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«Hitler se cortó el pelo al ras, se quitó el bigote y huyó a España» El escritor Abel Basti señala en «El exilio de Hitler» que el nazi murió en Argentina
ANTONIO ASTORGA
Día 26/06/2010 - 09.07h23 comentarios

El genocida Adolf Hitler, junto a Eva Braun y su mesnada criminal, llegó a Barcelona en las últimas horas del día 26 o primeras del 27 de abril de 1945, revela el periodista Abel Basti en «El exilio de Hitler» (Absalón Ediciones).
-Asegura que el führer estuvo varios días en España, en Barcelona, en Cantabria, donde se reunió con sus hombres de confianza. ¿En qué se basa?
-Sí, es así. Hitler esperó. Existen tres documentos:del servicio secreto alemán, que da cuenta de que llegó a Barcelona, procedente de un vuelo de Austria; del FBI, que indica que «el Ejército de los Estados Unidos está gastando la mayor parte de sus esfuerzos en localizar a Hitler en España»; y un tercero del servicio secreto inglés, que habla de un convoy de submarinos con los jerarcas nazi y oro saliendo con rumbo a Argentina, haciendo una escala en las islas Canarias.
-¿Hay testigos que vieron al nazi en España?
-Sí, y dieron cuenta de su presencia, como un militar de la División Azul, pero otros muchos -por temor- no quieren que aparezcan sus nombres. Un testigo importante es un nonagenario jesuita, quien se recluyó en un monasterio, y que dispone de mucha información de su presencia en España.
-Usted aporta un documento secreto alemán donde Hitler aparece como uno de los pasajeros evacuados en un avión de Austria a Barcelona ese 26 o primeras horas del 27 de abril de 1945.
-Fue una comunicación oficial secreta con copias al piloto Werner Baumbach, que emigró a Argentina y trajo consigo su copia. Baumbach, junto a otros conocidos pilotos nazis, trabajó para el proyecto aeronáutico de Perón.
-¿Qué hizo Hitler para que no le reconocieran?
-Hitler se cortó el pelo, al ras, casi pelado. Y se afeitó el bigote. Con esto fue suficiente como para pasar desapercibido; además, claro está, no se movía abiertamente en público. El corte de su bigote dejó al descubierto una cicatriz que tenía sobre el labio superior, que no era conocido por la gente común.
-¿Es falsa la versión del Tercer Reich de que el dictador se suicidó, junto a su amante Eva Braun, el 30 de abril de 1945 en un búnker en Berlín?
-Nunca hubo pruebas de esa muerte. No hay pericias criminalísticas que demuestren el suicido. El Estado alemán dio por muerto a Hitler casi once años después, en 1956, por presunción de fallecimiento. O sea que, legalmente, para Alemania, Hitler estaba vivo después de 1945. No sólo vivo, sino que además no era un hombre condenado por la justicia; no había orden de captura, ni proceso judicial en su contra. Mientras Hitler se encontraba en España, en el búnker se representaba una gran farsa, cuyo actor principal fue uno de los dobles de Hitler. Durante las últimas horas, el doble fue drogado y preparado para que representara el acto final.
-¿Piensa que el suicidio fue un «salvoconducto», mera excusa, para que Hitler pudiese huir?
-La fuga de Hitler estaba prevista en un gran plan de evasión -de hombres, capital y tecnología- preparado por los nazis. Ese plan, en 1945, tuvo luz verde de los norteamericanos, merced a un pacto secreto militar. Los miles de nazis que se pudieron fugar hacia Occidente -de los cuales unos 300.000 llegaron a Estados Unidos- fueron «reciclados» para luchar contra el comunismo. Hitler se transformó en un dinosaurio vivo, protegido y refugiado.
-En «El exilio de Hitler» incluye usted el documento de los servicios secretos británicos que revela que Hitler huyó en submarino a Argentina, con escala técnica en las Islas Canarias.
-Y dice que, antes de que el convoy de submarinos partiera de España, la Armada norteamericana retiró todas sus unidades navales del Atlántico Sur. También indica que los submarinos nazis «intercambiaron mensajes» con la flota norteamericana. Los mensajes los interceptaron los ingleses.
-¿Cómo se arrastró el gusano nazi en Argentina?
-Hitler, que llegó a Argentina con 56 años, vivió como un prófugo. Con identidad falsa y tratando de pasar lo más desapercibido posible. En los primeros años vivió en una estancia cercana a Bariloche, luego en otras partes del país, ya que cambió de residencia en más de una oportunidad. Siempre lo acompañaron dos guardaespaldas, a veces tres. Su actividad política se limitó a algunas reuniones con viejos camaradas y con algunos militares argentinos. Hitler murió en Argentina en los años sesenta; Eva Braun -más joven que él- le sobrevivió

Ese cabrón fue apoyado por los países capitalistas para destruir el comunismo.
Enemigo común aliados comunes.

¿Pero piensa que se exilió?

Yo pensaba que se suicidó.
Ahora tengo mis dudas.

Yo creo que lo del suicidio fue un montaje,aquí en este planeta los unicos que se suicidan son los Japoneses.

Yo soy pro-nazi, como todos sabeis y estoy bien documentado por varios libros leidos de grandes historiadores nacional socialistas, y comunistas tambien, y casi todos concuerdan con la afirmación de que Hitler murio suicidandose, dado que hubiera sido muy difícil que Hitler hubiera sobrevivido, sin su medicación, ya que sufria de parkinson muy avanzado ya desde 1936 ya lo sufria, al ver que los comunistas y los aliados llegaron a Europa con su desembarco en Normandia mas los comunistas por Polonia, él empezó a negitarse, y el siempre dijo una cosa, si muero, morire en el III Reich Alemán, no en otro país. Eso sí muchos mariscales, generales, conocidos etc si que se exiliaron, pero siempre con el consentimiento de Hitler ya que el siempre quiso que: Goebbels, Göring y sus mas intimos amigos se exiliaran, pero el sentimiento de ellos era tan grande que no les permitia morir en otro país que no fuera Alemania. Por eso yo digo que Hitler murio suicidandose, nada mas a añadir.

Por otra parte, ojalá hubiera sobrevivido para que hubiera vivido durante mas tiempo.

RSS / Actualizado 26 de Junio 2010 / Visitas Hoy 351427

Se Comprueban Las Huellas de Hitler en Argentina.

Por Prof.Carlos A.Méndez-Thort

Se Comprueban Las Huellas de Hitler en Argentina.

El periodista Abel Basti ha plasmado en un libro que Adolphe Czapnik,llamado Hitler,vivió veinte años en la Argentina una vez concluida la II Guerra Mundial,y considera"Una farsa"la versión oficial de que el Führer se suicidó en el Bunker de la Cancillería de Berlín en 1945.

El genocida nazi y su mujer,Eva Braun,habrían llegado a las costas patagónicas en un convoy de submarinos alemanes con algunos tripulantes ingleses,dirigidos por un anónimo Comandante de la Real Inteligencia Naval Británica,los cuales desembarcaron en una Caleta de la Patagonia con escolta norteamericana entre julio y agosto de 1945,y,a partir de allí,emprendieron una vida nueva como ciudadanos criollos que se reconstruye en el libro"Hitler en Argentina",de reciente aparición.

Si bien los investigadores aun no terminan de precisar la cantidad exacta de desembarcos,tienen acreditados al menos tres en Caleta de los Loros,una pequeña ensenada situada en la provincia sureña de Río Negro,adonde la Marina Francesa pide le dejen rescatar a esos submarinos enterrados por la Armada Argentina en 1945.

"Con un magnetómetro determinamos que tres sumergibles alemanes están a unos 30 metros de profundidad en esa zona,cubiertos por una capa de arena con la cual la Marina Argentina los ocultó en aquel momento.Este hallazgo,que fue denunciado a las autoridades navales,es una de las muchas pruebas que existen sobre desembarcos de submarinos nazis en Argentina",aseguró a los militares franceses.

Para Basti,que trabaja con investigadores europeos para establecer el itinerario de Hitler tras la II Guerra Mundial(1939-1945),el déspota del Tercer Reich vivió primero en una estancia cercana a Bariloche,luego en una finca en Villa La Angostura,y finalmente en La Falda,Córdoba.

Esa finca,situada en medio de un frondoso pinar a orillas del lago Nahuel Huapi,pertenecía al empresario argentino Jorge Antonio,uno de los hombres de confianza del tres veces presidente del país Juan Domingo Perón,pero,luego,de 1955 a 1966 la Iglesia Católica y los Militares Argentinos cursillistas mantuvieron a Hitler vigilado,y oculto,hasta su muerte con su nueva identidad argentina.

Las fotos de esa residencia aparecen en el primer libro de Basti,"Bariloche nazi",una suerte de guía turística sobre los lugares que sirvieron de refugio a Hitler y otros jerarcas como Martin Bohrmann,Joseph Mengele y Adolf Eichmann,de los cuales,los dos primeros terminaron sus días en el Paraguay.

En esta segunda obra,el periodista presenta lo que considera numerosas pruebas de"Movimientos"posteriores del tirano austríaco en las provincias de Buenos Aires,Córdoba,Mendoza y La Rioja,pero,muy especialmente en La Falda,Córdoba,bajo la vigilancia de la católica Fuerza Aerea Argentina.Al capítulo de Córdoba,situada en el centro del país,es investigado como vital en el armazón de un rompecabezas que todavía no tiene resuelto por completo.

"En la localidad cordobesa de La Falda vivió la familia de Walter e Ida Eicchorn,los principales financieros de Hitler en Suramérica.Hay innumerables cartas cruzadas que prueban que tenían un vínculo muy fluido",cuenta Basti.Los Eicchorn eran primos de los Czapnik-Hitler de la Polonia Austrohúngara,y,al igual que el Führer,eran católicos puritanos de origen judío,el mismo origen que tenía la familia georgiana de Stalin,asi como los Brezhnev,los Beria,los Primo de Rivera,los Degrelle,los Hervás,los Escrivá de Balaguer,y los Franco Bàamonde.

"El matrimonio Eicchorn tenía una criada,Catalina Gamero,que aún vive y me ha relatado que ella misma atendió en 1949 a Hitler,a quien llamaban"el primo polaco",en el hotel que tenía la familia en La Falda.El Führer estuvo allí unos días y luego se trasladó definitivamente a una casa cercana,muy bien disimulada entre la vegetación,que los Eicchorn habían construido en el cerro cordobés Pan de Azúcar",comenta.Esa zona era muy vigilada y oculta por la Fuerza Aerea.

Basti dice que esta versión de Catalina Gamero fue confirmada por un periodista de La Falda que,aún adolescente,ingresó en la casa de los Eicchorn y pudo ver fotos muy recientes de Hitler con Walter e Ida,además de cartas anteriores y muy posteriores a la guerra.

También está corroborada por un documento del F.B.I.reproducido en el libro y que señala que ya en 1945 estaba todo preparado en La Falda para recibir a Hitler.El informante era el jardinero de la familia Eicchorn,destaca.Ese documento había llegado a manos del F.B.I.,obviamente,gracias al Mossad,a la D.S.T.,y a la Inteligencia Británica.

"Hitler en Argentina"incluye además pruebas irrefutables sobre un encuentro del Führer con Ante Paveliç,líder pro-nazi croata de la II Guerra Mundial,quien vino a vivir a la Argentina"bajo protección militar y del episcopado"junto a sus más estrechos colaboradores y estableció casi como un gobierno en el exilio,algo similar hicieron los ucranianos cuando Hitler les visitara asiduamente en la Argentina.

Fue en la ciudad bonaerense de Mar del Plata e incluso participaron Eva Braun y la esposa de Paveliç,subraya Basti(Nota:El líder de la colectividad croata Ante Paveliç era muy amigo de mi Padre,y mi tio,el mellizo de mi Padre,a menudo almorzaba ó cenaba con el encargado de las"Fosas Ardeatinas"en Bariloche...Hoy no tiene ningún valor revelar toda esta historia,pues ellos están todos fallecidos...).

Según Catalina Gamero,quien se enteraba del paradero del líder nazi cuando la operadora telefónica le anunciaba las llamadas de"el primo",Hitler se comunicó con los Eicchorn hasta 1964,cuando murió Ida,lo cual implica que el Führer recién murió a fines de 1965 ó más exactamente a principios de 1966,pues el golpe de Estado de este último año había sido planeado por la Curia más de un doce meses antes.

Muy católico,Hitler había participado activamente el los Golpes de Estado argentinos de 1943,de 1955,y,post-mortem,en el de 1966,asi como en todos los pronunciamientos contra Frondizi…y el F.B.I.sabía arteramente muy bien todo eso en el mismo momento en que ocurría,pero jamás intervino,pues le convenía económicamente no hacerlo…a las Compañías Europeas y Norteamericanas les fueron muy baratos los Golpes de Estado en la Argentina,especialmente a Mercedes Benz…

"También existen certezas comprobadas de que Hitler cruzó muchísimas veces la frontera y se reunió con caudillos paraguayos,en épocas del dictador Alfredo Ströessner(de 1954 a 1965)",sostiene el periodista Basti.La decadencia de la dinastía Ströessner en Paraguay se produjo cuando fallecieron Mengele y Bohrmann,sus últimos apoyos firmes.

Carlos A.Méndez-Thort
Repetto 65;2nd.Fl.Apt.#"9"
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(C1405ADA)Buenos Aires City
ARGENTINA
(Far Southernmost America)
Phone:4-432-0288

Email del Autor: carlosmendezthort@yahoo.com.ar
Página web del Autor: http://www.ametregional1.org.ar

Si ahora buscas, te saldra de todo, si ahora te digo que busques que Hitler se suicido (pruebas de eso) te saldra cantidad, no es lo que digan es lo que "como estaba el" el sentimiento etc.

Me cuesta creer que una persona tan poderosa y tan respaldada en aquel tiempo se suicidara.

Judas manuel escribió:Me cuesta creer que una persona tan poderosa y tan respaldada en aquel tiempo se suicidara.

Pues por mi creetelo.

Yo creo que si que se suicidó, ese tio era un colgao y después de haber causado tanta muerte le pierdes el respeto.

Desde luego mejor que lo hiciera, porque la verdad, yo me pongo de lado de los del ejército rojo y si lo pillo lo mínimo que le hago es arrancarle la piel a tiras con mis propias manos.

Judas manuel escribió:Me cuesta creer que una persona tan poderosa y tan respaldada en aquel tiempo se suicidara.

No debería costarte tanto. Cuando estaba en el ejército, los médicos hicieron varios informes sobre él en los que destacaban que tenía claros problemas mentales. Era un loco y en parte es lógico, durante su niñez las pasó más que putas, así que supongo que se terminaría poniendo tarumba.

Judas manuel escribió:Me cuesta creer que una persona tan poderosa y tan respaldada en aquel tiempo se suicidara.

Precisamente por ser tan poderoso y respaldado, tenía un orgullo propio que hizo que antes de verse detenido o humillado, se suicidase. Vamos, yo sigo creyéndolo.

Alberto Rodríguez Conde escribió:

Judas manuel escribió:Me cuesta creer que una persona tan poderosa y tan respaldada en aquel tiempo se suicidara.

Precisamente por ser tan poderoso y respaldado, tenía un orgullo propio que hizo que antes de verse detenido o humillado, se suicidase. Vamos, yo sigo creyéndolo.

Tienes razón, lo que yo dije...

Ojalá siguiese vivo para que yo mismo le diera cuenta de algunas maravillas que hizo.