Sobre el debate abierto por la Xunta para la prevención de incendios

Galicia es una comunidad en la que se producen muchos incendios todos los veranos. Está claro que sus grandes bosques necesitan una protección especial si no queremos perder la esencia de esta región, que radica en sus verdes montes y en sus costas. Felicitamos al Gobierno de la Comunidad de Galicia por dar un paso en este sentido, y aprovechamos para ofrecer nuestra propuesta.

1. Sobre limpieza de bosques. Es uno de los puntos claves en la prevención de incendios y creemos que no debe seguir dependiendo de los voluntarios. Aún así, somos conscientes de la gran cantidad de recursos que habría que destinar para convertir a los voluntarios en un cuerpo público, que obviamente perjudicaría los presupuestos de la sanidad y la educación gallegas entre otras cosas. Así, lo único que proponemos es la realización de una gran campaña antes de cada verano, si puede ser colaborando con organizaciones ecologistas para aumentar significativamente el número de voluntarios. Queremos dejar claro también que nos oponemos a que la limpieza de los bosques quede en manos de empresas privadas ya que no es un tema en el que nos podamos permitir que los intereses económicos de la empresa de turno estén por encima del interés de todos los gallegos de que sus montes estén limpios.

2. Sobre las penas por provocar incendios. Además de las multas económicas, que creemos deben ser utilizadas para la reforestación de la zona incendiada por el culpable, coincidimos con todos los grupos políticos en el aumento de las penas de cárcel. Provocar un incendio es un crimen contra todos, no sólo contra las comarcas afectadas. Creemos además, como ya han hecho público algunos grupos políticos, que las zonas quemadas pueden ser recalificadas a zonas urbanizables si no lo eran antes del incendio. Queremos señalar que no es lo mismo un pirómano que alguien que provoca un incendio por intereses económicos. El correcto tratamiento de los primeros es vital para que no puedan reincidir ya que son enfermos mentales.

3. Sobre las subvenciones a asociaciones con fines medioambientales. Estamos de acuerdo, siempre y cuando desde la Xunta se vigile que esa subvención sea plenamente utilizada para la prevención real de incendios, es decir, en campañas para reclutar voluntariado, en la formación de voluntarios y en las acciones directas de limpiezas de montes.

4. Sobre la determinación de zonas de alto riesgo de incendio. Todos los bosques de Galicia sufren un alto riesgo de incendio, y nos parecería injusto que unas zonas fuesen más protegidas que otras, exceptuando parques regionales de gran interés ecológico por su fauna y flora. Creemos que la solución es aumentar las dotaciones del cuerpo de bomberos significativamente asignándolas de los medios suficientes para llevar a cabo su labor. Por otra parte, nos oponemos a que el Ejercito se encargue de la vigilancia de los bosques ya que eso podría significar una militarización de la zona. La única ayuda que creemos que debe ser prestada desde el Ejercito es la cesión de aviones y helicópteros para la sofocación de incendios.

5. Sobre las labores de reforestación. Creemos que la Xunta debe ser la encargada de realizar esta tarea, colaborando con organizaciones ecologistas cuando sea posible pero en ningún caso subvencionandolas, ya que esta no es su labor. La creación de un cuerpo de reforestación que emplee a parados es la mejor opción, y para la formación de este cuerpo si vemos con buenos ojos la colaboración de organizaciones ecologistas. También creemos que la reforestación debe ser llevada a cabo con especies autóctonas únicamente.

Miguel Gomez, Portavoz de Ecologistas en Acción.

Estoy totalmente de acuerdo con usted.
Tengo el placer de conocer la comunidad gallega y es cierto que los incendios abundan en verano.

En mi opinión debería hacer cumplirse una ley que obliga a los propietarios de fincas y parcelas en zonas montañosas y boscosas a mantenerla limpia de rastrojos, de modo que los incendios no pudiesen extenderse tan rápidamente. Y, en cuanto a las zonas que no son de propiedad privada y son de la Xunta, ellos deberían ocuparse de su mantenimiento. Ahí puede haber una buena razón para crear más puestos de trabajo: crear 'cuidadores de bosques'.