Bonaventura Casals: "No seremos títeres del PP"

Buenos días, gracias por venir.

España sufrió un Golpe de Estado fascista. Los españoles nos plantamos, y en las calles pudimos demostrar que no reuniciaremos a nuestros derechos ni libertades.

Como recordarán, en aquellos momentos de caos y anarquía el País Vasco formó una "asamblea constituyente" y se declaró independiente y al margen de la jurisdicción española. Las tropas europeas, que miraban como el Golpe transcuría en España, intervinieron inmediatamente en Euskadi.

Con una situación de miedo y terror después del golpe, el señor Fernández nos convocó, a los dirigentes de los principales partidos de España. Héctor Fernández, por el PP; Pello Urizar, por el PNV-EH Bildu; Lara Pérez, por el PSOE; Jorge Rocamora, por Ciudadanos; un servidor por el PCPE; y Antoni Sànchez Miranda, por los nacionalistas catalanes. El señor Fernández se había reunido con el señor Urizar, y por lo que nos contó ya habían firmado un pacto. No vinieron a negociar, a llegar a consensos, a intentar buscar las aportaciones que los presentes pudieramos hacer. Vinieron a imponernos su pacto y a, simplemente, buscar un par de firmas en aquello que habían acordado.

Desde nuestro partido defendimos que en la nueva Constitución, consensuado, o en la vieja Constitución, modificada y consensuada, España se constituya como Estado Federal. Lo de las autonomías tuvo su gracia en 1978, pero es la hora de dar el paso: la Constitución debe reconocer que España es una Nación de Naciones, y que el mejor modo de preservarlas es mediante el federalismo descentralizado. Por ello, sabiendo que el PP es el enemigo más grande de descentarlizar España, fue algo muy pisitivo que se comprometieran en descentralizar algunas competencias. Y por ello, propuse ciertos puntos a incluir en dicho pacto: perfeccionar el Tribunal Constitucional para convertirlo en una herramienta neutral, establecer mecanismos de fiscalización del gobierno central por parte de los territorios, regular las competencias de todos los niveles administrativos para evitar suplantaciones y duplicidades... Y, evidentemente, que el "pacto" se extendiera a todos los españoles. Desde el PCPE luchamos por la igualdad, por lo que pedimos que los privilegios vascos pudieran ser la normalidad vasca, en un Estado descentralizado y federal.

El señor Rocamora no intervenió en toda la reunión: se limitó a mirar a la mesa. La señora Pérez, en un principio, llamó al diálogo, hasta darse cuenta de que aquello no era un intento de consenso sino que el PP y el PNV habían venido a vendernos enciclopedias.

No lo negaré: aquella reunión fue casi una pelea. La frase del señor Fernández lo resumió bastante bien: "¿Alguien tiene algo más que añadir? sería bueno conocer la opinión de todos y terminar lo antes posible". Opinión, esta es la palabra. Todos charlamos, discutimos e incluso algunos se enfadaron, pero a la hora de la verdad todo eran opiniones. El texto que quisieron hacernos firmar era el mismo, sin variar una coma, que habían aprovado el PP y el PNV. El PSOE, en afán de protagonismo, firmó el pacto. Quienes mantuvimos la dignidad no lo hicimos. En el texto definitivo ni siquiera se incluían las modificaciones que se habían acordado.

Después de acusarnos de no querer dialogar, el señor Fernández y sus títeres ratificaron la condena de los españoles. Cedieron más y más al País Vasco, e ignoraron más y más a los españoles que, aunque a él no le importe, vemos como una agresión el hecho que algunos ciudadanos españoles, por nacimiento y residencia, tengan menos derechos y más deberes que los otros. No seremos los títeres del PP.

Es por eso que el PCPE no dará su firma, jamás, a un agravio tan descomunal a los españoles. No introducirá nunca en su programa "diferenciar más a los españoles", ni nadie les verá poniendo una alfombra roja al Partido Popular. Nos mantendremos firmes, y lucharemos por una descentralización real, no solo parcial en el País Vasco. Lucharemos y seguiremos denunciando que algunos, que decían que la Constitución es perfecta, ahora quieran cambiarla solamente para dar más ventajas a aquellos que, por las armas, las han peleado.

Muchas gracias