Comparecencia en la sede Laborista en relación al resultado del referéndum constitucional

Carlos Lerner en la sede nacional de los Laboristas en Madrid.

Hemos escrito una nueva página en la Historia de España, en la de nuestra democracia y en la de los derechos de todos los españoles. Lo que hoy hemos visto en los resultados ha sido una muestra de unidad y apoyo para seguir con el cambio en España, hacia la igualdad y hacia la sociedad. Estamos todos juntos en esto, pues todos queremos pasar página del pasado y comenzar a trabajar en las medidas sociales que hagan nuestro país un lugar mejor para vivir. Se aproximan ahora unas elecciones generales en las que se volverá a dar una nueva composición al Congreso y espero realmente que todos los partidos políticos den prioridad a los servicios sociales que tan machacados han sido durante todo este tiempo. Es un gran día y merece celebrarlo. Enhorabuena a todos, especialmente a todos los que han colaborado para que lo que hoy vivimos sea una realidad nacional.

"No es posible torcer nuestra voluntad de vivir en libertad y armonía"

No es la primera vez que España dispone de una Constitución propia y democrática. No es la primera vez que parece que este país se dirige hacia la libertad y la justicia al mismo solemne paso. A lo largo del día de hoy, el pueblo español ha dado un ejemplo al mundo. En este día, los conceptos de “fraternidad” y “democracia” han cobrado vida en cada una de las papeletas que se han incluido en unas urnas dispuestas, por vez primera desde hace décadas, por el conjunto de los españoles.

Hoy, millones de héroes se han acercado a votar, y más allá de la libertad y la democracia que su voto va a traer a nuestro país, existe una recompensa mayor. Cuando dentro de algunos años, la nación entera rememore y festeje este día, el de la democracia definitiva, el de la Constitución popular, un hijo se acercará a su padre y le preguntará “y tú, papá, ¿qué votaste?”, y el que hoy ha votado a favor de esta Constitución, podrá mirar con orgullo a aquel que es sangre de su sangre y le dirá: “Yo voté por que este país fuera el mejor en el que pudieras crecer; yo voté a favor de esta Constitución”. Y eso, el tener un miembro de la familia que votó a favor de esta Constitución para proteger a los que vinieran después, llenará de orgullo a toda su descendencia. Pero hoy, a quien llena de orgullo el apoyo masivo a este texto, es a mí. Y gracias a ustedes, a todos los que, como yo, han votado a favor de este Constitución ya nuestra, hoy sé que en estos momentos no podría estar en un mejor lugar que no fuera este país.

Unidad y serenidad deben prevalecer. Este éxito de toda la nación española, desde la gente de Galicia a la de Murcia, y desde la gente de Cádiz hasta la de Cataluña, no puede verse eclipsado por grupúsculos que de manera interesada y egoísta buscan y buscaran imponer sus demandas mediante procedimientos inhumanos y antidemocráticos. Trataran de vencernos, pero tras esta última dictadura, el pueblo español ha vuelto a demostrar que es invencible, que no es posible torcer nuestra voluntad de vivir en libertad y armonía.

Pensamos distinto. Tenemos prioridades diferentes. Y sin embargo, hoy hemos demostrado que tenemos algo que está por encima de todo eso. España lanza un mensaje contundente al mundo: este pueblo siempre ha sido democrático. Y de ahora en adelante, no tan solo debemos trabajar por consolidar nuestra democracia, sino que con la experiencia adquirida debemos tornarnos en un referente democrático para el resto de pueblos del globo. No podemos olvidar el sufrimiento que padecieron nuestras familias tras décadas de dictadura. Algo de ellos queda en nosotros. Seamos, pues, la primera fila de los ejércitos diplomáticos que batallan por la democracia.

Cuando en el largo y pedregoso camino que ahora continuamos, las piernas nos tiemblen, porque nos temblarán, solamente deberemos mirar atrás y adelante, y el instinto nos hará avanzar, y nos hará avanzar a un paso todavía más veloz. Hoy, lo vuelvo a decir, estoy orgulloso de pertenecer a este bravo pueblo. Gracias a todos y cada uno de los españoles que han caído o sufrido persiguiendo esta democracia, y gracias a todos y cada uno de los españoles que hoy han hecho posible esta Constitución.

Quisiera tener un agradecimiento especial al Gobierno de México, por haber mantenido y reconocido al Gobierno democrático español durante todos estos años. Y a los países que colaboraron con el General Franco o facilitaron su dictadura fratricida, el pueblo español se sintió dolido y herido, pero de igual modo que dentro de nuestras fronteras miramos, con memoria, hacia el futuro, hacemos lo propio con el resto de países.

Damas y caballeros, creo que expreso el anhelo de todos al exclamar: ¡Larga vida a la Constitución!

Si tienen alguna duda, tanto el señor Lerner como yo les estaremos agradecidos de que nos la trasladen.