17 DE NOVIEMBRE DE 2018 [EFE] UNA CONCENTRACIÓN EN BILBAO POR LA DIMISIÓN DEL GOBIERNO VASCO ACABA EN UNA BATALLA CAMPAL

NACIONAL

UNA CONCENTRACIÓN EN BILBAO POR LA DIMISIÓN DEL GOBIERNO VASCO ACABA EN UNA BATALLA CAMPAL

Efectivos de la Ertzaintza ayudan a varios manifestantes pacíficos a levantarse tras la batalla campal

• La concentración fue convocada por colectivos y asociaciones de diversas ideologías para pedir pacíficamente el fin del bloqueo
  
• El acto fue reventado por encapuchados violentos que destrozaron el mobiliario urbano y atacaron a la Ertzaintza
  
• El portavoz de los colectivos pacíficos ha emitido un comunicado exigiendo responsabilidades por la actuación policial
  

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Media docena de colectivos cívicos convocaron en la mañana de hoy una concentración pacífica frente a la delegación del Gobierno Vasco en Vizcaya para exigir una vez más el fin de la inactividad política y parlamentaria y exigir la dimisión en bloque del ejecutivo vasco y la convocatoria de elecciones urgentes. Los manifestantes hicieron una sentada frente a la delegación, en la céntrica calle Gran Vía de Bilbao, en la que se leyó un manifiesto conjunto que exigía "elecciones o dimisión" y que abogaba por una salida pacífica al conflicto. El manifiesto aseguraba que "mientras el desgobierno se está llevando a las empresas y a los inversores a otras comunidades y países los obreros pasan hambre en sus casas esperando encontrar un trabajo que no hay".

La concentración se desarrolló con total normalidad hasta que alrededor de las 12:35 del mediodía, 35 minutos después del comienzo del acto, apareció un grupo de entre 30 y 50 encapuchados que empezaron a insultar a la Ertzaintza y a desearle la muerte a varios de los miembros del Gobierno, entre ellos también miembros de Bildu, que hasta ahora se habían visto ajenos a toda revuelta ciudadana. La tensión escaló cuando un grupo de cinco jóvenes desplazaron varios contenedores y les prendieron fuego. En ese momento la Ertzaintza, la policía autónoma vasca, actuó y cargó contra los jóvenes tanto con porras como con escopetas lanzadoras de pelotas de goma. El enfrentamiento se produjo en dos bandos diferentes a lo ancho de la Gran Vía, quedando imposibilitada la escapatoria de numerosos miembros de los colectivos pacíficos que se encontraron en mitad de una batalla campal sin ninguna vía para escapar de ella.

Los violentos salieron en defensa de los jóvenes que habían sido atacados por quemar los contenedores y se emprendió una gran pelea con barras de acero y lanzamiento de piedras y otros objetos contundentes. Los manifestantes pacíficos intentaron escapar del lugar, aunque para ello tuvieron que pasar muy próximos al lugar donde estaba sucediendo el enfrentamiento entre la Ertzaintza y los violentos, y por ello varios miembros de las asociaciones cívicas fueron confundidos y recibieron numerosos golpes y pelotazos. Al verlo, algunos miembros de los colectivos intentaron decirle a los policías que detuvieran sus ataques, pero fueron respondidos con más golpes y agresiones, dado el aun escaso número de ertzainas que se encontraban en el lugar. Solo una vez llegaron los refuerzos, se pudo evacuar con seguridad a los manifestantes pacíficos y contener a los violentos.

La operación se saldó con un total de 26 detenidos, 7 violentos heridos que fueron trasladados al hospital de Basurto y 4 ertzainas con contusiones que fueron atendidas por los equipos médicos en el lugar. También se produjeron numerosos destrozos materiales, tales como contenedores quemados, coches con las lunas rotas e importantes desperfectos en la Delegación del Gobierno Vasco, contra la cual se lanzaron piedras y se realizaron pintadas insultantes.

El Gobierno Vasco se ha reunido de urgencia para analizar la situación, aunque todavía no ha habido ningún comunicado oficial al respecto. Los colectivos pacíficos implicados han exigido la dimisión inmediata de la consejera de seguridad nacional, Edurne Olaizola, por la "actuación descontrolada" y la "violencia desmedida" que a su juicio ejercieron los ertzainas contra los manifestantes pacíficos.