Actos PP-Aragón

Conferencia de Francisco Iglesias en Zaragoza. Presenta el acto el secretario general de los populares aragoneses, Chabier Yuste.


Durante la presentación, Yuste habló del tema de moda en la política aragonesa: un hipotético referéndum en La Franja sobre a que comunidad autónoma pertenecer. Según Yuste, si realmente hay duda acerca del sentimiento aragonés o catalán de los ciudadanos de La Franja, el referéndum debe hacerse, y su resultado debe ser acatado por todo aquel que se llame demócrata, le guste o no. Ha matizado también que, personalmente, prefiere que los ciudadanos de La Franja decidan seguir siendo aragoneses. El líder de los populares aragoneses ha recalcado la importancia de consolidar la alternativa socialista que el PP supone, y la necesidad de que también en Aragón haya un grupo parlamentario socialista popular.


Iglesias se refirió a la crisis energética en el contexto de Aragón. A juicio del vicesecretario de organziación de los populares, la solución está en acabar con la dependencia energética del extranjero, y desarrollar plenamente las fuentes de energía nacionales, como es el caso de la minería de las cuencas aragonesas. Además, ha afirmado que Aragón posee un enorme potencial energético, ya que es una tierra idónea para construir parques de energía eólica y para ubicar paneles solares. De esta forma, Aragón puede ser una comunidad pionera en cuanto a energía limpia y renovable. Además, todas estas fuentes de energía suponen puestos de trabajo en la comunidad.

Iglesias se ha referido también a las consecuencias de la crisis energética y es que, como siempre La crisis la provocan los que se han estado enriqueciendo en tiempos de bonanza, pero pretenden que la paguemos los demás. Esto es, sencilla y llanamente, privatizar las ganancias y nacionalizar las pérdidas. Ha defendido un sistema económico solidario y social, basado en un sistema tributario en el que pague más quien más tiene, y que las rentas del capital tributen más que las rentas del trabajo. Como siempre digo, es de justicia que se grave menos el dinero que obtenemos con el sudor de nuestra frente, que el que se obtiene del trabajo de otros.