Hoy abre sus puertas un nuevo programa, Cuestionándolo todo.

Las bases de cualquier sociedad

Cualquier sociedad de cualquier momento de la historia siempre ha necesitado de algo vital para su existencia; la clase trabajadora.

Ningún tipo de poder o institución se puede sostener sin el trabajo de esta clase, no hay comida sin nadie que cultive la tierra o críe animales, no hay edificaciones sin alguien que las construya, no hay objetos sin nadie que los fabrique, ningún tipo de poder político o institucional existe que pueda crear una sociedad sin la clase trabajadora, ni una dictadura, ni una oligarquía; un dictador o un grupo de personas que dictan no pueden ejercer su poder sin una clase trabajadora que responda su voluntad; ningún poder como el de un burgués puede ser ejercido sin el sometimiento de la clase trabajadora. La clase trabajadora es la única clase completamente autónoma y es la única clase que mantiene con vida a las demás clases sociales con su trabajo y, por esa misma razón, por su autonomía es la única clase que realmente tiene el poder sobre las demás, un pueblo consciente de su poder con respecto a sus gobernantes no temería a estos sino que al revés, sería el gobernante el que temería al pueblo pues este depende de su pueblo, su poder y su vida dependen del trabajo y del sometimiento de la clase trabajadora, es decir, del pueblo. Al igual que una máquina no funciona sin piezas una sociedad no funciona sin trabajadores, si las piezas de una máquina no se someten a la máquina, el poder de la máquina sobre las piezas desaparece, si en una sociedad los trabajadores deciden hacer caso omiso de sus gobernantes y se dedican nada más a su propia vida, el poder ejercido por el gobernante desaparecería pues una persona no puede obligar a cientos a que trabajen para el si estos cien no quieren; el poder siempre fue del pueblo pero este se lo dio y se lo da voluntariamente a su gobernante.

El régimen dictatorial y oligárquico de nuestra sociedad, el poder del gran empresario de nuestra sociedad no es más que un montón de palabrería que ejerce miedo e ingnorancia a la clase trabajadora actual, en cuanto el pueblo se de cuenta de su propia autonomía, de que no dependen de un poder ajeno al pueblo mismo, el mismo pueblo sabrá recuperar lo que le pertenece, su propia libertad y acabará con el poder de aquellos a quien no le pertenece, los grandes empresarios, los políticos corruptos de nuestro tiempo, a los banqueros, al Club Bildelberg y a las cúpulas del G8 además del parlamento europeo y a todos los amos de este orden criminal que dirigen la máquina gigante que oprime al pueblo sin ningún tipo de escrúpulo.

"El poder es del pueblo, cuando se de cuenta, no existirán mas máquinas gigantes que lo opriman, el pueblo creará su nueva sociedad libre de injusticias y de poder que no provenga de él mismo"

Una persona cualquiera