embudo. Ancho para los de arriba, los grandes lobbies financieros y empresariales, y estrecho para los de abajo, los trabajadores empobrecidos, los autónomos, los parados, los catalanistas. Pero no esos falsos catalanistas que dicen defender a Catalunya pero no presentan unos presupuestos, reducen los impuestos a los ricos o se llenan la boca hablando de un proceso constituyente mientras seguimos sin apenas cambios en Catalunya. Sr. Sanchez y Sra. Ferrusola, no solo valen las palabras. Los ciudadanos deben ver que sus representantes dirigen verdaderamente los intereses de los catalanes. Es más, muchos catalanes todavía no entienden que si los partidos de izquierda independentistas abogan por la vía democrática del referéndum, ¿por qué mantienen su pacto con los conservadores de Unidad Nacional? Muy posiblemente sea porque se sienten mucho más cómodos con ellos que con En Comú Podem.

(Aplausos).

Vosotros sabéis que yo nunca he pertenecido a ningún partido político. Fui elegida como independiente. Pero no soy una independiente a lo Mario Draghi (Risas), elegida por la troika. Soy independiente pero de los poderes externos. De los bancos, de los multinacionales, al igual que el resto de mis compañeros de coalición, con independencia de sus siglas. Por ello, me presentaré a las primarias. Simplemente para optar a un proyecto de país más justo para los catalanes. Un proyecto de país en el que las políticas no tengan como fin desestabilizar, sino ayudar a los ciudadanos a través de los poderes públicos. Todos estamos acostumbrados en el Parlament a la prepotencia desestabilizadora del PP, que aprueba una rebaja fiscal con el apoyo de los independentistas a los ricos, reduciendo los ingresos de la Generalitat, pero luego exige que el Govern pague a las farmaceúticas. ¡El único peligro para las farmeceúticas y para cualquier negocio es un gobierno del PP! Es un gobierno que al único negocio que defiende es al suyo propio con los fondos de inversión y los ricachones a los que les venden el Estado del Bienestar. ¡En Comú Podem está aquí para decir: Basta ya de hipocresía!

(Aplausos).

Estamos aquí para defender a la gente. A la gente a la que llaman antisistema por querer unas pensiones y unos salarios dignos. Por querer una escuela pública sin barracones. Por querer una sanidad sin colas interminables. Ellos, que son los más prosistema del mundo, sencillamente porque creen en un sistema democrático, social y de derecho. Los únicos antisistemas son los que defienden una Constitución y un Estatuto en el que se consagra el pluralismo político, pero luego tienen encerrado al President Macià por sus ideas. El President Macià, por cierto, no pactó con la derechona. Pactó con Iniciativa per Catalunya, uno de nuestros socios. Más le valdría aprender al Sr. Antoni Sanchez de su altura de miras, porque la deriva neoliberal de Junts pel Sí ha condenado a los votantes de ExLL a aguantar el tedio de la indefinición política.

(Aplausos).

Nosotros, en compañía de nuestros socios: Podem Catalunya, Equo, Iniciativa per Catalunya Verds, Esquerra Unida i Alternativa, Partit Comunista dels Pobles de Espanya, Procés Constituent y el resto de independientes y coaliciones locales. Somos muchos, es por eso que tienen miedo desde los poderes financieros. Porque saben que no somos cuatro gatos. Que somos una fuerza poderosa para devolver la estabilidad social y el consenso a Catalunya. Hay quienes prefieren imponer el consenso, ejemplo de ello son los mal llamados “Acuerdos” de Burgos, más bien las Capitulaciones de Burgos, inconstitucionales, para acabar con un pensamiento por la fuerza. Nosotros no tenemos miedo al consenso entre los diversos componentes de la sociedad civil. Un consenso que venga desde abajo, realizado de forma democrática, no desde los despachos. En definitiva: queremos un proceso constituyente, que acabe con la hegemonía de los actuales partidos, que no han sabido responder a los problemas de la ciudadanía adecuadamente. Que han preferido velar cada uno por sus propios intereses o por los de sus amigos antes que ejecutar un programa de choque contra la crisis de las clases medias y trabajadoras y su empobrecimiento. ¡Es hora de que la soberanía vuelva a donde nunca debió de marcharse! ¡Adelante! ¡En Comú Podem!

(Gran Ovación).

Rodrigo Burgueño escribió:Jordi Espadaler.
Que ustedes quieran disputar votos a ExLL vale, pero de ahí a llamarlos neoliberales cuando ustedes han hecho poco más que ellos, es tirar piedras hacia vuestro propio tejado.
Los neoliberales somos nosotros señora Saura, no se olvide. No nos líe, que en los malvados mercados ya no cabemos tantos.

No parece que haya habido una deriva neoliberal de ExLL, sino una deriva socialista de UN. De ahí que pierda tanto sus votos.

Felip Viladecavalls escribió:

Rodrigo Burgueño escribió:Jordi Espadaler.
Que ustedes quieran disputar votos a ExLL vale, pero de ahí a llamarlos neoliberales cuando ustedes han hecho poco más que ellos, es tirar piedras hacia vuestro propio tejado.
Los neoliberales somos nosotros señora Saura, no se olvide. No nos líe, que en los malvados mercados ya no cabemos tantos.

No parece que haya habido una deriva neoliberal de ExLL, sino una deriva socialista de UN. De ahí que pierda tanto sus votos.

Lucía Martín

No vamos a caer en la trampa de hacer un debate de buenos y malvados, como la derecha siempre pretende. Vamos a hablar de hechos, Sr. Espaldaler. Un hecho es que durante toda la legislatura no se han aprobado los presupuestos, ni se han dotado por ley partidas presupuestarias para hacer políticas sociales. Otro hecho es que el Govern aprobó una rebaja fiscal para las clases más ricas sin garantizar ingresos públicos que paguen las prestaciones sociales y los servicios públicos. Otro hecho es que el Govern ha preferido dejar en manos de la patronal los criterios del Plan de Empleo juvenil. Otro más es que el Govern ha preferido crear estructuras de Estado para la policía mientras no había estructuras de Estado financieras, como una Banca pública, que hagan fluir el crédito entre las PYMES y garantice los derechos de los ahorradores. Tampoco se han revertido los recortes en Sanidad ni en educación ni se ha dado pie a que las clases trabajadoras y a los autónomos puedan rehacer su vida destruida por la estafa a la que ustedes llaman crisis.

Cualquier persona con dos dedos de frente puede darse cuenta que este Govern no ha trabajado por las clases medias de este país a través de la mejora de los servicios públicos. Al contrario, han imposibilitado su financiación a través de rebajas fiscales regresivas. A eso es a lo se han dedicado en el PP y en AL en los Parlamentos donde han podido. A fomentar la desinversión pública y promover las iniciativas privadas, pero solo para los que pueden permitirse tales iniciativas. Si ustedes llaman a esto una deriva socialista, ahora entendemos por qué quierían hacer un debate moral y no político.

Felip Viladecavalls escribió:Lucía Martín

Sr. Ducat, una abstención táctica es todavía peor que votar a favor. Porque tienen la intención de aprobar la ley pero no quieren que se les note. Es el modelo de la hipocresía parlamentaria que han venido manejando desde que entraron a Junts pel Sí. Quizá esa sea su forma de ver el parlamentarismo. La mía es otra totalmente distinta, quizá le suene: para mi el parlamentarismo significa  representar a mis electores.

Y tienen la cara de echarle la culpa a la herencia recibida para no revertir los recortes. Han tenido una legislatura entera y no lo han hecho porque han asumido como propio el espacio ideológico conservador de Unidad Nacional.

El ICF no es una banco publico. ¿O es que el ICO es una banco publico? No señor, un Instituto de crédito tiene otras características mientras que un banco es una entidad financiera que puede tener mucho más alcance y que además puede prestar dinero al Estado, si es público, en mejores condiciones. Un buen plan hubiera sido reformar el ICF para crear un banco público catalán. No se ha hecho por la cercanía al poder financiero que ha demostrado ExLL durante su mandato.

Se pueden habilitar partidas presupuestarias sin aprobar la ley general presupuestaria (los presupuestos). Así que no mienta sobre los porqués de su inacción en cuanto a la construcción de de vivienda oficial o en cuanto a las medidas para combatir la pobreza energética. Está claro que su pasividad hundía sus raíces en no tocar ni con pinzas al oligopolio eléctrico y bancario.