Félix Yllescas ingresará en un monasterio cartujo

La Sagrada Congregación para los institutos regulares y seculares, órgano de la Curia Romana encargada de las órdenes y congregaciones religiosas, ha dado hoy a conocer una reforma en la Regla de San Bruno, que gobierna la Orden Cartuja. Teniendo en cuenta el aislamiento en que viven los monjes cartujos; y teniendo en cuenta que en toda comunidad cristiana autónoma debe haber un obispo; la Sagrada Congregación ha decretado que en todos los monasterios cartujos haya un obispo que ejerza las funciones propias de su oficio sobre la comunidad. Así, cada comunidad cartuja se convertirá en iglesia particular y dejará de depender de la diócesis del lugar.

Para hacer efectiva esta reforma, la Sagrada Congregación ha hecho pública una lista de obispos que deberán ingresar en el correspondiente monasterio cartujo a la mayor brevedad. La lista es la que sigue:

[...]
·Ilmo. sr. Félix Yllescas Robles, hasta ahora obispo diocesano de Vitoria; ingresará en la Cartuja de Aula Dei, archidiócesis de Zaragoza.
[...]

Como es bien sabido, la Regla de San Bruno impone a los monjes una vida de meditación y silencio, limitando mucho la comunicación entre los monjes y prohibiendo absolutamente la comunicación con el exterior. Por tanto, es muy probable que no se vuelva a saber nada de los obispos listados.

Una noticia sorprendente, sobre todo que vaya a la cartuja del Aula Dei.

Bartolomé Rigueira, secretario general de la Conferencia episcopal:

Todos estamos muy sorprendidos por la decisión de la Sagrada Congregación. Tanto por la modificación de la Regla de San Bruno como por la forma de ponerla en práctica. Parece difícil, a priori, encontrar vocación contemplativa en un obispo diocesano, cuya tarea consiste precisamente en regir los asuntos de la vida cotidiana. Sin embargo, si la Santa Sede ha observado en los obispos listados una vocación compatible con el carisma cartujo, no queda sino alegrarnos por que haya más cristianos consagrados a implorar nuestra salvación.

Le deseo, por tanto, lo mejor al Obispo Yllescas y a todos los demás compañeros en el episcopado que ingresarán en monasterios cartujos.

Timoteo Valcárcel escribió:Bartolomé Rigueira, secretario general de la Conferencia episcopal:

Todos estamos muy sorprendidos por la decisión de la Sagrada Congregación. Tanto por la modificación de la Regla de San Bruno como por la forma de ponerla en práctica. Parece difícil, a priori, encontrar vocación contemplativa en un obispo diocesano, cuya tarea consiste precisamente en regir los asuntos de la vida cotidiana. Sin embargo, si la Santa Sede ha observado en los obispos listados una vocación compatible con el carisma cartujo, no queda sino alegrarnos por que haya más cristianos consagrados a implorar nuestra salvación.

Le deseo, por tanto, lo mejor al Obispo Yllescas y a todos los demás compañeros en el episcopado que ingresarán en monasterios cartujos.

A mí no me sorprende tanto...

FDP: ¿Y no era más realista que se fuera a trabajar a Roma en cualquier congregación? Esta decisión de la Curia es cuanto menos irreal, habida cuenta de que los monasterios seguramente estén formados por comunidades pequeñas, y destinar un obispo a cada una es...

Jorge J. Churchill escribió:A mí no me sorprende tanto...

Bartolomé Rigueira, secretario general de la Conferencia episcopal:

Quisiera saber, Excelencia, si lo que no le sorprende es la modificación de la Regla o su puesta en práctica. ¿Acaso había adivinado una vocación contemplativa en el Obispo Yllescas?

Manuel Gonzalez escribió:FDP: ¿Y no era más realista que se fuera a trabajar a Roma en cualquier congregación? Esta decisión de la Curia es cuanto menos irreal, habida cuenta de que los monasterios seguramente estén formados por comunidades pequeñas, y destinar un obispo a cada una es...

FDP: Es cierto que no es nada probable que la Curia romana tome una decisión como ésta. Sin embargo, no está injustificada, ni carece de precedentes históricos a su manera. Está justificado porque los cartujos no tienen casi comunicación con el exterior (y por tanto, no la tienen con el obispo del lugar). Si uno de ellos es obispo, se soluciona gran parte del problema. Además, puede interpretarse como un firme apoyo a la Orden cartuja, lo mismo que así se interpretó la conversión del Opus Dei en prelatura personal. Además, a lo largo de la Historia, la Santa Sede ha constituido en iglesias particulares a comunidades monásticas (abadías nullius, se llamaban). En esos casos, el abad hacía las veces de obispo. Por último, enviar un obispo a trabajar en la Curia tiene un significado muy distinto que recluirlo en una comunidad monástica de pura clausura.