Re: Precampaña del Partido Demócrata Popular (PDP)

Cuña de radio (País Vasco)

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Voz A: "Ojalá mis hijos recibieran en la escuela una educación en condiciones"
Voz B: "Me gustaría que nuestra cultura regional fuese un motivo de unión, más que de discordia"
Voz C: "Si nadie me ayuda, acabaré cerrando mi restaurante, porque estoy con el agua al cuello"
Voz D: "Lo único que pido es que quien nos gobierne sea gente competente"
Voz E: "¿Tan difícil es lo que pedimos?"

Voz de Pablo Morenés: "No será fácil, pero en estos próximos cuatro años podremos dar los primeros pasos. Soy Pablo Morenés y encabezo la lista del Partido Demócrata Popular a las elecciones vascas. Con tu apoyo, conseguiremos hacer avanzar Euskadi en la buena dirección. PDP, una apuesta segura."

Dicha cuña se ha emitido, además, en euskera:

A ahotsa: "Nahiago nuke nire semeek behar bezalako hezkuntza jasoko balute"
B ahotsa: "Gustatuko litzaidake gure herrialdeko kultura lotuta egoteko arrazoia izatea, eta ez liskarrak sortzeko"
C ahotsa: "Inork laguntzen ez badit, nire jatetxea itxiko dut, itota nago-eta"
D ahotsa: "Eskatzen dudan gauza bakarra da gobernuan egongo direnak jende aditua izatea"
E ahotsa: "Hain zaila da eskatzen duguna?"

Pablo Morenés-en ahotsa: "Ez da erraza izango, baina hurrengo lau urteetan lehenengo urratsak eman ahal izango ditugu. Pablo Morenés naiz eta Alderdi Demokrata Popularreko zerrendaren burua naiz euskal hauteskunde hauetan. Zure laguntzari esker, lortuko dugu Euskadi bide egokitik gidatzen. PDP, apustu segurua."

Mitin en Vitoria

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Intervención de Pablo Morenés, candidato a lehendakari.

¡Muy buenos días a todos!

Vitoria será pronto el centro neurálgico del nuevo gobierno autonómico, no muy lejos de este pabellón, y nos llena de ilusión saber que pronto, ahí, en la cámara legislativa del País Vasco, contaremos con un grupo parlamentario propio y trabajaremos por lo que os estamos prometiendo. Muy probablemente, el PDP se convertirá en la segunda fuerza política de Euskadi tras estos decisivos comicios. Pero, al margen de hacer apuestas, lo que sí podéis dar por descontado es que cada escaño que obtengamos será exprimido hasta el final como si fuera el único que tuviéramos: en ningún momento nos olvidaremos de que cada uno de esos asientos representa a miles y miles de vascos.

Hace unas horas, hemos visitado una escuela pública de la capital, y la conclusión que saco de dicha visita no es otra que lo que ya sabía de antemano: el sistema educativo admite muchas mejoras y hay que trabajar en ellas, pero no como un asunto más, sino como una prioridad. Sé que para muchos partidos políticos la educación no tiene demasiada importancia, y prefieren centrarse en fomentar otras cosas cuyos resultados puedan verse a medio plazo, como, por ejemplo, construir nuevas infraestructuras. Pero, para el PDP, un país en el que los menores reciben una educación en condiciones es un país que tiene su futuro garantizado. Podemos gastar el dinero en construir puentes y hacer rotondas, pero teniendo claro que eso no deja de ser algo secundario.

No os quiero decir que poseamos una varita mágica con la que hacer del sistema educativo vasco un auténtico éxito, pero sí que vamos a mejorarlo sustancialmente. Para ello, no bastará con invertir más y más dinero en educación, porque algo material no puede solucionarnos un problema tan inmaterial como lo es el desorden personal con el que salen muchos menores de la escuela. Es sabido por todos que se trata de un problema de calidad de la enseñanza, que sólo se puede solucionar mejorando la formación de los docentes; nuestras políticas educativas irán enfocadas hacia eso, en buena medida. Pero, desde luego, si creemos que la clave está en gastar más, nos equivocamos de pleno. El dinero es la solución fácil, pero muchas veces tiene muy poco de eficaz: que no os engañen.

No os vamos a prometer el oro y el moro, como podréis comprobar en nuestro programa electoral, en el que se recogen con claridad nuestras propuestas. Entre ellas, si llegamos al gobierno, reduciremos considerablemente el número de alumnos por profesor. Actualmente es un índice demasiado alto, lo que ha empeorado de forma notable la calidad de la enseñanza, que hoy día aquí y en el resto de España es, para qué engañarnos, manifiestamente mejorable. Queda mucho por hacer, para lo que os demostraremos que podéis confiar en el PDP.

¡Gracias!