El FMI analiza la situación del crudo global

Ben Bernanke, actual Director del Fondo Monetario Internacional, analiza la situación del crudo global

Según el FMI, si se mantiene el precio del petróleo, la alta recesión provocaría una estagflación, en varios servicios, afectando primordialmente a países que no lo producen. La UE busca prevenir futuras crisis en la mayoría de sus países, por la alta demanda de petróleo, creciente por la recuperación económica, en un mercado internacional, claramente trágico. La recomendación de cambiar la estructura de su producción de energía tradicional a alternativas disminuirá en mediano plazo su demanda.
Según la OPEP, el precio podría mantenerse arriba de los 195 dólares por barril, hasta mediados de Julio, cuando una nueva reunión en de la Organización dará el veredicto final sobre la economía mundial. La causas de esta suba generalizada están explicadas en base al cierre e incendios de varios pozos petroleros en Venezuela, siendo en el mejor de los casos, recuperable hasta el 10% del petróleo esperado.

El petróleo actualmente es, sin duda alguna, la primera fuente de energía del mundo. Aunque efectivamente las energías alternativas deben seguir creciendo y afianzándose mediante una comercialización basada en la eficacia -que debe irremediablemente suponer un incremento de la tecnología y una solvencia que actualmente no posee-, el FMI sigue estimando que el petróleo que actualmente posee el planeta es suficiente para abastecer durante más de 20 años la actual demanda, sin que esto suponga un problema.

Lo que se ha venido llamando "crisis del petróleo" actualmente, sólo responde a una sencilla ecuación, y para nada a "un problema con los pozos petrolíferos de Venezuela", ya que les recuerdo que Oriente Medio y África siguen teniendo las mayores reservas de crudo del planeta. La ecuación a la que me refería tiene por objeto nombre y apellidos: Irak y China. China, desde 2007, viene lanzando una gran "ofensiva comercial" por hacerse con los mayores pozos petrolíferos, y actualmente podemos decir que, con los oleoductos terrestres que tiene fijados en Irán y el resto de Oriente Medio, ya se está consumiendo el 21% del petróleo mundial (pasando del 10% que consumía en 2009), y se prevee que para 2030 pueda llegar al 40% (actualmente el líder en consumición de crudo es Estados Unidos, con un 25%, y una bajada del 2% en 7 años).

Como decía, China se ha asegurado más del 60% de la extracción de petróleo en Oriente Medio, y sólo Estados Unidos mediante Arabia Saudí gana en esta particular batalla al Imperio Chino por el control de los pozos en el territorio citado. Si a esto le sumamos las exportaciones que mediante rutas marítimas tiene en América Latina y en África, encontramos una de las claves para analizar la actual situación: China y USA mantienen atado el 46% del petróleo en el mundo, y Arabia Saudí comienza a plantearse el negociar con China antes que con Estados Unidos, a la vista de que su tendencia de consumo es al alza y resulta un mercado apetecible, eficaz, solvente y seguro.

Además, la otra parte de la ecuación es Irak: este país cuenta con unas reservas mayores que las de Irán, y su explotación estaba fijada para 2012-2015, pero la situación social que allí impera, aún mantiene los problemas para el desarrollo de estas plantas de extracción. El petróleo que habita en este territorio pertenece casi de forma exlusiva a USA y China, pero su retraso está causando estragos para las mayores petrolíferas, que ven como el dinero invertido (en este caso es China la que mayor capital se ha dejado tanto monetario como tecnológico) no está dando frutos, y el nerviosismo está imperando.