"Son el futuro de nuestra nación. Son los mejores y más brillantes de nuestros estudiantes. No puedo aguantar esta injusticia."

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"Son el futuro de nuestra nación. Son los mejores y más brillantes de nuestros estudiantes. No puedo aguantar esta injusticia."

Esa es la diferencia entre las manifestaciones en el mundo comunista dictatorial y el mundo libre capitalista.

Voy a hacer un par de comentarios sobre ello. Os pongo en perspectiva. Ésta es una de las familiares de uno de los detenidos tras manifestarse contra el régimen de Lukashenko. Manifestación que se produjo en un sitio neurálgico de la ciudad de Minsk ante el nuevo fraude electoral en las elecciones bielorrusas de 2006. En esta manifestación se pueden ver imágenes de forcejeo policial muy similares a las que se han vivido aquí en Sol. Pero hay diferencias.

En el video, como podéis ver, una familiar se lamenta, no sólo del hecho de que sean detenidos, sino también de que los detenidos son los mejores y más brillantes estudiantes bielorrusos. Eso, lo aleja de la percepción del manifestante medio del 15-M. Y no es demagógico afirmarlo, porque es así. (1)

También otro pequeño aspecto es que hablamos de una manifestación por fraude electoral en Bielorrusia. Aquí, en España, todo el mundo puede participar en unas elecciones libres, supervisando incluso cada partido con sus correspondientes apoderados e interventores que el proceso electoral se desarrolla con limpieza. Por tanto los movimientos de protesta en España se pueden canalizar fácilmente hacia alternativas políticas nuevas que representen esos ideales que persiguen.

Otro hecho relevante es la libertad de prensa que se vive en ambos países (watch?v=GV2PV99WnQI). Aquí podemos ver como la prensa es fuertemente perseguida y tratada como si se tratara de un delito cometido por un criminal. En España aunque la emisión de televisión es francamente deficiente, se pueden encontrar, en todo el gran abanico de medios, posturas muy distintas. Esto se debe, inequívocamente, al pluralismo democrático que permite nuestro sistema. La calidad de la democracia no se mide por sus partidos, sino por la libertad de prensa de sus medios.

Pero el hecho que más importa es el fin o el objetivo de la manifestación. En una se pide el fin de un Estado fuerte que lo supervise, censure y regule todo, en la otra se pide justo lo contrario. Se pide aumentar las regulaciones, se pide que el Estado actúe para salvar a los ciudadanos. Y esa es la diferencia esencial.


(1) Hay estudios sociológicos sobre el 15M que muestran grandes errores de muestreo, como extrapolar una muestra ridículamente (los salmantinos) a todo un movimiento nacional. Hay tanta manipulación en los informes sociológicos que hay algunos que incluso afirman que la clase más representativa del 15-M es la alta o media-alta.

No es la primera vez que escucho lo de la manipulación sociológica en el 15-M. La estadística es una ciencia compleja, y por desgracia a día de hoy muy pocos estadísticos son imparciales.

Ese titulo se puede aplicar tanto a bielorrusia como a España... porque vaya injusticia con nuestra generación de jovenes