[ABC OPINIÓN] Ha llegado la hora de que el PSOE defina que rol quiere ocupar en España

Los eternos complejos del PSOE se recrudecieron tras la derrota electoral que Rubalcaba, en un desatino sin precedentes, encabezó. En las primarias socialistas de 2011 recordemos que los viejos barones -impulsados por Felipe González- hablaban sobre la imposibilidad de que el Secretario General del PSOE no tuviera vergüenza de decir "Viva España", mientras la otra mitad pedía renovación siguiendo el concepto del ex-presidente Zapatero sobre aquello de que España es una Nación discutible dando libertad a los nacionalismos que siempre se han sentido más cómodos con el socialismo en Moncloa por su buenismo sobre lo expuesto en la Constitución, sobre la indisoluble Nación que es España.

Los desafíos de Artur Mas pusieron de relieve un asunto que los políticos rehuían debatir. El Partido Popular, con un nuevo liderazgo claro y limpio, ha dicho con claridad su interpretación de los textos constitucionales y qué haría en caso de subversión a su orden. El PSOE nuevamente cometió el error de salir a la palestra a atacar al Gobierno de España sin reprochar los impulsos del president de la Generalitat y sus otrora aliados en el Parlament. ¿Es que acaso todo vale por partidismo, incluso cuando hablamos de España?

César Alarcón, un neozapaterista declarado, debe definir el rol que quiere para el PSOE en España. ¿Qué modelo quieren para España? Que lo definan de una vez. Si eligen a España deben aceptar las consecuencias como ya las ha aceptado el PP, que los nacionalismos ya no podrán ser aliados en el Congreso de los partidos nacionales en tanto la alianza de CiU o del PNV implican continuar el drenaje de la realidad de España y los chantajes a los cuales España se ha sometido desde 1977. Si eligen dar espacio a los reclamos separatistas que acepte el destino de su fracaso como partido estatal y que ceda el puesto de la socialdemocracia española a quienes realmente no tengan vergüenza de ambicionar la Moncloa para decir Viva España.

Leía hace tiempo en un artículo como funciona el "tempo" político del PSOE. Pierden elecciones, de ahí un congreso extraordinario donde se toman posiciones de izquierdas, a medida de que se acercan las elecciones el mensaje se modera. Se acaban por ganar unas elecciones y la práxis política acaba en la derecha... Se vuelven a perder elecciones y vuelta a empezar.

Que el PSOE no tiene un proyecto político está claro y eso va mucho más allá del modelo de estado que tengan porque entre terceras vías, federalismo asimétrico, hasta el café para todos se han escuchado mil opiniones y mil modelos dintintos.

Por otro lado es algo que uno puede esperar de un partido cuyo único fin es gobernar y llegar al poder... sin ningún tipo de programa y sin importar los acompañantes. Sólo hay que recordar que en Galicia se gobernó con el BNG, en Cantabria con el PRC, en Andalucía con IU, en Euskadi con el PP en Canarias con CC,...

Eso es el PSOE.

Un saludo.

Interesante.

Pero lo mejor es cuando hablan de "nacionalistas". ¿Quien es nacionalista? Yo soy nacionalista, nacionalista español, y por lo tanto nacionalista plural. No me gusta el rumbo que toma la definición de "nacionalista", ahora es algo parecido a "enemigo del estado", y siempre se aplica a los nacionalismos periféricos.

El artículo puede resultar hasta interesante, aunque decir que el liderazgo del PP es "limpio", con tanto escándalos de corrupción de por medio, chirría bastante. El artículo es también un intento de poner en cuestión la españolidad del PSOE, aunque no se cómos e cuantifica la españolidad. Si es PSOE tiene problemas de credibilidad no es, no al menos en exclusiva, por su forma de entender España, sino por otras muchas cuestiones que tienen más que ver con la forma de hacer política, la gestión, las prioridades y las actitudes frente a los especuladores.
No será en todo caso, por no agitar lo suficiente la bandera de España, cuestión que para la ciudadanía dudo que sea prioridad de primer orden.

Catalunya, visto lo visto, ha iniciado un camino sin retorno. El pueblo catalán caminamos hacia nuestra plena libertad a pasos de gigante, y esa masa que camina hacia la libertad cada día se hace más grande cuando se da cuenta de que en el Estado Espanyol, de la mano del bipartidismo imperante, no hay partido mayoritario alguno que de respuesta a los anhelos de la ciudadanía catalana. Unos amenazan con los tanques y otros nos salen ahora, después de haber pasado varias veces por el poder, de que el Federalismo es la solución. Ni PP ni PSOE saben dar respuesta a la "cuestión catalana".